'Capítulo 5

280 16 2
                                    

El idiota se encontraba frente de mi, observándome con una mirada penetrante, intentó entrar en mí habitación, pero fui más rápida que el y le cerré la puerta en su cara.
—No seas tan infantil Diane, dejame entrar por las buenas o lo aré por las malas —me llamó por mí nombre, bufé éste es un acosador...
—Está bien. Puedes pasar  —le abrí la puerta y él entró, cerró la puerta y se acomodó en el puff que había en la esquina de mí habitación.
—Siento haberte dejado sola en el bosque —susurró
—Sólo dime. ¿Qué es lo que me hicistes? ¿Por qué la cabeza me dolía? —le pregunté mirando por mí ventana.

Él empezó a explicarme todo lo que me había pasado, y yo lo único que hacía era prestarle suma atención. Después de que él me explicará todo lo sucedido le pedí que me dijera en donde quedaba el lugar dónde estuve la primera vez, aquél lugar se me hacía tan familiar, esa fuente, ese banco, esas flores, pero sobretodo el rosal era lo que más me llamaba la atención.

Pero claro. Sé me había olvidado que estaba hablando con ¡un vampiro tremendamente idiota! Porque el lo único que hizo fue largarse fuera de mí habitación, sólo para no decirme dónde se encontraba ubicado aquél rosal.

Luego de pasar varías horas dentro de mí habitación, se me ocurrió pedirle a Charlotte o bueno decirle que me llevará al rosal, al que solíamos ir cuándo éramos unas niñas.

************************

—A pesar de que ya tú no estabas aquí, byron y yo siempre veníamos acá a jugar, recuerdo claramente que tú amabas ese rosal, por eso lo cuidamos, y tan bien porque nos hacía recordarte a ti hermana —explicaba charlotte

Y a que no adivinan en dónde está ubicado el rosal... Y no, no está ubicado en la mansión. Sé acuerdan que al principió cuándo los vampiros llegaron veronika me mandó a un castillo, en cambió a natalia la mandó a la mansión lioncourt. Púes verán ya les había dicho que aquél lugar me llamaba la atención, y cómo no. sí ese día el maldito vampiro que me golpeó con su soga dejandome marcas en la piel me arrastró por todo el inmenso jardín del castillo, y fue entonces al día siguiente cuándo la vampiresa sibelida me dio unas normas, las cuáles tenía que cumplir, y me hizo que me sentará en aquél banco rojo mientras ella tomaba en sus manos un poco de agua de la fuente.

Tomé entré mis manos una de las tantas rosas, las cuáles tenían un olor delicioso, y juntó con charlotte nos dirigimos adentró del inmenso castillo. Aún recordaba que después de subir las escaleras se encontraba el salón principal, y luego a la izquierda hay un salón pequeño en el cuál sibelida se ponía a leer o a tocar el piano, y es que me dio mucha curiosidad saber sí era ella quien tocaba una linda melodía en el piano.

Pero no, en vez de encontrar allí a sibelida me encontré a ése maldito vampiro...

—————————————–———————————————
Hola
Yo otra vez por acá. Trayéndoles capítulo nuevo :-)
Esperó que les gusté, perdonenme los errores ortográficos
Besos: Milu

Era Hija De VampirosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora