Crossville (#CA2022)

ASESINATOS 1

Jenn Ascott apareció caminando por la calle principal de Crossville. Se dirigía hacia su casa, donde se encontraban su hermana, ella sabía lo que sucedería, pero no hizo nada para evitarlo. Isabel aceptó su destino, se había cansado de luchar.

-¡Él se acerca!...- Exclamó Isabel unos cuantos minutos antes, cuando llamo a su amiga por celular.

-Es hora.- Su tono de voz era tranquilo y resignado.

-Viene por mí.- Entonces colgó el teléfono, no dejo ni siquiera que su amiga asimilara lo que le acababa de decir o tan siquiera que respondiera. Isabel quería que se enteraran de que estaba a punto de morir y que no se olvidarán de darle una buena sepultura, no quería pudrirse en el piso de su casa y terminar allí sin que nadie se diera cuenta.

Jenn Ascott entro por la puerta de la cocina, Isabel lloraba en silencio y resignada... Estaba a punto de morir a manos de su hermano.

-Has ve...- No alcanzo a terminar la frase cuando Jenn alzo su brazo e hizo lo mismo que en el sueño. En el rostro del muchacho había una sonrisa deforme, sus ojos estaban sobresaltados.

el cuerpo de Isabel se mantuvo en pie mientras su cabeza caía al lavaplatos manchando todo de sangre... Entre tanto su cuerpo aún estaba de pie, él aprovechó y le enterró el cuchillo en distintas partes, fueron 12 puñaladas, la mayoría de ellas en el dorso, cerca del corazón.

Jenn daba pequeños brincos y aplaudía.

"Tengo el don, tengo el don" repetía el chico. Jenn se había manchado la ropa de sangre, pero no se cambió ni se dio un baño, pues cubierto de sangre era más aterrador.

Salió por la puerta principal. Los vecinos sabían que él estaba allí, pero no se atrevían a asomarse por la ventana, solo entendieron que Isabel acababa de morir.

A unas cuantas casas de distancia se encontraba Elena Carvajal oraba y temblando sostenía un rosario en sus manos. En su corazón presentía que ella sería la siguiente y no se equivocaba. Jenn Ascott caminaba sonriente y con los pensamientos perdidos hacia su casa, no se supo nunca como ingreso, solo se sabe que lo hizo.

Cuando él llegó, todas las veladoras del altar se apagaron de manera inesperada, se escucharon pasos por las escaleras. Elena subió a ver quién era o que ocurría, pero no encontró a nadie, aliviada bajo a la sala a leer un poco; sin embargo, fue sorprendida por Jenn que no dudo y la tomo por el cuello ahorcándola.

Ella pataleaba y lo abofeteaba tratando de liberarse de su agarre, le dio un golpe bajo y alcanzó a correr hacia la puerta, pero tropezó, el chico la tomo por los pies y la arrastro hasta el piso de arriba. Jenn Ascott recupero el control y empezó a ahorcar a la mujer.

Los ojos de Elena se comenzaron a desorbitar y perdía fuerzas, intentaba buscar algo para golpear a su atacante, pero fue inútil. Sus labios y su rostro se tornaron de un color morado.

Elena Carvajal se quedó sin aire y finalmente murió después de casi 5 minutos de estar luchando por su vida, sus ojos aún estaban abiertos y en su rostro había quedado una expresión de horror... Esto a Jenn le molestaba, así que fue por un cuchillo a la Cocina, volvió al cabo de un par de minutos, se acercó al cadáver de la mujer y le arranco los ojos, parecía que lloraba sangre; luego tomo el cuchillo y le abrió la boca casi hasta las orejas. En realidad a él le parecía que estaba sonriendo.

Cuando la policía fue por su cadáver no tuvieron el valor de verlo, puesto que aterrador y causaba escalofríos.

Jenn Ascott salió de la casa de Elena con las manos manchadas de sangre, sus zapatos dejaban una huella por el pavimento y fue gracias a esto se logró reconstruir su camino y se pudo saber cuáles fueron sus víctimas... Los asesinatos de Crossville.