Itálica

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En una de las puertas de la cuidad un gran grupo de aparentemente soldados estaban atacando la entrada o almenos intentaban subir desde los muros, sin embargo, una rápida y mortal lluvia de flechas los hizo retroceder

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En una de las puertas de la cuidad un gran grupo de aparentemente soldados estaban atacando la entrada o almenos intentaban subir desde los muros, sin embargo, una rápida y mortal lluvia de flechas los hizo retroceder.

Piña—¡Rompan su núcleo! ¡Háganlos retroceder!—ella era la comándate de la defensa mientras sus soldados y ciudadanos defendían el lugar para evitar la invasión, diferentes trampas fueron usadas para evitar su entrada.

Comandante enemigo—¡Maldita sea! ¡Retrocedan! ¡Retrocedan!—al ver su técnica de defensa decidió retirarse junto a las fuerzas que aun le quedaban.

Piña—Ahhh—al ver eso esta soltó un suspiro y se dirigió a ver a sus soldados—¡Norma, Hamilton! ¡¿Están bien?!

Hamilton—¡Estoy mas o menos viva!—esta se encontraba recargada en una barrera improvisada mientras respiraba pesadamente, por su parte Norma estaba casi igual pero solo levanto su mano indicando que estaba bien.

Grey—Pero que cruel ¿no se preocupa por mi seguridad princesa?

Piña—Es inútil que me preocupe por tu seguridad Grey.

Grey—Hahahaha—este rio divertido ya que supuso que seria verdad después de todo el aun se mantenía fresco después de tan dura batalla.

Después de comprobar los daños en la puerta tanto Piña como Hamilton caminaban por una de las calles del la cuidad mientras la gente del lugar tomaba un descanso, ya que estos no eran soldados o gente que se preparaba para luchar.

Hamilton—Princesa ¿Que hacemos peleando contra bandidos en este lugar?—esta desconocía el motivo por el cual ellos estaban atacando Itálica pero Piña lo sabia bien había sido la culpa del imperio por traicionar a los ejércitos aliados de los cuales los remanentes planearon tomarlo todo., por eso mismo Piña entro en cólera.

Piña—¡¿Que podíamos hacer si no?! Cuando escuchamos que un grupo armado atacaría el territorio de la condesa Formar, pensamos que serian los soldados del otro mundo, así que acudimos cuanto antes—la calle no era un buen lugar para hablar de eso ya que la gente estaba descansando por ahí y podían escucharla pensando que solo fueron a ayudar porque pensaban que serian atacados por alguien mas, casi podría interpretarse como que los abandonaría si fuese el caso—pero en su lugar nos encontramos con los desertores de las topas aliadas tsk ¡Oigan! ¡No hay tiempo para descansar!—ahora se dirigió a la gente que tenían la mirada en ella—¡Los bandidos regresaran! ¡Debemos deshacernos de los cadáveres y reforzar las barricadas! ¡Envié un mensaje al ejercito principal! ¡Tres días! ¡En tres días habran llegado los caballeros que vendrán a ayudarnos! ¡Resistan hasta entonces!

La esperanza de la gente no se levo ni un poco, después de todo lo primero que escucharon les parecía como si fueran usados para atraer al enemigo, la princesa la ver eso continuo su camino hasta llegar al palacio de la cuidad.

Mansión Formar

Mayordomo—Disculpe, alteza—este busco la atención de la princesa Piña.

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