Recuerdos borrosos, gritos, sangre y rostros difuminados...una maldita pesadilla de la que no puedo escapar.
Siento que me sacuden y automáticamente aquella pesadilla desaparece y mi mente se pone en blanco, abro lentamente mis ojos y siento que la luz gris de aquel día quema lentamente mis ojos, mi cabeza da mil vueltas.
-¿Como te llamas?- me preguntaba un hombre de cabello rubio.
-¿Yo?...Yo soy...¿yo?...No lo recuerdo- respondí mirando a mi alrededor y encontrándome solo con arboles y un ambiente húmedo.
-Eres neófita- dijo mas para el que para mi.
-Eso es malo?- ni siquiera se que es esa palabra.
-No te preocupes, ven conmigo- propuso ayudándome a levantar ¿Tenia alguna otra alternativa? Pensaba mientras caminaba a la par de aquel hombre.
-¿Cual es tu nombre?- pregunte.
-Soy Carlisle Cullen- respondió con una sonrisa.
El camino fue corto pero algo agotador para mi, caminamos hasta llegar a una gran casa ubicada en el centro del bosque al parecer. Entramos y habían un par de personas que me miraban extrañadas, me hacían sentir realmente incomoda con sus ojos dorados...¿Ojos dorados? ¿Donde se había visto?
-¡Esme! La encontré en el bosque, al parecer es neófita- dijo Carlisle.
-¿Estas seguro?- pregunto ella algo confundida.
-O es neófita o se esta alimentando de sangre humana, pero mira lo perdida que luce, yo no podría considerarla una amenaza- le susurro Carlisle a Esme sin que la joven sin nombre ollera.
-Hola! Me llamo Esme, Esme Cullen- se presento aproximándose a mi- ¿Como te llamas?
-Hola, un gusto...yo soy...yo, mi nombre...no lo recuerdo-dije otra vez rompiéndome la cabeza por intentar recordarlo.
-Bueno, tranquilízate, no deseas cambiarte de ropa? Asearte?- mire mi ropa y vi una gran mancha de sangre en mi musculosa blanca, ademas de que estaba manchada con tierra al igual que mis jeans.
-Valla...no había notado que estaba tan sucia- dije mirando mi ropa mientras Esme me acompañaba al baño, llegamos y me mostró donde estaban las toallas, me trajo una bata y se fue. Comencé a desvestirme y me di un largo y relajante baño, creo que por poco me duermo en la bañera, salí con pocas ganas de hacerlo, me envolví en la cálida bata y puse una toalla en mi cabello, observe mi ropa tirada en el piso y papeles que sobresalían de mis pantalones, los tome y eran un par de billetes, revise bien los bolsillos del jean y encontré un documento, ni siquiera lo mire guarde el dinero y el documento en el bolsillo de la bata y busque a Esme que se encontraba en la cocina.
-No lo se...no es inestable o salvaje, no se comporta como neófita- era Esme quien hablaba con Carlisle.
-¿Esme?- pregunte algo dubitativa.
-¿Si? ¿Que necesitas?
-Encontré esto dentro de mis pantalones- dije poniendo el dinero y aquel documento en la mesada.
-¡Perfecto!- canto victoriosa- Veamos...según este documento, te llamas Belladona, Belladona Ivanov y tienes 18 años, ¿Cariño no recuerdas nada?...
ESTÁS LEYENDO
Belladona
VampireUna joven poderosa que aun no descubre del todo quien es, ni quien fue. Dueña de un corazón que ya no palpita, pero siente. Una vida llena de secretos que junto a ni mas, ni menos que Aro Vulturi revelara. Belladona.