Hands | Noren

09

—me parece bien que hayas vuelto a trabajar con Renjun —comentó Chenle comiendo una manzana.

—a mi no me parece bien que entren a mi departamento a despertarme violentamente —gruñó Jeno recién levantado.

—es para que te levantes con todas las ganas del mundo, ya planche tu mandil —dijo Mark entrando a su habitación y dejando el mandil en su cama.

—el mandil no es necesario plancharlo, la ropa que usaré sí

—eso lo planchas tú —Mark se tiro a la cama.

—¿Qué hora es? —preguntó Jeno en medio de un bostezo.

—7:00 en punto

—¡¿Qué?! No, no, no ¡estoy tarde! —grito Jeno saliendo de la cama lo más rápido posible y sacándose la pijama.

—estamos aquí, Jeno —se quejo Chenle tapándose su cara con una almohada.

—¿no abrían a las 7:30? —preguntó Mark.

—sí, pero nosotros debemos llegar media hora antes —Jeno terminó de ponerse su casaca y se arreglo el cabello como sea.—cierran la puerta —Jeno agarro su celular y fue corriendo hacia la puerta de salida.

—¿no vas a desayunar? —preguntó Chenle corriendo detrás de él.

—me compro algo cuando tenga tiempo, no destruyan nada —y se fue. El delicioso desayuno, o eso creían, que le habían hecho a su amigo tendría que ser comido por ellos mismos.

[🥞]

Jeno corrio como nunca, si no fuera porque hace frío, estaría sudando como perro. Ni bien llego al local entró y se disculpo al aire sin fijarse quienes estaban ahí.

—oh, no hay nadie...

Jeno se asomo a la cocina y ahí estaba. Se acercó y saludo.

—Renjun, lo siento por la tardanza

Renjun se volteo y se quedo confundido.

—¿tardanza? ¿Qué hora es? —Renjun volteo a ver el reloj que estaba colgado en la cocina. Eran las 7:48.— estaba tan concentrado en esto que no me di cuenta de la hora

—¿en que? —preguntó asomándose por su hombro.

—donas de bienvenida —Renjun tomo una y se la mostró, tenía glaseado amarillo y negro que formaban una carita feliz, y llevaba un pequeño cartel que decía "bienvenido".

—no debiste haberte molestado, me has hecho demasiado postres, creo que deberías sacarlos de mi sueldo

—claro que no, me gusta hacerlo, me gusta hacer feliz a la gente con ellos... por favor, acéptalo

—Renjun...—un rugido interrumpió lo que Jeno diría.—bueno, creo que mi estómago no lo puede rechazar

Renjun río y llevo las donas a una mesa mientras Jeno servia dos tazas de café.

—¿no abriremos tarde si nos quedamos comiendo? —preguntó Jeno dejando las tazas en la mesa y tomando asiento.

—no te preocupes, aun falta un poco para que sean las 8, desayuna tranquilo, se nota que no comiste

—desperté tarde y no pude desayunar... ¿cómo te fue con tus padres?—preguntó Jeno para no perder la conversación con Renjun.

—bien, supongo

—¿supones?

—no soy él más cercano a mis padres, los amo, sí, pero es como si nosotros no seamos los típicos, padres e hijo, unidos

—ou, eso debe ser feo, espero que mejoren sus cosas y empiecen a llevarse mejor, si los amas, seguro amarias salir al parque con ellos y solo disfrutar el día —Jeno dio un mordisco.—wow, delicioso

Renjun río.—gracias... tú... ¿cómo te llevas con tus padres?

—demasiado bien, siempre me han apoyado y aconsejado en todo, creo que sí no fuera por ellos, no hubiera podido ser tatuador, ellos me apoyaron en eso, hasta me aconsejaron tomar cursos en el extranjero porque sabían que la sociedad aquí me iba a juzgar

—suenan a unas maravillosas personas, y ¿estudiaste en el extranjero? Eso es un gran logro

—síp, acabando la carrera tome un avión y fui a Canadá junto con mis amigos, Mark es de Canadá, así que nos dio alojó en su antigua casa

—nunca he salido de Corea, ¿Cómo es Canadá?

—en todo país hay problemas, pero a diferencia de aquí, no me juzgaron, o bueno, no tanto —río Jeno.— los tatuadores no tienen que ser médicos, sé que pude haberme ido al extranjero y ejercer ahí, sin necesidad de matarme estudiando medicina, pero no puedo dejar a mis padres, al igual que Mark y Chenle, sus padres son unos amores, ninguno puede dejarlos

—que lindo que sean tan unidos, y que bien que pudiste estudiar allá y aprendiste más sobre los tatuajes

—sí... recuerdo que fueron buenos tiempos

—¿no lo son ahora?

—no diría eso, te conocí y mejóraste mis tiempos —estas palabras hicieron sonreír a Renjun.— pero antes de conocerte no fueron mis mejores tiempos

—lamento escuchar eso —Renjun quería decir más, pero no sabía que podía ser, se estaba poniendo nervioso y Jeno lo noto.

—no tienes que decir más, más bien, debemos terminar rápido, faltan 5 minutos para abrir —dijo Jeno haciendo que Renjun comiera rápidamente, no podía permitirse abrir tarde. Jeno río por los mofletes llenos de Renjun.

"Es muy lindo"

Holis, me estoy quedando sin capítulos para publicar así que debo ponerme las pilas, será una semana pesadita :')