🪀El Increíble Toyman 🔫

🔻Prólogo🔻

Cierta mañana en la gran ciudad de Musutafu, en un pequeño y algo descuidado departamento donde vivían 5 individuos, siendo una bella mujer adulta de 30 años que dormía en su cama dentro de un saco de dormir, dos chicos de 15 años, un peliverde de grandes ojos verdes y pecas en su rostro, con un extraño guante que cubria gran parte de su brazo derecho, este dormía plácidamente en su habitación, una pelirosa que en su habitación llena de caos dormía de algún modo cómoda, una chica rubia que tenía un par de libros tirados a un lado y con uno en sus manos con un peculiar título siendo "Los principes caídos" soñando alegremente con su príncipe en esa aventura y en la última una pequeña que dormía rodeada de muchos peluches que acababa de despertar y no por qué ya era hora...si no por qué ya tenía hambre, al parecer solo habían dos cosas que hacían que la pequeña despertara y eso era una pesadilla o hambre, afortunadamente para ella no ha tenido pesadillas estos meses por lo cual fue el hambre lo que la levantó.

Está camino hacia la primera habitación dónde yacía la mujer azabache, escucharla roncar era una señal que indicaba que no despertaria aunque un temblor de 9 estuviera en su punto crítico. Paso a la habitación de la chica pelirosa que dormía con una especie de artefacto a medio reparar abrazado a ella como un peluche, la pequeña siguió de largo y fue a la del peliverde dónde esté tenía medio cuerpo en su cama y el otro en el suelo y dónde un plano lo cubría medio cuerpo, la pequeña sabía que esos dos no despertarian pronto, así que fue a la última habitación donde vio a la chica rubia, la cual se aferraba a su libro y dónde hablaba en sus sueños al parecer.

?chica: Oh mi príncipe...que increíble fue verte vencer a ese grupo de caballeros malvados...dime iremos en búsqueda del arma sagrada.- Se veía feliz en su sueño.

La pequeña se acercó y movía de esta para despertarla.

?niña: Himi-neechan...ya tengo hambre, mi pancita quiere comer…Himiko-neechan...- La pequeña movía gradualmente más fuerte a la ahora conocida Himiko pero está tenía un sueño profundo.

Himiko: Jeje en serio dejarías que me una a tu cruzada...pero...eso significa que te harías responsable de mi...acaso es...una proposición.- Está esbozo una sonrisa boba pero aún sin despertar.

La pequeña solo miraba neutra a su hermana mayor, dió un largo suspiro y decidió implementar su segunda opción para despertarla.

?niña: Bien, me obligaste a hacer esto, creeme esto me duele más a mí que a ti Himi-neechan, pero ya quiero desayunar y mi caricatura ya va a empezar.- Está levantó la sábana que cubría a la rubia.

Así buscaba la mejor posición posible para apuntar su mano y medir la distancia con el trasero de Himiko y con las fuerzas que su pequeño cuerpo le permitía le dió una buena nalgada a la rubia que despertó con gran dolor y un buen susto de su cama.

Himiko: MI POMPIII!!!.- Está miro a todos lados y vio a la pequeña que la veía con un rostro de somnolencia aun. -ERI-CHAN QUE TE PASA!!! POR QUÉ GOLPEASTE ASI MI POBRE POSADERA!!!.

Está sobaba aquella parte de su trasero que recibió el golpe de la pequeña, aún para su edad y estatura la pequeña Eri tenía la mano muy pesada, aunque podría ser debido al entrenamiento que la mujer les daba a los chicos, está veía a su hermana y hablo.

Eri: Tengo hambre...dame algo rico de comer y ya te dejo para que sueñes tus cochinadas de nuevo.- Dijo al final con un bostezó y también con el ruido de su estómago exigiendo comida.

La rubia al ver la expresión de su hermanita y saber que no podía objetar nada contra la pequeña...culpaba a su madre por consentirla mucho y resignada hablo.