Capítulo 43 - "Obras de arte"

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(Anteriormente fuera de las paredes de Konoha)

Una figura solitaria caminaba por el bosque en las sombras. Esta figura en particular se acercaba a Konoha con un objetivo en mente. Después de recibir información de una fuente confiable hace varios días, la figura decidió hacer un viaje no programado a Konoha y visitarla, aunque la intención real era visitar a cierta persona.

En todo caso, la figura vio que este viaje podría resultar divertido. Con eso en mente, una sonrisa siniestra se formó en el rostro de la figura mientras continuaba hacia Konoha...

(Más tarde; en la Torre Hokage)

Tsunade estaba de vuelta en su oficina haciendo la perdición de todos los Kages. No importa cuán poderoso fuera un Kage de cualquier pueblo, era la misma maldición que él o ella nunca podría borrar por completo: el papeleo. Logró firmar y sellar todos los documentos que registraban a Temari como ciudadana oficial de Konoha y Chuunin. Momentos después llamaron a su puerta.

"Sí", respondió Tsunade. La puerta se abrió para revelar un grupo de Jounins entrando a su oficina. Le hicieron una reverencia antes de ponerse de pie frente a su escritorio. Los Jounins sostenían pergaminos sellados con declaraciones escritas con la insignia oficial de Konoha y la firma de Sarutobi. También sostenían sobres sellados que poseían insignias oficiales de otras aldeas ocultas.

"Hemos recuperado las recompensas ofrecidas por la muerte de Orochimaru", dijo el líder Jounin, "No hace falta decir que era el hombre más odiado".

Tsunade sabía muy bien esa verdad, pero no podía quejarse demasiado al respecto. Hace dos semanas, Sandaime había enviado a varios Jounins para que se dirigieran a aldeas ocultas que ofrecían recompensas por la cabeza de Orochimaru y recuperaran las recompensas. Las recompensas por la cabeza del traidor Sannin eran altas, especialmente porque era un criminal de clase S.

Volviendo a la realidad, Tsunade dijo: "Excelente trabajo. Coloque los sobres y los pergaminos en mi escritorio y reciba su pago".

Los Jounins hicieron lo que se les indicó y en poco tiempo se les pagó a todos por sus misiones y se les despidió de la oficina. La cantidad de dinero que Naruto estaba recibiendo debido a todas esas recompensas era suficiente para que él tuviera una jubilación anticipada si así lo deseaba. Sin embargo, Tsunade pensó en muchas cosas que podría hacer con esa cantidad de dinero, la mayoría de las cuales involucraban sake y juegos de azar caros.

Mirando hacia su escritorio, vio otro pergamino que estaba sobre su escritorio. Era para otra misión. Un momento después, la puerta se abrió nuevamente para revelar a Kakashi y su equipo.

"Hablando del diablo", dijo Tsunade en voz baja cuando Jounin y su equipo entraron en su oficina, "Tengo una misión que quiero que todos completen".

Tsunade le entregó a Kakashi el pergamino que contenía la información sobre la misión. Kakashi abrió el pergamino y lo miró. El Hokage rubio notó los moretones en el rostro de Sai.

"¿Qué te pasó, joven?", Preguntó Tsunade. Sai respondió con calma: "Fui derribado dos veces porque tanto Ryota-san como Sakura-san no tomaron muy bien mi forma de lógica".

"Tu forma de lógica fue insultante", replicó Sakura.

"Insultando a aquellos que se niegan a verlo como es", comentó Sai sin ningún tipo de vacilación. Sakura se movió para golpear a Sai de nuevo, solo para que Kakashi atrapara su puño mientras Sai se mantenía firme sin moverse ni una pulgada.

"Sakura", dijo Kakashi, "reaccionas demasiado irracionalmente a los comentarios de la gente. Ese tipo de comportamiento hará que te maten si no aprendes a controlar tu temperamento".

Neo Yondaime HokageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora