Capítulo 10

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Narra Marie Cruel

Siempre estaba con mi idea de tener un novio tan inocente, tierno como doble D, me gustaba molestarlo para llamar la suave atención de él pero ese momento que lo vi besándose con otro chico me sacó otra perspectiva, creí que lo conocía bastante bien como para saber que tenía esas preferencias, me sacaba de onda como un odio empezaba a crecer entre los dos, tal vez tenía que eliminar a ese Kevin para que no se interfiera entre él y yo, debía dejar muy claro que era mío. 

Estaba aún con el tubo entre mis manos, lo apretaba con fuerza, tanto esperaba que apareciera la cabeza de ese pelirrojo y apuntar en la nuca, realmente nadie lo iba a extrañar, ¿O si? Mi piel sudaba entre la ansiedad, mi respiración iba en aumento justo cuando empezaba a ver la silueta reflejada en el suelo dada por la iluminación del pasillo, apreté y preparaba el tubo pero poco antes de que lo tuviera cerca y a mi vista sentí como alguien me había jalado de los hombros haciéndome perder el agarre del tubo, sintiendo que perdía el equilibrio en cuanto reaccioné llegué a girarme para ver quien había sido el idiota que me había echo a perder esa oportunidad. Con la poca luz de ese rincón podía ser que era alguien más alto que yo, tal vez por unos centímetros, aún seguía tan enojada que prepararé mi puño para lanzarlo hacia esa persona, esta me detuvo para salir a la vista, se trataba de mi hermana Lee, estaba mirándome con una seriedad aunque podía ver que estaba analizando mi expresión. 

—¿Qué es lo que se supone que ibas a ser Marie?—. Me cuestionó, por lo que el simple hecho de recordar ese recuerdo, apreté mis puños como apenas una ligera lágrima se asomaba entre mis ojos. —Nada, que te importe, Lee...—. Contesté muy cortante, no creo que mi hermana fuera de entender.

—Oh, ¿Eso crees? Entonces te puedo preguntar, ¿Qué estabas haciendo con ese tubo en la mano? Y no creo que sea para saquear los anaqueles de la escuela, además de que él único que vi salir de donde estabas, era un de los chicos del vecindario—. Se mantenía seria, a veces llegaba odiar cuando ella se comportaba de esa manera conmigo porque pocas veces podía mentirle de lo que me sucedía, solté un suspiro con la mirada abajo y el ceño fruncido por lo que le empecé a contar todo. 

Después de un contarle todo a mi hermana, hubo un ligero silencio entre las dos parecía que había pasado media hora pero solo fueron unos 2 minutos, por lo que ella se cruzó de brazos y empezaba a pisar ligeramente con su pie el suelo, no sabía que reacción estaba esperando o que podría decir mediante a todo esto hasta que ella llegó a suspirar.

—Vaya, creo que tenemos que hacer mucho trabajo pesado que hacer, hermana eres mejor que agarrar un tubo y dar en la nuca, pero no te preocupes te ayudaré y vamos a eliminar a Kevin, juntas—. Finalizó por lo que me tomó de sorpresa que asentí antes de empezar a dirigirnos a nuestros anaqueles para tomar algunas cosas para las últimas horas de clases. 

Narra Doble D

Pasaron las horas, pude decir adiós a esa tediosa clase de educación física y disfrutar de la clase de biología donde el profesor explicó de las migraciones de algunos animales debido al cambio de estaciones, eran tantas cosas que me gustaba de las ciencias y no sabía por cuál decidir una vez terminando este ciclo escolar y otra etapa de mi vida; mi mente estaba tan centrado en mis pensamientos que no había escuchado el timbre sonar para dar por finalizadas las clases, que triste, me gustaría estar más tiempo aprendiendo pero creo que los genios debemos descansar además de que Eddy me estaba regañando de que aquellos tenis no le funcionaron.

—Eddy, no me terminaste de dejar explicarte como funcionaban además eran unos prototipos que estaba trabajando—. Le llegué a comentar mientras caminábamos a la casa, Ed estaba comiendo un cereal a casi llenándose la boca. —Debiste decírmelo cabeza de calcetín, tuve surte que el profesor no me regañará y me mandará un citatorio o quedarme después de clases—. Contestaba ya un poco más tranquilo que a unos pasos se podía ver un árbol con tres personas alrededor, trataba de enfocar mi vista en tratar de ver quien era, en cuanto pude distinguir que eran las tres hermanas, llegué a tomar el hombro de Eddy para que me pusiera atención pero estaba hablando de las ideas que tenía además de algo que paso en la clase de música. —Eddy...— Llegué a decirle en un susurro. —¡¿Qué?!....—. Se acortó sus palabras al ver a Lee con una seriedad al vernos, Marie estaba mascando un chicle con mucha fuerza mientras May estaba con una mirada desconcertada ante la actitud que tenía sus hermanas en ese momento, los tres estábamos cruzando delante de ellas con miedo y sudor cayendo, caminamos, caminamos y caminamos con mucho cuidado de evitar que nos jalaran pero ya casi llegando a una esquina donde teníamos que doblar hacia la izquierda, llegamos a detenernos en seco tratando de tranquilizarnos y tal vez esperando lo peor, pero pasaron 3 minutos para ser exacto, nos sorprendimos de que nada haya pasado, nos miramos los tres con duda para después con dificultad acercarnos de nuevo a la esquina a ver si seguían las tres brujas, estaban pero empezaron a caminar en dirección opuesta sin nada más. 

—Vaya, esta vez la libramos—. Dijo Eddy, aún nervioso para caminar de nuevo hacia el vecindario, y si, tenía toda la razón de que nada nos hubiera pasado, aunque ahora fue bastante raro verlas de esa manera, pero lo deje en un punto y aparte para caminar con Eddy y Ed. —Doble D, después me ayudas a arreglar uno de mis monstruos, uno ya no esta soltando el lanza llamas y ya no es tan divertido como antes—. Dijo Ed, realmente no sabía como podía tener esos muñecos pero no lo niego me seguían sorprendiendo en la manera que funcionaban, asentí con la cabeza seguido de un fuerte abrazo de él; seguimos caminando hasta llegar a nuestras casas, nos llegamos a despedir empezando a sacar las llaves de mi casa y antes de introducirlas pude ver una nota doblada en el tapete de la entrada, me agache a tomarla, era raro que no la pusieran en la abertura del correo, la llegué a desdoblar pude ver dos palabras:

"ERES MÍO"

Solo eso y nada más, tenía duda de quién era, ¿Kevin? No lo sabía así que decidí entrar a la casa y dejar mis cosas, tal vez en la tarde hablaría con él por teléfono para aclarar la nota. 


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Hola! Mis lectores, he vuelto poco a poco ('つヮ⊂) se que me atraso bastante en este fanfic, pero después de ver sus comentarios y bonitas estrellas, quiero retomar como darles un fin bonito, tengo varios desenlaces además de que en mi muro publique esta historia es en el no.1 de darle prioridad ya que he tenido mucho apoyo de parte de ustedes, así que yo espero que dentro de dos días o tres publicar el siguiente capítulo (Si es trabajo me lo permite) y espero que hayan disfrutado de este, nos leemos en el siguiente capítulos. Arrivederci <3 

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