•| Broken |• © Taegyu •

ʚ|💢|⠿ ꒰ Favor ꒱

Después de salir de la clínica, Yeonjun conduce hasta la casa de los padres de
Beomgyu mientras observa de a ratos hacia el asiento del pasajero, donde
Beomgyu está mirando por la ventana. Parece estar aturdido, como si su mente
estuviera lejos pensando en cosas. Al detener el auto, Yeonjun le toca el hombro y Beomgyu mira a su lado. Estuvo tan ensimismado en su mente que no se dio cuenta de que habían llegado a la casa de sus padres.

─ Gracias, Yeonjun. ─ Dice al tiempo en que se desabrochaba el cinturón de seguridad.

─ Por supuesto. ¿Quieres que espere?

Yeonjun no sabe si Beomgyu volverá a su casa o no, pero sus cosas todavía están allí, así que tal vez... ¿Volverá?

─ No, está bien. Esto puede tomar un tiempo, así que deberías regresar. Además, Soobin me matará si te retengo para mí. ─ Beomgyu intenta hacer una broma para aliviar la preocupación de Yeonjun. Y funciona. Notar que todavía puede bromear, significa que está bien.

Mientras los amigos se despiden, la puerta de entrada principal a la casa de los padres de Beomgyu es abierta y, pronto, se puede ver a una mujer elegante de cuarenta y tantos años.

─ ¿Osito? ¿Eres tú? ¿Por qué no me dijiste que ibas a venir? ─ Chilla al ver a su hijo.

Acababa de hablar con su hijo hace sólo unas horas, pero él no le dijo que iría. Sin embargo, eso no le parece poco común. A Beomgyu le encanta sorprenderlos y hacerles trucos.

Luego, la mujer se concentra en la persona que está dentro del choche y
piensa mucho, pues el hombre parece familiar. ─ ¡Oh, por...! ¡¿Es ese Choi Yeonjun?! ─ Su voz se vuelve aguda. Ella conoce al chico, es el mejor amigo de su hijo.

Durante el tiempo en la escuela media y secundaria, Choi Yeonjun siempre iba
a su casa para pasar el rato con Beomgyu, por lo que está acostumbrada a ver a Yeonjun, pero recuerda que él desapareció repentinamente justo después de graduarse de la escuela secundaria.

Yeonjun sale de su auto para saludar a la madre de Beomgyu con un abrazo cálido y fuerte. Ama a la madre de su mejor amigo como si fuese la suya, sin embargo, cuando decidió desaparecer de la vida de Beomgyu, también tuvo que cortar la conexión con el resto de su familia. O sea que esa cariñosa mujer estuvo incluida.

Yeonjun se siente culpable, pero en ese momento fue muy necesario. Estaba
decidido a dejar ir a Beomgyu y seguir adelante.

─ ¡Mocoso ingrato, ¿cómo te atreves a desaparecer así?! ¿Sabes lo preocupada que estuve? ─ La madre de Beomgyu golpea el hombro de Yeonjun, quien intenta esquivarla, pero claramente ella es más rápida.

Yeonjun sólo ríe y le dio otro fuerte abrazo. Realmente la extrañó. Ella pone los ojos en blanco, pero aún así le corresponde el abrazo.

Mientras tanto, Beomgyu solo ríe en lo que observa a su madre y a su mejor
amigo. Es una escena habitual para él. Bueno, al menos, era habitual hace siete años cuando Yeonjun todavía estaba con él.

Se siente nostálgico.

Yeonjun luego explica que está dejando a Beomgyu y que está a punto de irse a casa, por lo que la mujer insiste en que debería quedarse a cenar, pero él se niega de forma amable diciendo que alguien le está esperando. La madre de Beomgyu sonríe y eleva una de sus cejas, quiere algo más de información, pero Yeonjun se apresura a huir diciendo que los presentaría en otro momento.

Justo antes de que Yeonjun entre a su auto, Beomgyu habla.

─ ¿Está bien si sigo quedándome en tu casa? ─ Pregunta.

Los ojos de Yeonjun se iluminaron. Está feliz de que Beomgyu regrese a su casa.

─ Estaremos esperando. ─ Yeonjun no responde a su pregunta con un «Sí», sino
con ese tipo de respuesta. Para Yeonjun, Beomgyu no necesita pedirle permiso. Si quiere, puede volver allí en cualquier momento.

Beomgyu se siente aliviado de alguna manera. Y luego de aquella respuesta, lo único que puede ver es cómo el coche de Yeonjun se aleja hasta que ya no puede verlo.

─ Omma, ¿dónde está appa? ─  Pregunta Beomgyu una vez él y su madre están dentro de la casa, en la sala de estar.

─ Él solo estaba aquí, tal vez fue al-Oh, ahí está. ─ Su madre mira a su esposo, quien tiene una taza de café recién hecho en la mano y un periódico en la otra. Luego, deja la taza sobre la mesa y se sienta junto a su esposa, desdobla el periódico y comienza a leer los titulares. Uno parece llamar su atención.

─ Appa, omma, hay algo que necesito decirles y también necesito un favor de ambos.

Beomgyu toma una respiración profunda. Intenta contarles sobre su crisis matrimonial, pero ¿cómo? ¿Cómo puede decirle a sus padres que quiere
divorciarse de su marido? ¿Cómo puede decirle a sus padres que lo suyo con Taehyun ya no funciona? ¿Cómo puede decirle a sus padres que no le agradan la idea de separarse, pero que sólo lo hace porque es lo correcto por Taehyun? Al ver que Beomgyu no continua con sus palabras, su padre dobla el periódico y lo deja a un lado. Ver a su hijo tan deprimido y al borde del llanto debe significar que algo grande acaba de suceder o de lo contrario él no estaría allí pidiendo su ayuda. Él nunca pediría ayuda a menos que no pudiera resolverlo por sí mismo.

Ambos padres intercambian miradas, claramente se sienten confundidos y
preocupados.

─ Necesito que me prometan que no me preguntarán qué está pasando o qué está mal. También necesito que me prometan que me ayudarán con lo que que estoy a punto de pedirles que hagan. ─ Suplica Beomgyu con muchas lágrimas rodando por sus mejillas.

Sus padres están confundidos por su extraña solicitud, pero aun así lo prometen. Están preocupados. No están acostumbrados a ver a su hijo así.

─ Le pedí el divorcio a Taehyun. ─ Dice y luego agrega: ─ ¿Pueden ayudarme a enviarle la carta de divorcio? ─ La voz de Beomgyu suena realmente rota.

Tan rota como está su corazón.