Capítulo 3: Silenció.

93 6 1
                                    

Martes, 17 de Enero. 05:09 Am.

Me he despertado por un fuerte ruido cerca de mi y una terrible incomodidad, al abrir los ojos por completo me di cuenta que ésto definitivamente no era mi recámara. Una sensación de miedo me recorrió el cuerpo al darme cuenta que la única vestimenta que llevaba era un pequeño conjunto de short y camisa a tirantes de seda; al igual que mi brazo izquierdo se encontraba esposado a la cabezera de la cama en la que me encontraba. Mil preguntas invadían mi mente y un silencio enorme invadían el lugar.

Muy bien, hablándome a mi misma trate de recuperar algo de estabilidad, lo cual no me reconfortaba mucho. Observé cada milímetro de la habitación donde me encontraba y una sensación de pánico combinada con mucha confusión se apoderaron de mi cabeza, he estado antes aquí, esta es la recámara de Emiliano, pero en ningún momento recuerdo venir de madrugada a su casa y mucho menos planear algo sexual con él.
Mi mente inquieta vago por toda la recamara una y otra vez tratando de encontrar detalles que pudieran hacer recordarme algo, mi vista se poso sobre unos volantes de personas "desaparecidas" que descansaban en un fichero de corcho, realmente eran muchas personas, en las cuales predominaba la cantidad de mujeres jovenes.

No quería pensar que él estuviese involucrado en todo ésto, pero todo se hace tan confuso, el como llegue aquí, el porque estoy es posada y el porque mi actual vestimenta. Estaba inquieta pero mi poca esperanza yacía en que fuese mi amigo y no me ocasionaría algún daño, que ésto solo era una broma de pésimo gusto.

Opté en sentarme en la posición más cómoda que podía encontrar, ya que tratar de escapar por ahora no era una opción muy asegurada, era mas convincente para mi quedarme mirando un zapato pensando en como mierda había llegado aquí.

Escuche varias pisadas bruscas contra el piso rústico de madera, lo que hizo que mi miedo aumentará y regresará a una posición distinta para fingir estar inconsiente.

-Ya esta listo todo para ella.- ¿Listo? ¿Qué era todo? Obviamente con "ella" se refería claramente a mi ¿No? Al menos eso esperaba.

-Ya quiero disfrutar de sus obras y sobre todo de ella.-¿Qué obras? Yo soy pésima para la actuación y para los aspectos manuales en cuanto a arte refiere.

-Claro, en cuanto termine de solucionar unas cosas con Josue.-Sentí una mano bastante fría sobre mi mejilla.

-¿En cuanto tiempo más despertará?

-No lo se, pero será mejor que no te vea aquí.-Escuche como sus voces se alejaban.

¿De que lugar estarían hablando? ¿A dónde piensan llevarme?

Sin salida. (En Edición). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora