Unpleasant Desire

Culpables

Chris Pov

El sonido de la lavadora dando vueltas una y otra vez me ayudaba a formar espejismos que no era capaz de asimilar por completo. Me encontraba leyendo un libro motivacional que El había olvidado en la sala.

Llevaba al menos una semana vagando por la casa con esos libros, su día consistía en eso dormir, comer, leer y andar por la casa con una melancolía indescriptible. Mi alma se partía cada que la escuchaba sollozar, algunas noches eran casi inaudibles, pero las que me eran mas difíciles de pasar eran aquellas en las que soltaba un grito leve contra su almohada para tratar de sacar el nudo en su garganta.

Chiara ni siquiera notaba esos sollozos, ella comenzaba a vivir su duelo de la manera más tajante posible. Salía de casa y no volvía hasta el anochecer. Me preocupa por ella pero estaba atado de manos, no podía dejarla sola, El me necesitaba más que yo a ella.

Nuestra relación era extraña, había comenzado a evitarme, le molestaba mi presencia tanto como le llego a molestar la de Linda. Era extraño, yo quería estar cerca de ella, necesitaba estar cerca de ella, tenia una gran responsabilidad en mis manos que no podía dejar por su forma de tratarme.

En mi mente su fina imagen pasando de cuarto a cuarto, llevaba el cabello mojado, encima solo ropa interior. Era un recuerdo tan cercano a mí, me hacia imaginar cosas que no se suponía que pasaban entre alguien como yo y como ella. Mis fantasías se mezclaban con el sonido de la lavadora, que me dejaba llevar tan lentamente que mis manos imaginaban el tacto de su fina piel sobre la mía, sus labios dulces sin rastro de accidentes la hacían atractiva a mi vista. La deseaba tanto que sentía el corazón detenerse de solo imaginarla.

Fue cuando su imagen con semblante molesto y brazos cruzados detuvo en seco los pensamientos que hasta ahora me hacían querer salir huyendo a un lugar donde nadie notara mi presencia.

—¿Qué haces con mi libro?— Pregunto abriendo los ojos demás.

—¿Disculpa?— Pregunte dejándolo sobre mi pecho.

Eleine Pov

Era un lindo pastel de fresa, estaba tan delicioso que me sentía culpable de que estuviera en llamas. Culpa, eso era lo único que podía sentir justo ahora, miraba cómo el fuego se levantaba cada vez más.

Había evitado a Chris a toda costa, no quería estar cerca de él, no podía estar cerca de él. ¿Por qué todo esto debía pasarme justo ahora?¿Por qué no conocía a esta familia?¿Por qué él y no alguien mas?

Solo escuchaba el sonido que hace el fuego al consumir lo que se esta quemando, lo que arde sin premura deshaciendo poco a poco lo que es y lo que era ese pastel.

—Bájate de ahí— Ordeno la voz de Chiara.

No estaba en el césped mirando cómo ardía mi pastel de cumpleaños numero diez. Estaba mirando fijamente la lavadora mientras reposaba gustosa sobre la secadora, baje de dónde estaba solo para observar la ropa que había doblado recién, estaba esperando a que terminara de lavar para cambiarla de electrodoméstico.

Escuche la puerta cerrar y decidí salir de mi escondite en el cuarto de lavado. Ahí estaba él, leyendo uno de los libros basura que Linda había dejado, Chiara se había marchado como de costumbre en estos últimos 5 días.

—Pregunte que haces con mi libro...— Lo mire inexpresiva.

Esas eran mis ganas de pelear arribando al ambiente, pensaba en eso, en pelear con él a la espera de que se marchara y me dejara sola con Chiara. Que con él se fueran también los sentimientos que mí estomago generaba. Ni siquiera sabia si era atracción o solo pena, lo que me hacia evitarlo.