III

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—Utilizar una paleta de colores como la de La noche estrellada sería buena opción, ¿no crees? —sugirió el chico.

—Preferiría una paleta como la de Caminante sobre el mar de nubes— comentó Delilah en respuesta.

Era la hora del almuerzo, y Delilah se encontraba platicando con su mejor amigo de toda la vida: Choi Jongho, un chico de rasgos coreanos e increíble voz, quien también había estudiado artes y música, y tenía poco tiempo que se había mudado a París.

Para Delilah había sido una gran noticia; saber que su mejor amigo viviría en París le hacía muy feliz, más aún porque podían hablar de arte tanto como quisieran, porque había podido conseguirle un trabajo en la misma academia que ella, aunque él no daba clases, y porque podía escucharlo cantar de vez en cuando.

—Es muy apagada, Lilah —dijo Jongho haciendo un puchero en desacuerdo —. No quiero un cartel con colores tan apagados.

Delilah sonrió divertida con el tierno gesto de su amigo.

—Por cierto, tu concierto es en dos semanas, ¿verdad? —quiso saber ella, a lo que Jongho asintió con una sonrisa —. Muero por escucharte.

—Me harás sonrojar —reprochó Jongho sonriendo con timidez.

—Vamos, eres el mejor cantante de todo el mundo. Y no lo digo porque eres mi mejor amigo —agregó Delilah rápidamente al ver qué Jongho iba a protestar.

Él dejó escapar una tierna risita y continuó comiendo su sándwich. Después de eso culminó la hora del almuerzo y ambos siguieron sus actividades con normalidad.

Mientras Delilah revisaba las prácticas de sus alumnos, ya en su clase, recordó que había querido preguntarle a Jongho si se acordaba de algo que tuviera que ver con los teatros y ella, pero debido a que hablaron de otros temas, lo había olvidado por completo. Pensó en reunirse con él cuando salieran de la academia y preguntarle, pues aunque ya había pasado una semana desde que se sentía extraña con el tema, no podía evitar cuestionarse todo el tiempo por qué es que le sucedía aquello.

Cuando terminó sus horas de clase, Delilah decidió quedarse en el taller de pintura de la academia para esperar a Jongho, ya que él estaría ensayando para su concierto hasta algunas horas más, así que le escribió un mensaje de texto para avisarle que lo esperaría ahí.

Cuando llegó al taller hizo sus preparativos: escogió algunos pinceles, cogió la caja de pinturas acrílicas, un godete y un delantal, y acercó todo al bastidor que usaría. Acercó también un taburete para sentarse, y luego de que se acomodara, contempló el lienzo en blanco.

No tenía nada en mente para plasmarlo, por lo que tomó uno de los pinceles, lo sumergió en un poco de pintura verde olivo, y dejó que su mano se moviera libremente.

~

—Lilah, pensé que ya estarías en tu departamento, es tarde —dijo Jongho luego de entrar al taller, con Delilah.

Ella volvió la mirada hacia el reloj de pared del taller y se dio cuenta de que pasaban de las 9 de la noche; había estado muy concentrada pintando por casi 7 horas.

—Perdí la noción del tiempo —dijo ella volviéndose hacia su amigo para verlo.

Jongho se acercó a Delilah y contempló su pintura. Se trataba de algo parecido a un bosque, con altos árboles y algunas flores. No parecía nada fuera de la normalidad, aunque sí tenía un toque fantástico e irreal al mismo tiempo.

— ¿Dónde es? —preguntó Jongho con interés.

—No lo sé, realmente —respondió Delilah pensativa —. Creo que sólo estaba imaginando.

—Parece un lugar interesante y misterioso.

Delilah se encogió de hombros y contempló su paisaje. En efecto, había dejado que el pincel se deslizara libremente sobre el lienzo, pues ni siquiera se había tomado ni unos minutos para meditar lo que quería pintar, pero de igual forma, se sentía sorprendida de lo que había hecho de una forma algo inconsciente. Casi estaba completo, aunque no sabía qué era exactamente lo que le faltaba para terminar.

—Bueno, hay que irnos —propuso Delilah poniéndose de pie y quitándose el delantal.

Jongho le ayudó a recoger los materiales y a ordenar el taller, por lo que unos minutos después se encontraban caminando juntos hacia sus hogares.


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Ya lo notaron, pero no sólo Seonghwa aparece en esta historia... Además del maknae más fuerte del universo... ¿Qué otros miembros de ATEEZ formarán parte del desarrollo? 7u7

Mairim

RECUERDOS DE SANGRE [SEONGHWA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora