Soy Diablo y ¿TU?

La salida con mi hermana

Narra Noah: me desperté a causa del sol en mi rostro, con dificultad me pare fui al baño a cepillar mis dientes, al terminar simplemente me quite la ropa para meterme a la ducha y sentir el agua recorrer mi cuerpo, al terminar salí envuelta en una toalla, me coloque mi ropa que consiste en un pantalón pegado al cuerpo negro, camisa blanca y una chaqueta de cuero, deje mi cabello suelto y deje que se secará al natural, después de pensar por, no se, 5 minutos saque la maleta y comencé a meter todo para la misión que tenia pendiente, agg, metí mis aparatos electrónicos, el PDA, las armas, los cuchillos y todo tipo de armamento, saque otra maleta y allí metí todo la ropa, por 10 minutos lo acomode todo fue sencillo, pero no faltaba mucho para que mi hermana se parará y me dijera (andando)

Por fin -exclame tirandome encima de mi cama, en eso siento que abren la puerta del cuarto y a quien vi-

Vamos ya estoy lista -dijo la niña de apenas 8 años de edad, con un sweater y un mono y sus típicos zapatos converse negros- párate, muévete que después es tarde -exclamó estando en la cama saltando de un lado al otro-

Ya pequeña ya me pare -me senté en la cama y la vi, con una sonrisa enorme en su rostro, al solo mirarla sonreía, la amo mucho- lista para pasar el día con tu hermana -dije mientras me paraba de mi cama, ella bajo y se paró al frente mio-

Por supuesto que sí andando -me jalo del brazo, con firmeza, no crean para ser una niña de apenas 8 años tiene fuerza, bajamos las escaleras con rapidez, al llegar a planta baja fuimos a la cocina y hay estaba mi madre y mi padre con sus típicas batas-

Buenos días -dijimos al unísono-

Buenos días niñas durmieron bien -siempre atenta mi madre-

Si mamá -dijo Mackensy ya sentada en la mesa-

Y tu Noah ¿dormiste bien? -exclamó mi padre sin apartar la vista de su periodico-

Si papá dormí de lo mejor -dije con una sonrisa en mi rostro, fui por atrás y lo abracé- te quiero mucho -a pesar de que soy lo que soy, no significaba que no era cariñosa con mi familia-

Yo más mi pequeña -dijo devolviendo una sonrisa-

Oigan yo también quiero un abrazo -mi madre con su tono de niña pequeña me encantaba escucharla-

Ahi voy -salí corriendo y la abrace fuertemente - te amo mamí - esto era lo que más me gustaba de estar en casa, podía llegar a comportarse como una niña de 5 años y para mis padres era lo mejor del mundo-

viste a mi me dijo que me ama y a ti nada mas te quiere jaja -ahora cabe a destacar que la madurez de mi madre dependía de la situación-

No quiero pelea he -dije mirándolos a ambos ya que sabía que mi padre le iba a contestar-

Ya está listo -dijo mi madre poniendo el desayuno en la mesa que consiste en unos huevos, tostadas con mantequilla, tocino y jugó de Mora, mi favorito-

Gracias -dijimos los tres que estábamos en la mesa-

Felices juegos del hambre -dijo ya poniendo la comida sobre la mesa-

Y que la suerte este siempre de su lado -dije acordándome de la película, reímos todos a la gracia de aquel comentario, empezamos a comer y esta vez más alborotado los chistes de mi padre y las carajadas de mi madre, yo solo comía y miraba la escena que hacen siempre en el desayuno-

No es cierto - dijo mi mamá apuntando a mi padre de forma acusadora-

Si es cierto -exclamó devolviendo el gesto, en ese momento mi padre contó la historia de como mi madre boto una bebida grande de maracuya sobre el, fue así como se conocieron-

Ya termine muy rico como siempre mamá -dijo mi pequeña hermana con su plato vacío enfrente-

Si madre delicioso como siempre -dije parando me y empezando a recoger los platos-

No hija, sal con tu hermana, tu padre y yo lo recogemos -dijo mi mamá, mientras mi hermana me jalaba la chaqueta-

De acuerdo mamá -ya después de que mi hermana me empujará hasta la puerta, subí a mi cuarto y agarre dos armas y las escondí en mi chaqueta, tome también dos navajas japonesas y las guarde en mus botas típicas militares, guarde mi celular en mi bolsillo delantero y salí directo a la puerta para salir - lista -

Más que lista -exclamó lanzando me las llaves del auto -

Bien andando -atrape las llaves en el aire y salimos de la casa, nos montamos en el auto y salimos directo al parque que a mi hermana le encantaba ya que hay se encontraba una estatua de Peter pan, estacione el auto con mucho cuidado para que mi hermana pudiera salir por la parte lateral de la cera, luego de eso me percaté de que había mucha gente mire a mi hermana simplemente como corría así a los columpios, yo sólo me dediqué a mirarla mientras me sentaba en el pasto, yo sólo miraba aquella escena tan divertida con mi hermana que se columpiaba en aquellas cosas tan resonantes, yo sólo miraba el cielo azul en california pero algo extraño paso sentí que alguien me tapó el sol-

Hola - escuché decir a una voz muy ronca se da anotar que es un nombre pero pude percatarme al abrir los ojos que vi a un muchacho de pelo largo rizado, con ojos esmeraldas- me puedo sentar contigo si no es mucha molestia

No descuida, adelante -el vino y se sentó en el pasto, me miró y me extendió su mano-

Harry, harry Cornel -dijo con su mano extendida-

Noah, noah smith -acepte su mano estrechando las, es raro que alguien se acerque a ti de esta maner-

Lindo nombre -exclamó soltando mi mano y mirando el parque -

Gracias -dije con gentileza-

Está con tu hermana verdad -asentí sin apartar la mirada de Mackensy- yo vengo sólo, es para despejar la mente

Te comprendo -dije entre risas, sabiendo muy bien que era el estrés me senté hablar con él durante mucho tiempo mientras mi hermana se montaba en cada paso en cada juego de parque de diversiones eso me agradó mucho pasar un tiempo nada más con mi hermana y ese chico, puede saber mucho más de él me contó cómo era su familia y cuál era su trabajo, al parecer trabajar como empresario al igual que yo supuestamente, pasé la tarde entre risas momentos de seriedad y muchos gestos raros, cundo note la hora era tarde- me tengo que ir -dije mientras me paraba y sacudía mi pantalón -

Fue un placer conocerte noah -exclamó imitando mi gesto- espero verte luego -dijo mientras se despidió de mi con un beso en la mejilla - hasta luego -y directamente se fue-

Bien ahora Mackensy -dije para mi misma, vi como mi hermana se acercaba hacia mi con cansancio- jugaste mucho he pequeña -ella sintió, yo reí , ella alzó los brazos en señal de que la cargará, la tome en brazos y la cargue hasta el auto, la monte y después seguí yo le puse el cinturón de seguridad con mucho cuidado, encendí el carro y me puse en marcha-