Capítulo 8

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Kevin parecía que no comprendía muchas cosas, aún se seguía comportando como el tonto que es, lo amaba, lo quería, pero era muy difícil hablar con él cuando se trataba de la escuela o lo que vendría en el futuro; en muchas ocasiones llegaba a hablar de sus planes pero al hablar de los míos parecían ocasionar un camino dividido en dos, ¿Por que eso tenía que arruinar todo? ¿Debería dejar mis sueños para estar con él? ¿O decidir por mi bien aunque eso sería el final para ambos? Muchas cosas vagaban por mi cabeza que afectaban mis estudios; estaba distraído en cada hora, cuando Eddy hablaba sobre una nueva estafa y quería mi ayuda...que no eran eficientes ocasionando que él se enojará pero no me molestaba o es porque siempre tengo mi mente en cosas externas.

Después de unos días, parecía que era el tiempo de volver Kevin y yo a la rutina de volvernos a ver, platicar, ir a mi casa o la de él.-Vamos doble D, las cosas se solucionaron...no vuelvas a mencionar lo de la universidad-.Me repetía a mi mismo una y otra vez, tratando de memorizar ello mientras caminaba hacia la casa de Kevin, no quería estar enojado ni viceversa porque lo amaba mas que nadie aunque fuéramos polos opuestos; pero dicen que lo opuesto se atrae y confiaba en ello.

Al llegar mire la puerta con cierta duda, pero después suspiré a largo para tocar el timbre mientras esperaba, tenía que pensar como nos pasaríamos la tarde.-Vamos, doble D, no te quejes como una estatua afuera de mi casa-.Pronunció Kevin con una sonrisa de lado, así que al mirarlo a los lejos mis mejillas se volvieron rojas y en un segundo sentí como me jalo hacia adentro y me planto un beso después de cerrar la puerta, el momento duró unos minutos para después ir hacia su habitación.

-Oye doble D, creó que me volví un loco desde la última vez que nos vimos- Dijo demasiado honesto, paso su mano en ese cabello rojizo, se veía muy guapo así que me ruborice -S-si, bueno creó que debemos volver a empezar, ¿No?
Asintió su cabeza con una sonrisa en sus labios, para después aproximarse a mi y darme un beso como si hubieran sido años el no vernos, amaba ese momento que continúe su juego hasta que él me cargo para recostarnos en su cama. Besos, abrazos, caricias hacían que la química y la física estuvieran presentes, pero nos separamos por necesidad de espacio.-Parece como si nunca nos hubiéramos visto - Pronunció Kevin, yo solo asenti con mi cabeza mientras lo miraba -Si, sería bueno salir los dos a algún lugar, ¿No crees?-Muchas veces me hubiera gustado ir al bosque pero mis padres me tenían ocupado. -Yo diría que arregles una mochila, iremos a donde tu quieras -Kevin no solía bromear pero creó que hacia a mi era leve, así que me lance hacia sus brazos. -La otra sorpresa es que iremos solos...

Caminos CorrectosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora