Una historia de Kimetsu No Yaiba, donde el protagonista soy yo, en esta historia varios acontecimientos cambiaran para el bien de la trama de la historia, claro que cosas importantes no cambiaran tanto...
Ahora si una breve parte para empezar con...
En la finca Rengoku se podía ver a Mendor, Kyojuro, Senjuro y a un hombre con una máscara de color rosa el cual llevaba una manta que envolvía una funda de una katana
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El hombre simplemente se la entregó a Mendor para que él le quitara la funda y empezar a ver como cambiaba de color al hacer contacto con el sol.
Kanamori: Espero que sea un hermoso rojo
Kyojuro: Es muy probable
Mendor no dijo nada y solo se quedó viendo como el metal de la espada cambiaba lentamente a un tono morado oscuro. Ante los ojos de todos quedo esa espada de color morado oscuro casi de color negro con la empuñadura de color rojo dejando asombrados a todos
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Kanamori: Vaya jamás había visto este tono en una espada
Kyojuro: Aun así, es bastante similar a la flama que usas
Mendor: No, más bien es idéntica a la que esta con usted
Kyojuro: ...
Mendor: Le agradezco que hay forjado mi espada
Kanamori: Solo no la rompas
Mendor: Jamás dejare que se rompa
Así fue como Kanamori se retiró de la finca Rengoku dejando solos a ambos hermanos y a Mendor. Este último se fue a su habitación donde se cambió con su uniforme y puso su espada en la espalda para después salir y pedirle la espada de su padre a Kyojuro, este algo sorprendido pregunto por qué y la respuesta lo dejo sorprendido ya que le dijo que llevaría la espada para que le de fuerza en los momentos más complicados y que solo la usaría en caso de emergencia, Kyojuro asintió y fue a su habitación para tomar la espada y dársela a Mendor. Apenas la tuvo y la puso en su cintura amarrándola de ambos extremos.
