𝗯𝗮𝗱 𝗶𝗱𝗲𝗮 | 𝘆𝗼𝗼𝗻𝗺𝗶𝗻 [Adaptación]

࿐Doce.

El lunes por la tarde, Jimin finalmente había llegado a casa, un aburrido e incomodo viaje en autobús.

Dejando la puerta cerrada con el primer seguro, corrió escaleras arriba, hoy era un día caluroso y la alberca estaba limpia, perfecto para relajarse en la misma y prepararse mentalmente en este inicio de semana.

Su maleta en la cama para después sacar su celular, billetera y llaves de la casa, la ropa junto a los zapatos en el suelo de la habitación, desesperadamente buscando un pantalón corto.

Colocándose una camisa blanca casi transparente, un pantalón corto de color azul, emocionado salió de la habitación, bajando las escaleras para abrir la puerta de vidrio y con felicidad se acercó a la piscina.

El sol no estaba furioso aquel día, las nubes lo cubrían pero dejaba un resplandor precioso que llegaba a dar muchísima calor.

El rubio se lanzó de un clavado con sus ojos cerrados y sus mejillas infladas para sostener el aire, como un pequeño bebé salió del agua sonriendo.

Moviéndose de un lado a otro, chapoteando, tirándose una y otra vez, hasta querer tocar el azulejo de la piscina.

Cuando salió del agua, lo primero que vio fue a Yoongi entrar a la casa mirando su celular, Jimin movió sus manos en busca de llamar su atención, pero Min fue a la cocina por un vaso de agua sin fijarse en los movimientos de brazos a su costado.

Apoyando su mejilla en sus brazos como muestra de aburrimiento, su mirada fue al cielo de color celeste.

Hasta que los pasos de alguien se hicieron presentes.

───Jimin, ¿ya comiste?

Park se giró con el ceño fruncido, tratando de enfocar sus ojos luego de haberse quedado viendo el cielo por mucho tiempo.

───No, aún no he comido. Hacía mucha calor y quise bañarme en la piscina, ¿quieres unirte?

Min iba a decir que no, pero cuando vio el pequeño cuerpo del rubio reflejando en la camisa de tonalidad blanca, sus ojos brillaron, los pezones erectos ante el frío, sintiendo su boca picar por querer atraparlos en ella.

Jimin enarco una ceja, viendo al mayor curioso.

───¿No te vas a unir?

El castaño salió de su trance.

───Claro, me cambió y vuelvo.

El menor vio las largas y gruesas piernas de Min alejarse, teniendo una muy buena vista trasera del mayor.

───¿Así se siente las chicas de mi salón que salen con universitarios?

Se preguntó personalmente antes de volver al centro de la piscina y hundirse.