"One, two, three, uh"
-MY BABY DON'T MESS AROUND BECAUSE SHE LOVES ME AND THIS I KNOW FO SHOOOO -Cantaban Rap, Mavis y Tiana.
-BUT DOES SHE REALLY WANNA BUT CAN'T STAND TO SEE ME WALK OUT THE DOOOR? -Las respondieron Hicc, Kristoff y Naveen.
Había pasado ya un buen rato desde que pusimos música e íbamos borrachos como cubas. Estos se habían subido a la barra y habían improvisado un karaoke chicas vs chicos. No podía descojonarme más.
-¿Has visto que Hiccup ha cogido una antorcha del jardín para hacer de micro? -Me dijo Astrid casi sin poder respirar de la risa. Hiccup agarraba una antorcha decorativa como si estuviera dando un concierto pero apenas podía sujetarla del pedo que llevaba encima. Cerraba mucho los ojos cuando cantaba (gritaba). Me empezó a dar un ataque de risa por que empecé a mirar a Mavis.
-¿Y que me dices de Mavis, que ni se esfuerza en levantarse? -Mavis estaba sentada mientras que detrás tenia de pie a los demás y parecía que aunque cantara al compás estaba en otro mundo, tocándose la cara mientras daba golpecitos con los pies en la mesa.
-Ostia tía que lady Transilvania va fatal JAJAJAJ -Astrid y yo no podíamos parar de reír.
-HEYYYYYY YAAAAA, HEEEEEEEY YAAAAA -Lo estaban viviendo a tope hasta que Kristoff se cayó hacia atrás y casi se mata, pero nah, está bien.
En verdad era un poco peligroso dejarles subirse ahí pero bueno, son felices. Idiotas y felices.
Estaba animando a Rap mientras movía el pelo como en un concierto de metal cuando se me acercó Elsa, que no parecía borracha ni muy feliz, la verdad.
-Hey, M, ¿Tienes un segundo?
Asentí y la seguí hasta los sofás más apartados. Cuando nos sentamos me fijé mejor y parecía... ¿preocupada?
-Oye... quería pedirte un favor. Sé que no te va a hacer mucha gracia pero... ¿podrías ir a buscar a Jack?
Me empecé a reír.
-Vale, Elsa, muy buena. Me voy ahora mismo al lago a ver si ha vuelto por aquí.
-Oh dios! No! Perdona, lo siento. No quería decir Jack... Jack. Quería decir Frost. Perdona es que creía que sabías que se llaman igual.
Noté como me daba un relámpago de frío en el cerebro. Me lleve las manos a la cabeza. Elsa se me acercó preocupada pero se me pasó enseguida. Me froté un poco la cabeza extrañada, pero supuse que sería el alcohol.
-No, Elsa, no te preocupes. Jack es un nombre super común, es que no sabía que Frost no era su nombre. Pero, ¿por qué quieres que le busque?
-Eh, es que yo... Te seré sincera, en todo el tiempo que conozco a Jack ni siquiera ha estado así de suelto conmigo. No sé que ha pasado esta noche contigo, pero estaba... diferente. Y parecía feliz. No sé por qué se ha ido, pero cuando he ido a ver que le pasaba me ha gritado que me marche. Mérida, creo que está muy borracho y estoy preocupada.
Vale, demasiada información para un cerebro alcoholizado. Procesé lo que me estaba diciendo Elsa e intenté rebobinar. Había decidido pasar por completo del baile con Frost y seguir en la fiesta, pero si es verdad que no le había visto desde entonces.
-Mmmm, vale Elsa, lo intentaré. Pero nena, nos llevamos a matar. No tengo ni puta idea de que ha pasado hoy, ni sé si quiero saberlo la verdad. -Me levanté del sofá con un poco de dificultad.- A ver, ¿dónde está este imbécil?
Me dijo que en el baño de arriba, así que para allá fui. Mientras entraba en la casa Hiccup me miró con un ojo cerrado y me preguntó con señas que a dónde iba. Le respondí que al baño. Me levantó un pulgar como okay y siguió cantando "Hey ya!". Ya dentro encontré las escaleras y las subí con un poco de dificultad. Joder, demasiado vodka. Vi la luz del baño encendida por una rendija y llamé a la puerta.
