Final

25 1 0
                                    

Dejo el bolígrafo a un lado de la mesa, mientras le hecho un vistazo al resultado.

No ha hecho falta hacerlo demasiado largo, con los detalles importantes basta.

Es corto, apenas 55 páginas...

Tan corto, que quizás no piensen que les estoy contando cómo me cambiaron la vida por completo.

Necesitaba hacerlo, escribir todo lo que pasó en aquel entonces y como eso me llevo a lo que hoy soy.

Nada es para siempre, ni siquiera los malos momentos.

Todo pasa por un motivo, solo hay que aprender de la experiencia y yo aprendí de Alana, nunca pensé que sus palabras tuvieran razón, ella me preparó para vivir lo que tengo ahora.

-¡Papaaa!- escucho a lo lejos las rápidas pisadas que se van acercando a mi y se detienen en la puerta para tocarla.

-Adelante- Un pequeño niño con el cabello alborotado y mirada inocente se asoma con una media sonrisa en los labios.

-Papá, prometiste ir tonmigo al paque- Sonrió, no se le olvida eso por nada del mundo

-¿Ya estás listo?- Niega con la cabeza y sonrio

-No, pero dame tinco miñutos y lo estale- No espera una respuesta y sale corriendo a arreglarse.

Ese pequeño es la luz de mi vida desde el momento en el que lo ví por primera vez, sus pequeñas manitas lo hicieron dueño de todo mi ser.

Bajo a la cocina por algo de agua y la veo, está lavando los platos, así que no lo pienso y la abrazo desde atrás, dándole un fugaz beso en la mejilla

-Llevare a Lucas al parque, lo he prometido- Asiente y se voltea a verme

-No ha parado de hablar sobre eso, está emocionado por ir- Se acerca para acomodar mis cejas, siempre ha tenido esa costumbre.

De nuevo, rápidas pisadas vienen hacia mi

-¡Ya estoy listooo!- Se quita el cabello de la cara y posa su mirada en nosotros -Mamá, papá se va tonmigo, luego te lo doy- Río con fuerza

-Vamos entonces, sabes que mamá no puede vivir sin mi- Salimos de la cocina, pero escucho como se ríe

Lo tomo de la mano y salimos, quisiera que él se quede así siempre, pequeño y a mi lado, pero esta creciendo muy rápido...

Amo la vida que tengo, es todo lo que siempre quise para mí.

Soy un hombre feliz, como pensé que nunca podría serlo.

Hace mucho tiempo que no veo a Alana, lo último que supe, es que está comprometida, siempre le he deseado lo mejor.

Espero que él, la haga feliz y que haya hecho lo inalcanzable para que ella se haya volteado a verlo.


Por si volteas a verme Donde viven las historias. Descúbrelo ahora