Mientras Zenarth buscaba a las actrices, Joshua comenzó a escribir su guión.
Ahora que había regresado a la Edad Media con su lápiz de carboncillo, Joshua comenzó a extrañar los tiempos en que podía escribir un guión o un plan simplemente golpeando el teclado.
Si bien usar un lápiz estaba bien y elegante, era mucho, mucho más lento en comparación con usar un teclado. Maldita sea la eficiencia.
A pesar de eso, Joshua estaba contento de que las capacidades físicas de un Demonio del Caos fueran mucho más superiores a las de un humano. Lo mismo ocurría con su velocidad de reacción y eso le permitía escribir rápidamente en el papel.
Pronto, una serie de alfabetos romanos aparecieron en el papel.
Escribir un guión de televisión era mucho más sencillo que una novela, pero dado que sus actores eran novatos que no tenían idea de lo que era una película, Joshua tuvo que escribir el guión de una manera que les permitiera entender lo que estaba tratando de representar.
Terminar el guión fue fácil para Joshua, ya que solo necesitaba un poco de tiempo para editar el guión original.
Una buena película constaba no solo de un buen guión, sino que también dependía de las habilidades del actor, los ángulos de cámara, los efectos especiales, la música, etc.
Joshua tampoco tuvo que preocuparse por cosas como los efectos especiales. Este era un mundo con magia real, y los "efectos especiales" no tenían por qué existir. Todo lo que sucediera en la pantalla sería real, ya que no se podrían hacer efectos especiales lanzando algunos hechizos aquí y allá.
Lo único que Joshua sintió que podría ser problemático fue el control del ángulo de la cámara.
Dejó su lápiz y recogió la cámara mágica de la mesa.
Su diseño exterior era similar a esas cámaras de caja de madera del siglo XVIII, mientras que su superficie negra estaba grabada con una runa desconocida. Joshua lo infundió con poder mágico y la runa operó la cámara en lugar de los engranajes, ya que la magia servía como fuente de energía.
Luego vino el material utilizado para grabar imágenes. La gente en este mundo lo llamó originium.
Era un material altamente maleable, no muy diferente de las materias primas industriales como el silicio, el bronce y la plata en la Tierra.
Era un elemento muy útil y, aparte de su incapacidad para moldearse en armas o armaduras fuertes, podía ser el conducto para cada elemento mágico y era algo que todo lanzador de hechizos llevaría consigo.
Los métodos para usar originium para crear elementos iban desde procesos como la alquimia, la metalurgia hasta la herrería rúnica... Había una miríada de formas de cambiar la estructura del objeto.
El originium en la mano de Joshua había sido procesado para convertirse en un medio de almacenamiento que podía grabar imágenes, y acababa de probar el uso del artículo.
Siempre que estuviera imbuido de magia, la imagen almacenada se mostraría en cualquier superficie a través de una proyección holográfica.
No hubo preocupaciones con respecto a la calidad de la imagen proyectada ya que la resolución se basó en la entrada de poder mágico en el dispositivo.
El único inconveniente del dispositivo era que...
"¿Por qué esta cosa es de un solo uso?"
Joshua tomó un cristal de originium que tenía algo grabado e intentó colocarlo en la cámara para continuar grabando nuevamente solo para notar que el nuevo metraje había anulado al anterior.
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Llevando la Cultura a un Mundo Diferente [1]
FantastikUn grupo de dragones está viendo "Juego de Tronos" día y noche High Elf y Druid están llorando después de ver "Hachi: A Dog's Tale" Los humanos y los enanos gastan mucho dinero en "Hearthstone" Incluso el dios llegó personalmente al mundo de los mor...