-Arendell, en serio, date el piro YA. -Me respondió Frost desde dentro.
-Eh, gilipollas. Soy Mérida, y como me vuelvas a levantar la voz te estampo contra la puerta.
Oí unos pasos y abrió la puerta para apoyarse en ella con una mano. Sí, definitivamente estaba borracho.
-Mmmm no me importaría ese plan, princesa. -Me dijo sin sorna alguna. Como que se medio tropezó y le ayudé a no perder el equilibrio.
-Ni en tus mejores sueños, Frost.
Se empezó a reír y se dejó caer un poco en mi. Le sujeté con cuidado y lo llevé hasta la taza del váter para que se sentara. Se quedó ahí con la espalda contra la pared.
-Por algún motivo en mis sueños sales tú. Sale tu pelo. Es como fuego. ¿Eres un fuego fatuo? -Tenía los ojos medio cerrados y me di cuenta de que la botella de ron que se había llevado, que estaba en el suelo, le faltaba la mitad. Si, iba muy, muy borracho.
-¿Sabes lo que es un fuego fatuo acaso? -Me hacía gracia, era una leyenda de mi hogar.
-Tú me dijiste que me llevarían hasta mi destino, pero yo no podía moverme.
-¿Como que yo te lo dije? Frost, no he hablado contigo en mi vida, estás tu que encima te cuento algo tan importante para mi.
-En mi sueño, gilipollas. Me lo contabas en mi sueño.... -Se empezó a caer hacia un lado.- Pásame la botella, pelo fregona.
Me ha llamado pelo fregona. ME HA LLAMADO PELO FREGONA. Le di una patada al ron y se volcó, después me subí a la encimera (no sin dificultad) donde estaba el lavabo. Frost, medio tambaleándose se tiró a por la botella. Seguía quedando ron, así que se llevó la botella a la boca. Yo solo le observé. Cada uno es mayorcito para saber cuanto aguante tiene, yo no le voy a impedir nada. Además, borracho me caía mejor. Aunque también podía ser por mi propia embriaguez.
-Y como es eso de que salgo en tus sueños? -En verdad era raro, apenas nos conocemos.
Se limpió la boca llena de alcohol y me dirigió una mirada perdida.
-No lo sé. Mérida, yo no sé nada. -Sonaba apagado. Vale que no iba bien, pero este no es el Frost que conozco.- Solo sé que dejo de tener frío.
Estaba tan vulnerable... parecía un niño pequeño, solo y asustado. Me bajé de la tarima y con cuidado me acerqué a él. Me senté a su lado y le toqué la frente. Estaba congelado, pero no hacía frío. Él me cogió la mano y la llevó hasta su mejilla. No sé por qué, pero su tacto no me parecía desconocido.
-Tu cara... -Puse mi otra mano en su rostro.- Quién eres, Jack?
Me miró triste aún con su mano sobre la mía. Bajó la mirada para luego clavarla en mí. Volví a sentir un rayo frío por mi cabeza y algo en su tristeza me recorrió la espalda. Alcohol, realidad...? Qué es qué? Ya da igual.
-No lo sé, nunca lo he sabido. Quién soy, Mérida, QUIÉN SOY?
Lagrimas de rabia le empezaron a correr por el rostro, que caían sobre mis manos, aún apoyadas en él. Mi primer impulso fue abrazarle, y la verdad que no me apeteció desobedecerlo. Le cogí suavemente entre mis brazos y el se acurrucó entre mis brazos como un animal herido.
Pero en aquel momento no éramos dos enemigos, Mérida y Frost, calor y frío.
Éramos la escena de dos borrachos abrazados en el suelo de un baño.
Dos almas en pena susurrándose palabras de aliento.
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Rock High School! (The Big Four)
Fanfiction¿Cuánto tiempo ha pasado? Tal vez cinco, seis años. Nunca creí que volvería a pisar las calles de Moonlake, o al menos no tan pronto. Tampoco creí que alguna vez encontraría el instituto de mis sueños. Pero aquí se encuentra mi futuro... y puede que...