୨ৎ The Other Men ︙TaeGyu⋆

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Había pasado ya un mes desde que BeomGyu y TaeHyun se encontraban saliendo a "citas". En todo ese rato BeomGyu aún no le decía la verdad sobre él. Tenía miedo de lo que pudiera pensar TaeHyun, realmente comenzaba su cariño por él, y de TaeHyun ni se diga.

-¡Un mes, BeomGyu! No me has dejado tocarte por un mes, ¿qué mierda te ocurre? - el coreano se hacía pequeño en esa silla. SooBin era tan intimidante.

- ¿Puedes bajar la voz? - balbuceo él con la cabeza baja. Los comensales de las otras mesas las miraban raro.

- ¡No! Que todos aquí se enteren de que no le cumples a tu pareja.

BeomGyu se hartó. Se levantó de la silla y salió de ahí, siendo perseguido por el mayor.

- ¡BeomGyu! - comenzaba a gritar histérico.

- Cállate. Me tienes hasta el cansancio.

SooBin rió con ironía.

- Tú eres el que me tiene cansadoa. Vengo del trabajo a querer pasar un buen rato contigo y mas no quieres tener intimidad conmigo, BeomGyu, soy tu pareja - afirmó mientras se señalaba con cinismo.

- Que descarado eres. Ni siquiera sé qué soy para tí - lágrimas amenazaban con salir. BeomGyu quería desaparecer en ese mismo instante, necesitaba a TaeHyun.

- Eres... - el mayor soltó un suspiro y golpeó su frente.

BeomGyu revolvió su cabello con desesperación.

-Te lo dejó más sencillo, Choi. ¡Soy el otro hombre! El insignificante, el reemplazable -pequeñas lágrimas brotaban de sus ojos, antes de que cayeran, las limpió de inmediato.

- Espera, déjame hablar.

- Me voy. Hasta pronto, Choi SooBin - BeomGyu dió media vuelta y comenzó a caminar.

Después de algunos minutos, había llegado al vecindario. Su rímel estaba un poco corrido, que agradecía haber llevado sus gafas oscuras. Antes de entrar a su casa, exhaló y suspiró de manera continúa.

Sabía que su casa sería el primer lugar donde SooBin la buscaría.

Comenzó a llorar de manera silenciosa, volteando a ver en dirección a casa de TaeHyun y como las luces aún estaban encendidas, así que seguramente seguía despierta. Caminó con pereza hasta estar parada frente a la puerta. Alzó su mano y la cerró en un puño, dándole leves golpes a la puerta. Luego de algunos segundos, TaeHyun abría la puerta.

- ¿Gyu? ¡¿Gyu?! - exclamó al verlo llorar. Con cuidado lo tomó de los hombros y lobllevó hasta adentro

-... ¿Qué fué lo que pasó? -bdejó la pequeña taza de café a un lado y se sentó frente suyo tratando de buscar su mirada.

-Yo... No sé cómo explicarlo -vsuspiró frustrada.

TaeHyun comenzaba a saber por dónde iba esto. Dejó caer sus manos y la miró.

- Déjame adivinar, Gyu - le mostró una dulce sonrisa-.¿Se trata acaso sobre el señor Choi?

BeomGyu alzó su mirada, dejando al fin ver a TaeHyun lo vacío que estaba. El menor sentía pánico.

- ¿C-cómo sabes?

- Es obvio, BeomGyu. Siempre lo veo salir de tu casa en la madrugada, ¿qué pasó? - al fin declaró.

BeomGyu se sentía tan avergonzado que pensaba que TaeHyun no era la única en saber sobre eso.

-Lo lamento tanto, tú eres tan géntil conmigo, debí decirte esto desde que salí contigo - TaeHyun se sorprendió por lo dañada que se encontraba BeomGyu.