•𝗘𝗡𝗘𝗠𝗬 [𝗖𝗮𝗿𝗹 𝗚𝗿𝗶𝗺𝗲𝘀 𝘆 𝗧𝘂́]•

𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝗦𝗘𝗩𝗘𝗡

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Una semana más en el Santuario... hoy decidí ir a por provisiones, no nos hacen falta, tenemos de todo, pero así podré salir de aquí, y lo que encuentre quizás se lo podré dar a el hombre con alas.

No es que me haya encariñado ni nada con él, simplemente es una distracción tener a un preso.

Avisé a mi padre, me preparé y cuando estaba a punto de salir me tope con Jaden, joder.

-Hey, ¿donde vas, linda? -Dijo pasando su brazo por mis hombros-

-A por provisiones -Comenté seca-

-Genial, voy contigo -Dijo y yo suspiré-

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-Y dime... ¿Qué tengo que hacer para conquistarte? -Dijo él sonriendo-

-No sé, si tú me conoces tan bien, haz lo que creas que me guste. -Dije sin tomarle importancia ya que yo nu buscaba para nada ningúna relacion en estas circustáncias-

Él rió.

Ya en el bosque, escuché unos pasos y me giré rápidamente y maté a un caminante.

Vinieron dos más por delante y los matamos sin problemas.

Fuimos a una tienda que había abandonada y entramos, no había nadie, pero habían algunos alimentos, los cogimos y salimos de allí.

Me sentía rara, sentía que no estábamos solos,quizás era por los caminantes, pero no estaba segura, creo que hay alguien espiandonos...

-Jade... -Susurré-

-Me encanta que me llames así, pero, ¿por qué susurras? -Dijo él también susurrando-

-Creo que alguien nos está espiando...

-¿De quién hablas? -Preguntó-

-No lo sé, alguien...

De pronto vimos un sombrero de sheriff caer desde arriba de un árbol.

-Joder, ¿otra vez tú, tuerto? -Dijo Jaden mirándo hacia arriba-

De un momento a otro, Carl bajó del árbol y cogió su sombrero.

-¿Acaso me espías, sheriff? -Pregunté divertida-

-¿Deberia hacerlo? -Preguntó-

-Puede -Dije acercándome a él-

-Aléjate de ella, Grimes -Dijo Jaden en un tono seguro-

-Eso díselo a ella -Dijo él mirando mal a Jaden-

-Callaros de una vez -Dije- Parecéis unos putos niños, joder -Continué-

Hubieron unos minutos de silencio y luego Jaden habló.

-¿Qué haces aquí, Grimes? -Preguntó-

-Lo mismo podría preguntaros a vosotros... -Dijo inseguro-

De pronto, Jaden sacó su arma y apuntó a Carl, me puse tensa.

Seguidamente, como es obvio, Carl sacó su arma y apuntó a Jaden, me puse más tensa.

Yo solo mire la situación, no pasaba nada interesante en mi vida, así que ver pelear a dos adolescentes me servía.

-Déjame hacerte una pregunta, Grimes, ¿cómo acabaste tuerto? -Dijo Jaden en tono divertido-

Carl tragó saliva.

-Me dispararon en el ojo, Jaden. -Dijo Carl serio-

-Oh, interesante -Dijo Jaden-

-Déjame hacerte una pregunta, Jaden, ¿cómo alguien tan débil puede estar con la hija de Negan? -Dijo Carl de la misma manera en la que Jaden le preguntó-

Suponía que Carl habría estado observadolo en Alexandria y ahora y ha supuesto que es débil comparándolo conmigo.

-No soy débil. -Dijo Jaden-

-Lo eres comparado con ella, te he estado observado, ¿sabes? -Dijo Carl-

Jaden solo le miró mal y cargó su arma.

-Hey, basta Jaden. -Dije acercándome a él- Baja el arma -Dije mientras iba bajando lentamente su arma-

Escuché a Carl reír.

-Tú, no vuelvas a espiarnos, porque te juro que la próxima vez te mataré yo misma, Sheriff. -Dije fulminándole con la mirada-

-Entendido niña linda pero enemiga... -Dijo él dando media vuelta para luego desaparecer entre los árboles-

Le devolví el arma a Jaden y volvimos al Santuario sin decir ni una palabra.

Cuando llegamos, me alejé de Jaden y fuí con el hombre con alas, Daryl.

-Hey, preso, soy yo. -Dije tocando la puerta y luego abriéndola-

Cuando entré, me miró y luego bajó su mirada. Como siempre, cerré la puerta y me senté frente a él.

-Hoy te he traído un bocadillo extra-grande para que te dure todo el día. -Dije dándole el bocadillo-

-Hmm -Dijo él-

-Un "gracias" estaría bien. -Dije sarcástica-

-Tu padre me está torturando no esperes que lo agradezca.

-El padre, no su hija. -Dije quitándole en bocadillo-

-Bien, gracias niña. -Dijo él finalmente-

Le entregué el bocadillo.

Iba a irme hasta que esté me habló.

-¿Cuál es tu historia? -Dijo mientras comía-

-¿A qué te refieres? -Pregunté-

-Vamos niña, todos teníamos una vida antes de que esto pasara. -Dijo él, seco-

-Bueno, tenía una madre y poco más -Traté de sonar lo más fría posible-

-¿Y qué pasó con ella? -Preguntó-

¿Porqué tenia tanto interés en eso?

-La maté.