El Omega Indomable

|| SEIS ||

Al día siguiente, Con Luffy y sus hermanos:

La rutina se repite por las mañanas, Sabo despertando a sus hermanos y haciendo el desayuno para los tres

-Huele bien- dijo Ace limpiando la baba que escurría por su boca apareciendo en la sala mientras Sabo terminaba de colocar los platos repletos hasta el borde de comida

-Lo se- comento Sabo con simpleza

-Presumido- se quejo Ace

-No lo sería si aprendieras a cocinar tambien- dijo Sabo mirándolo con ojos entrecerrados

-Creo recordar que la última vez que lo intente quemamos la casa- comento Ace Divertido

-¿Quemamos? Me suena a manada, además no deberías decirlo tan orgulloso- dijo Sabo negando con la cabeza

-Claro que debería, el fuego está en mis venas- dijo Ace inflando en pecho de orgullo

-En las mías también y no ando quemando todo lo que toco- contra ataco Sabo

-Por cierto... Ayer Koala me mandó algo muy interesante- dijo El pecoso con una sonrisa ladina sobresaltando a Sabo

-Ella... Mierda... No lo hizo- grupo Sabo molesto

-Oya~ no solo pierdes el control y haces el tonto frente a tu alfa si no tambien ahora maldices, ¿Dónde quedó mi hermano perfecto?~- comento con burla dándole play al Vídeo

-¡Quita eso!- grito Sabo molesto y todo sonrojado de vergüenza comenzando a corretear por toda la casa a su hermano pecoso en un intento por quitarle el teléfono y borrar esa vergonzosa evidencia

-Oh, ¿están jugando? ¡Yo también quiero!- grito Luffy corriendo detrás de sus hermanos para después de un rato atraparlos en un gran abrazo

-Shishishishi Ace y Sabo son mis hermanos favoritos- exclamó Luffy con una gran sonrisa en su rostro

-Jajaja somos tus únicos hermanos, tonto- comento Sabo divertido

-Tu también eres nuestro favorito Luffy- comento Ace con una sonrisa, Luffy era su pequeña luz, su pequeña bola de felicidad que salvó a ambos hermanos de la soledad, la tristeza y el dolor de su pasado

-Saaabo~ tengo hambree~- se quejo Luffy cuando su estómago comenzó a gruñir

-¡Rayos la comida se enfría!... ¡SANTISIMA MIER....!- Grito Sabo sobresaltando a los hermanos y antes de que terminara de maldecir Ace lo interrumpió

-¡Sabo! ¿Con esa boquita besas a tu alfa? Hay un niño presente- se burló/reprendió Ace mientras le tapaba los oídos al confundido menor

-¡Mira la hora! ¡Tengo examen diagnóstico en 10 minutos!- exclamó Sabo señalando el reloj de pared, para después tomar del cuello de su camisa a ambos pelinegros y arrastrarlos por la casa para luego sentarlos en su respectivo lugar

-Por el amor de dios, los diagnósticos ni cuentan para calificación no seas ridículo- se quejo Ace con un puchero recibiendo una mirada de muerte por parte del rubio

-Tienen 5 minutos, para terminar de desayunar de lo contrario no volveré a preparar carne para el desayu...- dijo Sabo molesto

-¡Listo!- exclamaron ambos pelinegros interrumpiendo al rubio en su regaño

-¿¡...!? Saben que solo vayan por sus cosas- dijo Sabo suspirando y ambos pelinegros corrieron en una carrera hacía en segundo piso

-Realmente son algo...- suspiro Sabo con una sonrisita en su rostro, saco su teléfono del bolsillo dispuesto a escribirle a Koala para que lo excusara con el maestro por el retraso pero se detuvo al ver que tenía un mensaje de un número desconocido, al abrirlo se sonrojo violentamente