Prólogo

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Mi hermana me secaba el pelo mientras dejaba hervir la comida en la cocina, hablando sobre mudarnos a la ciudad

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Mi hermana me secaba el pelo mientras dejaba hervir la comida en la cocina, hablando sobre mudarnos a la ciudad. Sobre tener una casa decente para que pueda invitar amigos a ella, llevaba tratando de convencerme después de que me encerré en mi cuarto por un día negándome a la idea.

Max aún se encontraba pasteando las ovejas hasta el rancho, volviendo de una jornada larga para llevarlas a comer al monte cercano, él fue un regalo de nuestro padre un año antes de que falleció, se convirtió en un perro ovejero cuando era un cachorro, acostumbraba salir con él hasta hace un año que me dieron deberes dentro de la casa.

Mi hermana es feliz en el campo, me da miedo perder eso; ambos salimos a ordeñar las vacas que descansan en el corral, una es muy querida por nosotros llamada Belle, nació el mismo día que yo, así que se podría decir que somos casi familia, ella nos provee de comer y sus terneros nos quieren mucho.

Mamá siempre decía que a la ciudad se iba a ir a educarse, pero yo siempre planeé quedarme a cuidar lo que mas amaron cuando ellos vivían, sé que mi hermana por otra parte quiere estudiar en la universidad, por eso el mudarse a otra casa.

Sin embargo, hasta hace poco una planta extraña empezó a crecer en la parte de atrás de la casa principal, colores vividos para algo que tiene forma de maleza, intentamos cubrirla con azufre y muriera, pero siguieron saliendo brotes.

Un día salimos por una semana a la ciudad, cuando volvimos la planta ya no estaba, pero había un pedazo de vidrio en el lugar donde antes estaba la susodicha junto a una mancha de sangre; sin embargo, mi hermana no le dio importancia y proseguimos con nuestra mudanza.

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La visión se me nublaba mientras el sabor a sangre inunda mi boca, podía escuchar los lloriqueos de Max anunciando que venía gente, pude ver como el arma de mi atacante descansa al claro de la luna con las marca del perpretador. Y así como el recuerdo término, mi mundo se vino abajo

Brasas De Un Nuevo Amanecer (Chuuya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora