Capitulo IV ─ ❛ Sin coraje ❜

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Tom leyó renglón por renglón acerca de los detalles que proporcionaba el reporte. Creyó estar alucinando por esos minutos que se quedó en lectura, lo que causó que leyera de nuevo, una y otra vez, tratando de que al menos hallarle el sentido a lo que leía y al final, concluyó que para nada estaba alucinando. Luego volteó hacia sus dos compañeros, con una gran indiferencia en sus gestos.

—Oye Wade, esto es no gracioso... seguramente tú escribiste esto para jugarnos una broma—Acusó sin ninguna prueba

—¡¿Verdad que si?!—Stella apretó sus labios aguantando sus risas, hecho que terminó por darse—Ya Wade, dame el reporte verdadero... no tenemos tiempo para tus payasadas—

—¿Qué?, ¡No! ¡Ese es un reporte verdadero, junto con todos estos!—Extrañado, levantó un poco la carpeta con las hojas sobre su escritorio—Llegaron minutos atrás—

—Wade, sólo dámelo... no estoy de humor para esto—Repitió el castaño ya un poco molesto, incluso comenzó a pensar que Wade ya estaba loco.

—¡¿Por qué no me creen?!—Cuestionó el restante levantándose de su asiento—¡Todos estos son reportes verídicos, escritos por habitantes de Green Hills!, ¡¿por qué?!, ¡¿qué tiene escrito ese reporte?!—

—Deberías verlo por ti mismo...—

Con esa frase, Tom terminó por darle a Wade aquella hoja que los tenía tan desconcertados a la mujer y a él. De esta manera, la pequeña oficina se quedó en silencio un par de segundos, apenas con otros policías trabajando en sus debidos campos de trabajo y a diferencia de Tom, una sola leída con tranquilidad fue más que suficiente para Wade; el pelicafé se echó a reír múltiples veces, similar a Stella.

—¡¿Q-quién... quién rayos... escribió ESTO?!—Lanzó la hoja al escritorio con desinterés, y apenado, rascó su cabello—Lo siento, ahora me arrepiento de estar tan preocupado por esto...—

—¿Ahora nos entiendes?—Negó la única mujer entre ambos—Quiero decir... ¿una inquietante criatura mutante azul, un extraterrestre que va a más de unos cien kilómetros por hora, acechando a Green Hills día y noche?... ¡eso suena a algo sacado de una película de terror!... o quizás de ciencia ficción—

Wade rodó un poco los ojos sin verle mucho sentido a las palabras de Stella, que una idea lo llevó a revisar la carpeta con los papeles restantes, pues algo para él no le cuadraba en todo este asunto. Los demás reportes, aunque eran más de los que pensaba, si los revisaba uno por uno, una palabra de cada uno fue lo ideal: porque terminaron por repetirse. Si, cada reporte tocaba el mismo tema, sobre cierta criatura que parece observar a cada habitante en la pequeña civilización.

—No inventes... cada reporte... ¡habla sobre esa cosa!—Aventó ligeramente la carpeta devuelta hacia el escritorio—Todos tienen la misma descripción, y parecen estar escritos por la misma persona, sólo revisen la escritura—

—¿De verdad?—Stella se acercó para echarle un ojo al resto de reportes, hasta quedarse boquiabierta de la similitud que poseían—Por Dios... es cierto—

—Hm, entonces... tenemos que investigar sobre la persona a quién se le ocurrió jugar con nosotros—Tom razonó un poco, volteando después hacia su compañero—Wade, ¿los reportes tienen identificación o todos son anónimos?—

Wade dirigió su mirada hacia el remitente de unas cuantas hojas—No hay apellidos, sólo un nombre... Carl—

Al escuchar dicho nombre, el ojiazul se llevó la mano a la cara, frotando sus dedos en el puente de sus ojos.

—De haber comenzado por ahí...—Suspiró un momento—Creo saber de un sólo Carl en todo este pueblo... y algunos ya están formando rumores sobre él—

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⏰ Última actualización: Jan 13 ⏰

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𝙏𝘼𝙆𝙀𝘼𝙒𝘼𝙔 𝙔𝙊𝙐𝙍 𝙃𝙀𝘼𝙍𝙏 || 𝑺𝒐𝒏𝒊𝒄 𝑴𝒐𝒗𝒊𝒆 𝑨𝑼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora