Donde la bondad de Alex Leigh cura el corazón de Evan Rosier.
O
Donde el amor a veces no siempre puede tener un final feliz.
Portada realizada por @DreamsGraphics de la editorial @Editorial_silver
Plot by: @lovsinclr
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El gran comedor comenzaba a llenarse de a poco durante la hora del desayuno entre estudiantes que se despertaron temprano y aquellos que se quedaron dormidos. Alex tenía la mirada fija en su horario recientemente se los acaba de entregar su jefa de casa la profesora Pomona Sprout, intentando ponerse al día de cuál sería su primera clase: Herbologia.
Sintió un leve empujón a su izquierda encontrándose con Rosie le restó importancia conociendo que era su forma de decir buenos días. — Tendré que pedirle a la profesora Sprout un permiso para dejarnos entrenar el viernes antes de que Potter nos gane, lo escuché hablar sobre un nuevo entrenamiento para ganar la copa, es su último año y quiere ganar, no me rendiré sin darle pelea antes.
— No crees que tú competencia con James sobre ganar la copa deberían dejarla de lado — hablo Anna mirando el periódico sin haberla saludado antes.
Rosie rodó los ojos dirigiendo su vista a la carta que estaba en la mesa sin abrir. — ¿Es de Diggory, cierto?
Anna asintió sin querer indagar mucho en el tema. Rosie y Alex se dieron una mirada cómplice. Durante el trayecto en el tren, Anna les había contado que Amos le confesó que su ex novia estaba embarazada. Anna se sorprendió al escucharlo, preguntando si iba a regresar con la chica, pero Amos le aseguró que él estaba enamorado de ella, pero que iba a hacerse cargo de su hijo.
Alex intentó cambiar el tema de la conversación. — Si sigues peleando así con James pensaré que ustedes dos terminarán juntos, casados y con dos hijos.
Rosie casi se ahoga con el jugo de zanahoria que estaba bebiendo tuvo que hacer un esfuerzo para no ahogarse y mucho menos intentar esculpirlo, Alex tuvo que evitar no reírse por las expresiones de su amiga, en cambio Anna se reía cubriéndose la boca.
— ¡Estas loca, Alexandra! — exclamó casi gritando, varios estudiantes a su alrededor las miraron. — ¡¿Yo y Potter?! Es una locura, mejor deja que siga detrás de Lily ¿Casada con Potter y encima con dos hijos? Primero me volveré monja.
— No lo se, Rosie — murmuró Anna siguiéndole el juego a Alex cruzando sus manos por encima de la mesa. — Creo que veo ciertas cosas entre ustedes, tal vez para navidad nos sorprendan siendo pareja, ¿Alex quieres apostar conmigo?
— Trató — murmuró Alex ganándose un empujón por parte de Rosie, y Anna recibió un golpe en el pie por debajo de la mesa.
Rosie siguió quejándose diciendo que ella y James no tenían nada en común más que su gusto por el Quidditch y lo competitivos que eran. Alex sonrió al ver como sus dos amigas habían cambiado de humor, ella sabía lo difícil que era para Anna el tema de Amos Diggory más cuando ella estuvo enamorada de él por cuatro años.
