~Juntos~ Carl Grimes y Tú [The Walking Dead]

Atlanta.

El camino no era nada corto. A decir verdad, llegaba a ser tedioso.
El estar sentada sobre el duro lomo del caballo naturalmente causaba calambres en los glúteos de la menor.
Su ahora tutor, también estaba en las mismas, no acostumbraba a cabalgar y por ello de vez en cuando bajaban la velocidad del paso, además, de que cada cierto tiempo paraban para dejar descansar a los pobres animales sedientos, hambrientos y cansados.

En el viaje de ida habían hecho un total de 7 paradas, Rick, quién era antes Jeriff del pueblo, estaba más acostumbrado a cabalgar, de igual modo, el haber estado tanto tiempo fuera de todo ello, provocó que la práctica que tenía, se haya perdido levemente.

Las cosas no iban tan mal, tenían comida y agua, ya estaban a pocos kilómetros de la gran ciudad.
Ya se veían los edificios a lo lejos y el gran puente lleno de autos que inclusive, cubrían ciertas zonas queriendo detener a los zombies que se acercaran como amenaza.

Rick: ¿Habrá alguien con vida allí? -Decidió romper el hielo el ojiazul, mientras miraba al frente con cierta duda, esperaba que su familia estuviera aún con vida, se notaba la tristeza en sus ojos, pues, la angustia de no saber si están bien, lo estaba carcomiendo.

Patrick: Debería... No podemos ser los únicos, si nosotros logramos sobrevivir, los demás igual. -Aseguró con una sonrisa, a lo que Rick igualmente sonrió.
(Tn) recordó la dulce y amable sonrisa de Carl, era igual a su padre, eso le causaba un cosquilleo, estaba feliz, estaba segura de que podría tener a Carl y a Duane como sus amigos y lucharían juntos para protegerse de forma mutua.

Los cascos de los caballos hacían ese típico sonido seco cuando chocaban contra el suelo, la ciudad se fue agrandando hasta que los edificios que antes se veían pequeñitos, se hicieron gigantes de repente.
Pasaron entre los autos de aquél puente, deseando que no haya caminantes cerca, deseando únicamente poder pasar desapercibidos.
La ciudad parecía completamente desierta, Rick se dedicaba a observar a los edificios que estaban aparentemente abandonados o, llenos de esas cosas.
La ciudad estaba en ruinas, no parecía haber nadie vivo allí, los tres aventureros buscaban alguna señal de vida, hasta qué...

Rick: Allí... -Dijo en susurros mientras señalaba un ventanal de un edificio, los dos individuos acompañantes observaron justamente aquél mismo punto, viendo el reflejo de un helicóptero sobrevolando la ciudad.

Patrick: ¡Sigámoslo! -Propuso y el contrario asintió- (Tn) por favor, sostente fuerte ¿Sí? -La menor, obedeciendo al contrario, con sus pequeñas manos sostuvo las prendas de el mismo, agarrándose con firmeza deseando que sea suficiente para no caerse del caballo.

Y allí, inició la persecusión. Rick y Patrick avanzaron velozmente haciendo que sus respectivos caballos corran a una velocidad impresionante por las calles de la ciudad, siguiendo el reflejo del helicóptero que lograban ver a través de los mugrientos y viejos vidrios de los altos y grandes edificios.
Los cascos golpeaban con más estruendo el asfalto y el eco que producían los mismos eran impresionantes, a varias calles se podría escuchar tal ruido, lo que fácilmente provocaría que cualquiera pudiera escucharlos, eso, podía ser bueno o malo, dependiendo de quién los escuche.
Doblaban las esquinas y cruzaban las calles de forma estrepitosa, buscando llamar la atención de quién sea que estuviera manejando aquél helicóptero.
Los adultos quienes montaban los caballos, estaban dispuestos a alcanzar aquél vehículo, mientras que la pequeña (Tn) rezaba por no caer y estrellarse contra el suelo.
Finalmente, doblaron una esquina cerrada en medio de la ciudad, los dos pararon de golpe y los caballos comenzaron a relinchar como locos.

(Tn): ¡¿Q-que sucedió?! -Preguntó algo asustada y agitada sosteniéndose más firmemente del saco del ex director.
El mismo miró a su compañero y este hizo un par de señas para retroceder.
Los jadeos y gemidos comenzaron a apoderarse de los oídos de los individuos allí parados, delante de ellos había una tremenda horda de Zombies.
Rick fue el primero en reaccionar y enseguida se dió la vuelta para volver sobre sus pasos, pero Patrick pudo observar que se detuvo al ver cómo otra horda comenzaba a acercarse a ellos por el mismo lugar de dónde habían venido.
Sin pensarlo dos veces, el pelinegro se volteó al otro lado pero de igual forma se acercaban varios caminantes. Decidieron ir de forma recta, retrocediendo y dirigiéndose directamente en dirección al puente.

Los caballos trotaban veloces, cada vez avanzaban con más rapidez, los zombies al ser lentos no los alcanzarían con facilidad.
Pero, notaron que cada vez se acercaban más y más caminantes hacia ellos por diferentes zonas de la ciudad, hasta llegar a una de las avenidas en la cual venían una gran cantidad de estos hacia ellos, al igual que por detrás y los laterales.
Los tres se miraron asustados y desesperados deseando sea como sea escapar de allí.
De repente escucharon como estruendosamente puertas de vidrio comenzaban a ser destruidas por caminantes dentro de los edificios que miraban a los tres seres vivos con ganas de comerselos y hacerlos parte de ellos, se acercaban más y estaban claramente rodeados por esos seres repugnantes y putrefactos.

Los caballos relinchaban con desespero, los mayores buscaban una forma de escapar y la pequeña intentaba crear alguna distracción o estrategia para escapar... Pero estaban completamente perdidos.

¿Tan poco durarían en el mundo zombie?
¿No lograrían encontrar la familia de Rick?
¿No sé reencontrarán jamás con Morgan y Duane?

Continuará.