Carta 2.

16 2 2
                                    

Sé que es tonto escribirte, porque de sobra se que no podrás contestar mis cartas, al menos no ahora, y espero que no pienses que soy el ser más aterrador.
La verdad creo que tengo miedo de que me odies después de todas esas platicas y padres nuestros que te harán rezar, pero recuerda que Diosito no nos odia, dios nos hizo así, y el no comete errores.

¿Recuerdas cuando nos quedamos fuera de la iglesia? Ese día está lloviendo demaciado, te di mi chamarra favorita que hasta la fecha espero que siga en la casa de tus papás y que no la hayan quemado pero con un poco de suerte pensaran que es tuya, creo que desde ese día era tu chamarra ya no mía.

Recuerdo el día que peleamos y llegaste a la escuela con la chamarra en la mano, ese día no siquiera me volteaste a ver en el colectivo, parecia que estabas muy enfadada conmigo y yo como siempre no sabía que había hecho, soy muy idiota y lo sigo siendo hasta la fecha.

Ese día no te Vi en receso, aunque te estuve buscando por todas partes, te compre el último jugo de manzana que había en la cooperativa y aunque también era mi favorito, creí que tú más que nadie, quisiera tomar jugo con su lonche.
Era un jueves así que supuse que tú mamá te había puesto torta de huevo con chorizo.
Y no era de tu agrado, al menos no sin jugo.

Pero no tenías ganas de verme, así que solo tome un post it, de esos que no tengo, pero Liliana me dió dos, porque ya sabes que soy muy mal hecha, pero cuando se trataba de hacer algo para ti creo que siempre era con letra legible y bien hecho, sin manchones ni nada raro.

Deje el jugo de manzana en tu butaca de taller, con el post it que decía "Para que puedas pasarte tu tortita, te quiero y perdón por hacer lo que sea que haya hecho"
No sabía muy bien que hice o que no hice.
Pero ese día tu salias antes que yo, y yo pues por más que quería hablar contigo no hayaba momento para hacerlo.

Salí con la esperanza de encontrarte en el camino si me daba prisa, o si no ir hasta tu casa porque se me había olvidado el apunte de alguna materia que tuviéramos con el mismo profesor. Pero no, estabas sentada en la parada del colectivo con tu reproductor de cd, tus audífonos y la mirada perdida.

*Recuerdo*

-hola...- dije y me senté junto a ti.

-hola.- dijiste, muy fríamente -toma- y extendiste tu mano con la chamarra

-pero hace frío y no traes sueter- dije sin tomar la chamarra

-tu tampoco- y un silencio incómodo inundó todo, no había chicos de la escuela pasando, no había carros, el colectivo no pasaba y ni siquiera el aire hacía ruido. - ¿Hice algo que te molestará?- dije porfin

-Liliana...- y no dijiste nada más, pero notaba que un nudo se había formado en tu garganta.

-¿Liliana?- dije

-Siento que me estas cambiando por Liliana- dijiste

-Pero Liliana y yo solo somos amigas -

-Parece que ella es tu mejor amiga y no yo-

-Liliana no es mi mejor amiga y tú tampoco-

-¿Que?-

-No te considero una mejor amiga, sabes mucho de mi y yo de ti, no se si somos "Súper mejores amigas" o que etiqueta ponerle a nuestra relación pero no, no eres mi mejor amiga, eres más que eso.- suspiré y Vi que estabas a punto de llorar - ¿Porque piensas que te cambiaría?-

-Ahora pasas más tiempo con Lili, ayer ni siquiera almorzamos juntas...-

-Pero... Estabas con Karla y Julio, por eso no quería que te sintieras incómoda con tus amigos, digo con ellos también la pasas lindo-

Cartas a Julieta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora