La bestia de Acorn (Shadamy)

capítulos 3

Sin oxígeno, sin luz, sin gravedad...

Eso fue lo que empezó a sentir Amy por lo que rápidamente abrió los ojos y miró a su alrededor, cualquiera entraría en pánico al notar que está en el fondo del océano, pero Amy no, ella tranquilamente miró al rededor suyo, no había rastros de nada, ni de plantas, ni de peces, nadie con vida.

En eso, Amy abre su boca dejando escapar algunas burbujas, Amy levantó la cabeza para observar como subían estas burbujas y al notar la superficie decidió nadar hasta salir del agua

Nadó hasta ver el sol, pero antes de que llegara a salir, noto algo, un destello blanco que alumbraba debajo de los pies de Amy, por curiosidad volvió a bajar hasta alcanzar ese destello, en cuanto más se acercaba, mejor lograba ver aquello que brillaba, o más bien, alguien, una eriza de pelaje rubio que estaba inconsciente y que al parecer estaba encadenada. Amy sin duda fue a ayudarla, pero por más que la galoneará no podía sacarla de ahí

La pequeña buscó la forma de desencadenarla, movía sus brazos y piernas para desatarla, quitaba algunos nudos que hicieron las cadenas para sostenerla mejor, mientras la ayudaba veía que estaba muy malherida, todo su cuerpo tenía cortes muy profundas, moretones, razones, etc. Y la herida más grave que tenía fue hecha por una flecha que se encontraba en su corazón, la sangre no paraba de fluir. Amy por más que lo intentaba no podía detener la sangre, intento sacarla lo más rápido posible, pero sentía que perdía fuerza entre más tiempo seguía ahí

En eso sintió como de golpe la mujer le sostuvo la muñeca de su mano, Amy levanto la mirada solo para encontrar que la mujer ya había abierto los ojos y la estaba mirando fijamente; La mirada de esa mujer era aterradora, sus ojos no tenían brillo y no mostraba algún sentimiento como si de un robot se tratase, esto perturbó más a la pequeña Amelia.

Cuando menos lo espero, la mujer apretó su mano de manera que lastimaba a Amy, rápidamente ella intentaba soltarse, pero no lo lograba. La fuerza de la mujer no era normal y Amy lo sabía.

-Alterado fue el pasado, ahora el presente es confuso, encuentra las piezas del rompecabezas para salvar el futuro- hablo la mujer, su voz sonaba entre ecos

Amy presto atención a las palabras que le decía la mujer, aunque no entendía mucho realmente. La mujer la soltó sin dar alguna otra expresión

En eso, las cadenas empezaron a jalar a la mujer aún más al fondo del océano. Rápidamente, Amy comenzó a nadar para lograr tomar su mano y sacarla de ahí, pero era inútil, sintió como una ráfaga de agua la estaba arrastrando del lado contrario hacia la mujer; por más que ella intentará nadar para salvar a la mujer no podía. Siguió y siguió, pero no lo logró, dejó de intentar cuando ya no pudo ver a la mujer, era demasiado tarde ya.

Capítulo 3
Encuentro aterrador

Amy despierta de golpe, tomo su cabeza, dándose cuenta de que de nuevo solo fue un sueño.

Aún estaba obscuro, es decir, Aún no amanecía, pero no le impedía ver que se encontraba en su cuarto, la luz de la luna traspasaba las cortinas; Amy se levantó y se acercó a la ventana para ver la luz de la luna

La pequeña no pudo evitar pensar en todo lo que ha pasado en tan solo 2 días, la curiosidad la comían viva, ella no podía creer que no encontrará rastros del castillo

¿Por qué fui la única que lo encontró? ¿Por qué desapareció el camino? ¿Ese castillo existe realmente? Y si sí existe, ¿Quién vive ahí?

Separar la realidad con la ficción la hacían confundir aún más, entre más lo pensaba, más curiosidad tenía. Decidida, tomó una mochila con algo de alimento y algunas cosas que creía que le serviría, tomó su capucha y guardo una navaja entre su ropa