𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏 𝑓𝑡. klaus m. [pausado]

𝒙𝒙𝒗. 𝑎 𝑗𝑜𝑖𝑛𝑡 𝑏𝑎𝑡𝑡𝑙𝑒

▅▅▅▅▅▅▅▅ ¡ 𝙲𝙷𝙰𝙿𝚃𝙴𝚁 25 !
⏳༉ a war of love with the hybrid
between cans of gray paint ...⌇·˚ ༘

       𝓝o sabía porqué lo había echo, pero decidí hacerlo.

Decidí ser libre y tomar la decisión de la espontaneidad. No preocuparme por un pasado ni por las consecuencias que tendrá el futuro, simplemente disfruto el presente.

Múltiples jadeos acompasados con gemidos hicieron que saliera de esa pequeña esfera donde se reproducían a rápida velocidad todos mis ideales respecto a mi decisión, que me obligaran a volver al presente para recapacitar lo que estaba haciendo, y en todo caso obligarme a distanciarme.

Pero no quería.

Se sentía tan bien estar así con alguien que no le di importancia a quién estuviera haciéndolo, solo traté de disfrutar y dejarme llevar para que el placer fuera superior. Pero no podía, no podía parar de imaginar la cara de Klaus detrás de cada beso, de cada caricia que subía por cada parte de mi cuerpo, por cada inciso que hacía que me provocaba y que siguiera y nos detuviéramos.

Hasta que llegué a la decisión de que parar no estaba en mis planes, y rogué internamente para que tampoco en los de él.

Cuando el híbrido notó que no me había separado de él en cuanto transcurrieron los segundos más críticos de un beso, en los que te podías arrepentir y separar para hacer como si nada hubiese ocurrido, trató de acercarme un poco más a él para tener mejor accesibilidad a todas aquellas partes que deseara tocar. Yo misma traté de acortar los milímetros que nos separaban cuando había tomado la decisión de mandarlo todo al infierno.

Ni un ápice de oxígeno fluía entre nosotros, por no hablar de que pronto acabaría muerta o despedazada si él me seguía tratando de aquella manera tan salvaje y ruda. Pero decidí callarme sabiendo que esta era una de esas circunstancias donde bendecía la fuerza y los movimientos sobrenaturales.

Amén. Ten piedad en mí porque desde luego él no lo haría.

Klaus levantó un poco mi pierna dirigiéndola hacia su cadera, por lo que tuve que pegar un pequeño salto envolviendo la otra en todo su alrededor. Me aseguré de sujetarme fuerte a él pasando mis brazos por su cuello mientras seguía repartiendo besos por cada parte que veía accesible. Pensé que tomaría la decisión de cambiar de habitación para no tener que estar entre escombros y latas de pinturas. No me hubiese venido mal un pequeño viajecito donde tendría el suficiente oxígeno para pensar en las consecuencias de los hechos.