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Capítulo 7: Disculpas

—Buenas noches—habló Mina en un tono serio, yo aún metida en mi trance no logré responder

—Oh, buenas noches—le regresó Somi el saludo. Reaccioné al escucharla y traté de levantarme, pero al parecer se veía muy cómoda encima de mí—lo siento, ya cerramos

Mina levantó una ceja, me miró con cierta indignación, creo que estaba molesta.

—Bien. Gracias por el servicio—dio la vuelta para irse. Sí, estaba molesta

—Mina, espera—con todas las fuerzas que me quedaban de ese día empujé a Somi a un lado y la quité de encima, me levanté rápido y la detuve de un brazo antes de que saliera. Ella giró y de nuevo hicimos contacto visual haciendo que mi corazoncito acelerara su ritmo—Sabes que puedes quedarte

—lamento interrumpirlas—tenía un tono neutral, casi ¿triste?

—No interrumpes nada, sólo estábamos limpiando—apartó su mirada y murmuró algo que no entendí, creo que habló en otro idioma—Mina, me alegro que hayas venido, yo quería...

—¿ustedes se conocen?—Somi. Me había olvidado de ella. Ambas volteamos a verla e hizo una cara de sorpresa—¡Chaeyoung! no me digas que es ella

—¿Qué? ¿de qué hablas?

—Claro, es tan obvio—Mina y yo nos miramos sin entender

—Somi, ella es...

—es la chica que te gusta, claro está

—Sí, ella es... ¿qué?

—lo siento mucho, sé que no fue nada agradable encontrarnos a Chaeyoung y a mí en una posición tan aparatosa, pero no es lo que estás pensando

—Somi, quisieras...

Somi se había dirigido directamente a Mina que tenía una cara entre sorprendida y confundida y yo estaba más roja que un tomate

—y entiendo si estás molesta, pero...

—¡Somi!—debía callarla, antes de que expusiera accidentalmente mi estado

¿Porqué Somi era tan imprudente?

Se quedó callada y las miradas se clavaron en mí, genial, ahora me sentía como una hormiga

—Chaeyoung, yo sólo...

—SHH

—pero...

—SOMI, ¿quisieras callarte por un segundo?

—de acuerdo—simuló poner candado a su boca, suspiré, ojalá ese candado fuera real y misteriosamente se perdiera

—Somi—me recompuse y carraspeé un poco la garganta en señal de nerviosismo ¿ahora qué?—ella es Mina—regresé mi mirada a Mina quien había vuelto a su tono neutral—y e-es una amiga

—Oh... ¿Enserio?—soltó un gran suspiro de alivio—menos mal, con esa mirada por un momento creí que realmente estabas celosa—Mina pareció sorprendida y desvió su mirada—mucho gusto—le extendió la mano llamando de nuevo su atención—soy Somi, la nueva compañera de Chae