Luz en la oscuridad

"Luz y oscuridad".

Narrador omnisciente

Era un día normal más, el sol brillaba sobre las flores, que estaban felices por la primavera. Las mariposas bailaban sobre el aire y los pájaros cantaban felices, las flores decoraban con su belleza los parques y los bosques. Los caminos con tan delicadas nubes de flores parecían ser parte de ese paraíso tan soñado.

A lo lejos se veía una figura femenina, sus piernas blancas adornadas por un vestido que hacían juego con el paisaje, su cabello rojo y blanco que era tan peculiar y su sonrisa que dibujaba un bello rostro. Ella... siempre tan atenta para los demás, menos para ella.

Ese día ella iba a visitar a sus padres que no vivían muy lejos. Llevaba unos panes caseros y su característica alegría. Estaba ansiosa por ver a sus hermanos Christian y Thomas. Tenia una hermana del alma, que también estaría presente. Para ella todos los días eran especiales, más sabiendo que estaría con aquellas personas importantes.

En su caminar tan alegre de pronto ve un chico que parecía ser todo lo contrario a ella. Ambos eran polos opuestos. Ella miro el rostro blanco de él, lo adornaban unos lentes oscuros como su manera de vestir. Él la miro sin disimulo. Pasaron uno cerca del otro, rozándose las manos y embriagando el aire con sus perfumes. Ella de sangre caliente y él como el hielo...

A pesar que cada uno siguió su camino, sintieron una conexión poderosa.

Ella en su recorrido no podía dejar de pensar en ese muchacho, no entendía lo que había pasado. Fueron minutos extraños. se preguntaba el porque de esa sensación... de repente sus pensamientos fueron interrumpidos

-¡Auch! - Se escucho

Ella mira bien y ve a su amigo Henry

Henry - Me pisaste, ¿no me viste? - Le pregunto él

Elizabeth -Lo lamento, no - Responde

Henry -Me di cuenta, es raro verte en ese estado a ti

Elizabeth - ¿Qué estado?

Henry - Seria, ¿te encuentras bien?

Elizabeth - Si, discúlpame. Estaba pensando en algunas cosas. Oye ¿Tú cómo estás?- Ella buscaba cambiar de tema.

Henry - Mejor que tu (En tono de burla)-

Ambos se ríen.

Elizabeth -Iré a ver a mis padres. Puedes pasar luego si quieres, podemos merendar como cuando éramos chicos.

Henry le sonríe - No podre, iré con mi madre de picnic y no creo llegar temprano.

Ella sonríe y se alegra. - En otra oportunidad será. Saluda a tu madre por mi-

Se abrazan y cada uno se separa y siguen sus caminos.

Al llegar a la casa de sus padres la recibe su nana de toda la vida. Se abrazan y entra.

Elizabeth - ¡Nana! Que felicidad verte, ¿Cómo has estado?-

Nana - ¡Hija! Estoy bien, pareciera que no me ves desde hace mucho-

Elizabeth - (ríe) perdón nana, sabes que soy así de intensa. Simplemente me alegra verte.

De pronto un abrazo interrumpe su charla.

Chris - Hermana! ¿Me extrañaste?-

Elizabeth - Claro, bobo!

Chris - También yo.

Así aparecieron sus padres. (Se abrazan)

Padres - Hija, ¿Cómo estuviste esta semana?

Elizabeth - Estuve bien, agotada de tanto trabajo, ustedes?

Padres - Estamos bien, con noticias para contar...

Nana - Ya esta el almuerzo!

Luego de la comida, todos comenzaron a charlar hablando de su semana y del nuevo proyecto de su padre. El pretendía volver a Egipto para realizar nuevas investigaciones.

Rick - Hija, quiero comentarte que con tu madre viajaremos a Egipto. Pudimos conseguir un inversor que tuvo fe en nuestros hallazgos y quiere esta vez trabajar en nuestro proyecto.

Elizabeth - Grandioso! Los felicito y me pone muy feliz que volverán a realizar sus sueño.

Eve - Si hija, con tu padre estamos muy felices y queríamos pedirte en la semana si podías venir a casa para conocer a la persona que nos ayudara. Hoy vino rápido y no pudimos presentarle la familia completa. Así que se nos ocurrió en la semana invitarlo a cenar.

Elizabeth - A ver...déjame pensar... no lo sé... PUES CLARO! Puedo preparar uno demás postres deliciosos de moras!

Padres se miran

Elizabeth - Qué sucede? Por qué se miran así? ¿El inversor tiene algún problema con las moras? El ti...

Padres -¡Hija! (Se escucho al unísono), Él es diferente a las personas que conoces. No sabemos sus gustos, solo acepto venir a cenar. Pero tiene un aspecto triste y solitario. Por eso con tu madre decidimos invitarlo a cenar, queremos que sienta el calor de un hogar. Nos apeno verlo así tan...-

Elizabeth - ¿Tan qué?-

Padres - Tan joven, pero frio, distante, extraño...

En ese momento ella recordó aquel joven que no hace mucho tiempo cruzo en el parque. La descripción de sus padres, eran exactamente igual al muchacho que paso y rozo su mano. Que la contemplo sin disimulo y sintió esa conexión extraña de nuevo. Ella volvió a ponerse seria, pero intento sonreír de nuevo para no preocupar con sus pensamientos a su familia.

Luego de un tiempo extenso en familia, ella se despidió de sus padres, de sus hermanos y de su nana. Emprendió el viaje de regreso a su hogar. Esta vez ella iba pensante, seria, preguntándose como alguien tan joven puede ser tan oscuro. Intentando comprender sin saber que es lo que puede convertir a una persona en la oscuridad misma.

Esas mismas preguntas serían respondidas en esa misma semana.

Esa misma semana la luz y la oscuridad se reencontrarían de nuevo.