Una historia de Kimetsu No Yaiba, donde el protagonista soy yo, en esta historia varios acontecimientos cambiaran para el bien de la trama de la historia, claro que cosas importantes no cambiaran tanto...
Ahora si una breve parte para empezar con...
En la finca del lobo se podía ver a Mendor el cual estaba durmiendo tranquilamente hasta que se despertó por un rayo de sol que le estaba dando directamente en la cara, Mendor solo soltó un suspiro para después levantarse y dirigirse al baño donde antes de limpiarse la cara vio como tenía marcas de lágrimas en los ojos, Mendor cerro los ojos y se limpio la cara para después salir de su finca y quedarse en el patio viendo el cielo
Mendor: Parece que hoy será un día tranquilo
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Mendor apenas termino la frase y escucho como la puerta de su finca era tocada, Mendor dio un ligero suspiro para después levantarse y dirigirse a ver quien era. Cuando abrió la puerta se llevo la sorpresa de ver a Tanjiro, Zenitsu, Inosuke y las hermanas Kocho. Mendor estaba sorprendido, pero antes de que preguntara algo, Tanjiro hablo
Tanjiro: Hola Mendor-San, venimos para que me siga entrenando
Mendor: ¿Y los demás?
Zenitsu: No planeamos quedarnos detrás
Inosuke: Así es, ¡¡¡Seré el más fuerte de todos!!!
Mendor: Jejeje, se nota tu entusiasmo, pero para siquiera entrenar conmigo tendrán que pasar las pruebas que hizo Tanjiro
Zenitsu: ¿Se refiere al infierno que paso en la finca mariposa?
Mendor: Así es, tendrán que hacer lo mismo por un par de días y después podrán pelear entre ustedes
Tanjiro: Vengan chicos yo les digo que hacer
Mendor: ¿Y ustedes 2 que hacen aquí?
Shinobu: Veníamos a hablar para saber cómo estabas
Kanae: Sabemos que no es fácil lo de...
Mendor: Ya no lo menciones... Y respondiendo Shinobu, estoy bien
Shinobu: Estas seguro
Mendor: Por supuesto... Ahora entren o ¿se quedarán ahí?
Así fue como Mendor dejo pasar a las hermanas las cuales solo lo siguieron hasta el patio donde los 3 jóvenes cazadores ya estaban entrenando, Mendor al ver a Tanjiro por breves momentos se vio a si mismo mientras era entrenado por su padre. Mendor no pudo evitar soltar un pequeño suspiro de tristeza para después dirigirse a los chicos y decirles que aumentaría su entrenamiento, los chicos se sorprendieron, pero no se negaron y acataron la situación. Así fueron pasando las horas hasta que llego la noche donde todos se retiraron dejando a Mendor o eso pensaba ya que las hermanas Kocho se quedaron ya que sabían que Mendor no estaba bien como él decía estar. Mendor se dirigió a su patio donde se quedo viendo el cielo estrellado
