NOCHES DE TU PIEL -YOONROSÉ- [COMPLETA]

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LA LUNA ALUMBRA MI AMANECER

MI AMANECER LO ALUMBRAS TU

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Rosé dio dos toques a la puerta de madera del estudio del Rey Hoseok, asomo su cabecita y con ojos grandes diviso a su padre sentado del otro lado del escritorio, el Rey le regalo una enorme sonrisa y le estiro la mano, invitándola a pasar.

-Papi! Todo ha quedado hermoso, Lisa me dijo que deseabas verme antes de que los invitados lleguen, ¿te gusta mi vestido? Y mira traigo la corona de mamá, lisa me ha ayudado a vestirme...

-Te vez hermosa mi princesa, justo como tu madre a tu edad, el día que la conocí, traía justamente esta corona, Lisa ha tenido una buena elección al colocártela hoy. -El Rey hizo una pequeña pausa y se fueron a sentar al sofá que estaba cerca- Rosie, tu madre esta orgullosa de ti, ¿lo sabes verdad?, ella te adoraba tanto, desde que nos enteramos de que venias en camino, ella fue la mas feliz, todas las noches le hablaba a la luna y le pedía que te trajera a nosotros con bien, no importa si fuera una princesa o un príncipe si estabas sana y mírate ahora, mi amor, creo que tu madre hablo muy de cerca con la Diosa Luna, porque eres hermosa...

Rosé tenia sus ojitos cristalizados, que su padre o Lisa le hablan de su mamá siempre la ponía sensible, que le dijeran que se pareciera a ella, la hacia sentir orgullosa y hoy que justamente celebrarían a la Luna Rosa y su cumpleaños se sentía muy emotiva y feliz.

-Princesa, hoy justamente hace 18 años llegaste a mi vida y no puedo estar mas agradecido con la Diosa Luna por dejarme verte crecer y aunque tu madre no esté aquí presente, se que ella esta junto a la Luna viendo lo hermosa y linda que eres. – El Rey se levanto a su escritorio y de su caja fuerte saco una pequeña cajita de terciopelo- Esto también era de tu madre y creo que es justo que ya lo tengas contigo-

Roseanne recibió la cajita y la abrió curiosa...

-Es hermosa... - dijo con la lagrimas ya en sus mejillas – Un hermoso dije plateado de una media luna con una piedra en una punta de color rosa. -Gracias papá, lo cuidare mucho y gracias por siempre estar conmigo tu y Lisa son las personas mas importantes en mi vida.

-También te quiero princesa- El Rey suspiro un poco, lo que tenia que decirle a su princesa no era fácil, pero no había remedio a el le hicieron lo mismo, es cosa de costumbres y tradiciones para unir y reforzar reinos – Rosie... hoy, vendrá el príncipe Kim, Kim Taehyung a la celebración el es el heredero del reino de Busan, Rosie, quizás debí prepararte mas para esto, pero... tu sabes... sabes que hay cosas que tienes que hacer como la princesa y futura Reina de Seúl.

Rosé ladio su cabecita, definitivamente no le estaba gustando para nada el rumbo que estaba tomando esta conversación.

- ¿A, a que te refieres? – Pregunto curiosa la pequeña pelirrubia

-Rosie, le, le he dado permiso al Príncipe Kim de cortejarte, es el príncipe mas joven de los alrededores y no te estoy pidiendo que te cases con el de buenas a primeras, solamente quiero que se conozcan, hoy vendrá y se presentara ante ti con su primer regalo de cortejo, Rosie, el, el será tu esposo, solo te estoy dando la oportunidad de que se conozcan un poco antes de la boda.

Rosé no cabía del asombro, eso no estaba bien, no era así como ella quería casarse, en el libro que encontró decía que si dos personas se aman entonces estarán juntas, además también hablaba de los destinados y que un alfa debe encontrar a su omega.

-No, no puedes.... – su garganta se cerraba cada vez más, el llanto que estaba aguantando no la dejaba hablar, - papá yo no puedo casarme, yo no lo conozco...

-Lo se mi amor, por eso te estoy dando tiempo de conocerlo, veras tu madre y yo no pudimos si quiera conocernos, un día tu abuelo la trajo simplemente y a la semana ya estábamos celebrando la boda,- Hoseok tomo a Rosie de las mejillas y le limpio sus lágrimas – Nada pasara, el vendrá a vivir aquí, seguirás aquí en tu casa conmigo, con Lisa, tienen 3 meses para conocerse, estoy seguro que lograras sentir algo por él..

Rosé se zafo de su padre con violencia retrocedió varios pasos hasta que llego a la puerta.

-No, no quiero, yo no quiero que sea así... - Salió corriendo del estudio del Rey y fue directo al jardín.

La noche ya estaba cubriendo el cielo, la luna aun no estaba presente, pero algunos invitados ya estaban reunidos en el patio.

Lisa estaba atendiendo a los primeros invitados, cuando vio a Rosé correr en dirección al puente del rio.

-Rosie? Espera Rosie... - Lisa trato de alcanzar a la pelirrubia

Al llegar al puente Rosé se detuvo, respiro fuerte y dejo salir un fuerte sollozo, no, ella no quería conocer al príncipe, ella no quería que la cortejaran así, no, ella tenia que estar con quien ella quisiera, esperaría a su destinado.

Vio que Lisa estaba cerca y justo detrás del árbol de cerezos un hueco se veía, daba al otro lado del reino, no lo pensó más, corrió y atravesó el hueco de la pared, sin importarle ensuciar su vestido morado de gasas, su cabello se despeino un poco y su corona quedo de lado, se raspo su brazo y cuando corrió con todas sus fuerzas, tropezó y su tobillo se lastimo.

Se levanto y siguió corriendo por la orilla del rio, atrás de ella unos cuantos guardias empezaron a seguirla.

Volvió a caer encima de algo calientito y acolchado.