(20) Vista hermosa

1K 59 3
                                    

Llegamos a el campo de golf, ya se encontraba ahí Lando y Max.

-Hola chicos- nos saludamos y pasamos para registrarnos.

-¿Sabes jugar golf, Gabrielle?- Lando me pregunta

-Amm, no se, creo que si. Hace mucho tiempo que no juego.

-Bien, pues aquí tienes a tres grandes maestros- me guiña un ojo.

-Calmado vaquero- le dice Carlos a Lando.

-Así son de enfadosos- me dice Max, mientras los dos discutían, yo solo me reí.
Max y yo nos fuimos caminando y platicando, Carlos y Lando nunca se dieron cuenta hasta que llegaron tiempo después en donde estábamos.

Iniciaron tirando ellos, Lando primero, seguido de Carlos y después Max.

-Te toca chica linda- me dice Carlos.

-Pues, amén- tome un palo de golf, el primero que vi, por qué yo no se de número o de cuál tengo que agarrar.

-Toma este- Lando me da otro palo de golf diferente.

-¿Por qué?

-Por que la distancia está muy larga y este te ayudará mejor.

-Okay- me pongo en posición y estoy por tirarle pero escucho la risa de Carlos- Basta Sainz, me desconcentras y me pongo nerviosa.

El entrecierra los ojos y tiene una sonrisa muy corta, ese hombre me sacará de mis casillas- Bien, continua golfista.

Estoy de nuevo en mi posición y trato de tirarle pero me sale horrible el tiro, estuve muy lejos de tocar la pelota, Carlos se empezó a burlar, Lando solo sonrió y se acercó a mi.

-Linda, tienes que ponerte así- me acomoda para que tenga una mejor posición, cola sus manos sobre las mías en el palo de golf y me dice como debo de tirar y que fuerza dar.

Me habla al oído- El palo ocupa estar levantado sobre tu cabeza y debes de girar solo tu cadera y el torso con los brazos extendidos- se alejo de mi y solo seguí sus instrucciones, al tirar, mi pelota si logra tener potencia y se ve a lo lejos como voló.
Volteo a ver a a Lando y el esta sonriendo, mientras que Carlos lo veo serio, pero le tomo muy poca importancia.

Seguimos jugando, mientras contábamos anécdotas y nos reíamos de tonterías. Termino ganando Carlos, seguido de Lando, después Max y yo quede al final, algo que era bastante obvio.

-Amigos, les advertí que yo no sabía jugar, no es divertido jugar cuando no vas a ganar.

-Gabi, tarde o temprano ibas a jugar con nosotros, es lo que hacemos cuando no estamos en la pista.

-Pues, que aburridos- muestro mi cara de cansancio.

-Ya vamos al hotel que te ves destrozada- me dice Carlos.

-Acepto.

Nos dirigimos al hotel, Lando y Max iban en un carro, Carlos y yo íbamos en otro.

-¿Cómo te la pasaste hoy?

-Bien Carlitos, me divertí mucho, pero mi parte favorita fue la playa sin duda.

-La mía también- Justo se para en un semáforo y me voltea a ver, siento su mirada fija en mi por lo que volteo, cuando nuestros ojos entran en contacto, los de el vuelven a tener la vista de enfrente, su rostro se giró rápidamente.

-¿Qué mirabas, Sainz?

-Nada.

-Aja, aja- voltea su rostro con el mío y ahora nos quedamos viendo, se sentía como si nadie estuviera alrededor de nosotros, solo el y yo. Podíamos quedar más tiempo así, pero sonó el claxon de un carro, ya que el semáforo ya había cambiado a verde, rápidamente aceleró y yo solo giré mi cabeza para mirar por la ventana pero se dibujaba una sonrisa sobre mi boca.

Siempre has sido tú | Carlos Sainz Jr.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora