Suspensión /əˈblɪvɪən/ acostado en suspenso en un estado de letargo.
- El estado de suspensión o ralentización de las funciones físicas normales durante un período de tiempo; sueño profundo.
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Darcella se convirtió en Darcy Gi...
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"¿Estás segura de que estás bien?" preguntó Elena desde el asiento del pasajero en el coche de Darcy mientras la oscura cazadora las llevaba a la escuela.
"Estoy bien, Elena. No necesitas preocuparte como una madre todo el tiempo".
Dedos ágiles hicieron clic en el indicador, girando en el estacionamiento de Mystic Falls High School. Buscando un espacio vacío, encontró uno más cerca de la parte de atrás. Darcy maniobró el vehículo en la ranura y apagó el motor.
"Además, soy indestructible", guiñó un ojo, moviéndose para tomar sus maletas del asiento trasero y salió del Range Rover.
"Sí. Como si eso fuera posible", Elena soltó una carcajada, rodando los ojos.
"No te sorprendas, El. Hay muchas cosas que no sabemos sobre nuestro mundo".
"¿Como vampiros y brujas?" Elena dijo, arrugando las cejas.
"Y cualquier otra criatura mística que haya por ahí".
Entregándole a Elena su bolso, comienzan a cruzar el estacionamiento antes de detenerse cuando un coche antiguo rojo se desvía y se estaciona al lado de Darcy.
Un silbido se desliza por sus labios cuando Stefan sale. "Es una belleza. ¿Qué es?"
"Es un Porsche 356B Karmann Coupe de 1963", sonríe Stefan, acariciando la pintura roja brillante.
"Buen coche", comentó Elena, sonriéndole.
"Era un desperdicio dejarlo en el garaje", dijo Stefan, inclinándose para besarla.
Darcy frunció el ceño y miró hacia otro lado, no le gustaban los sentimientos que le revolvían el estómago. '¿Qué demonios es lo que me pasa? ¿Estoy enferma?' Pensó antes de levantar la mano y abofetearse con fuerza en la cara.
El sonido de piel golpeando contra piel hizo que Elena y Stefan intercambiaran miradas desconcertadas. "¿Acabas de abofetearte?" preguntó Stefan, las vocales fluyendo lentamente en caso de que estuviera a punto de tener un colapso mental.
Darcy los despidió, sacudiendo la cabeza. "Solo una crisis interna. No importa," levantó una ceja perfectamente depilada hacia el vampiro. "¿Finalmente decidiste jugar a 'Soy un adolescente normal' y no andar deprimido por la casa escribiendo entradas cursis en tu diario?"
Stefan le lanzó una mirada ofendida, enderezando sus anchos hombros. "No me deprimo y escribo entradas cursis en mi diario".
"Hmm, suena como una confesión para mí", dijo con voz cantarina, mostrándole una sonrisa burlona.
"Ignórala. Ha estado de un humor extraño desde que se despertó", dijo Elena, moviendo sus orbes marrones y empujando el hombro de Darcy. "No sabía que ibas a volver hoy".
"Me desperté esta mañana y me sentía muy bien, y pensé que era hora de volver", se encogió de hombros Stefan, cargando su mochila al hombro.
"¿Eso significa que estás bien ahora, con todos los antojos?" Elena preguntó después de mirar a su alrededor para asegurarse de que nadie estaba en la distancia de audición.
