O8

4.9K 398 274
                                    

Me quede sola pudiendo pensar en todo lo que había hecho Peter y el como había lanzado a esos 4 guardias a la pared.

Oí como las llaves de esa casa abrian la puerta.

Aparecio Peter.

- ¿Estas mas calmada Deva? - Peter se acerco a mi y yo me aparte de él.

- ¿Clamada? ¿Yo? Joder.. Pero si el que estaba loco eras tu - Negue con la cabeza reperidamente llevandome la mano a la cara.

- Si.. Lo se, perdón, se me fue de las manos, me enfade por una tonteria mia y lo pague contigo - Me mordí el labio al ver lo bien que se veía Peter mirandome fijamente.

No se cuantos minutos pasaron mirando a Peter pero al salir de mi trance tenía a Peter delante. Y lo unico que se me ocurrio en ese momento era saltar a sus brazos empezando a besarlo.

Peter se quedo quito sin seguirme el beso pero no me aparto y eso me dio señales de que no querria que parase. O.. Eso creía.

Sus labios se sentían tan calientes.. No quería separarme de él. Intente quitarle la camiseta blanca pero él no me dejo.

Me apartó de él bajando la cabeza. En ese momento la verguenza inundo mi cuerpo.

- Perdón.. - Dije rascandome la cabeza sin saber que hacer.

- No, te pido perdon yo.. Me comporte mal contigo esta noche - Ballard paso sus dedos por mis labios mirandome a los ojos.

Ay dios.. Voy a fallecer en cualquier momento.

- Da igual... No importa - Abrí la boca haciendo que dos de sus dedos tocasen mi lengua.

Quise que Peter continuara pero se aparto de mi.

- Tu cuarto esta ahí, yo estare al lado.. Buenas noches - Suspire al verlo irse hacia su habitación.

Me mire al espejo pero esta vez no me veía mas grande.. Pero tenía la cabeza rapada y eso lo odiaba.

Camine hacia la habitación de Peter, abrí la puerta sin pensarlo y lo que vi bendijo mis ojos.

- ¡Mierda! - Peter rapidamente se tapo el torso con la camiseta.

- Oh.. ¡Perdon! - Cerre la puerta.

- Dios.. No vuelvas a abrir sin tocar la puerta. ¿Que quieres?

- Ropa.. Quiero quitarme esta bata de hospital.

No me lo podía creer en 15 minutos me había pasado lo mas vergonzoso y lo mejor de mi vida a la vez.

Su abdomen era precioso y la marca de la V me hipnotizo.

- Oye, ¿Me escuchas? - Peter abrio la puerta.

- Eh? - Conteste confundida.

Ballard rodo los ojos dandome una camiseta suya. Al momento la olí, su olor era demasiado para mi cuerpo.

Fui a mi nueva habitación cambiandome y viendome al espejo que había ahí. La camiseta me iba gigante.

Sonreí viendome al espejo.

Me tumbe en la cama quedandome dormida al instante.

-----

Holaa, estoy un poquito mejor así que aqui os traigo un capitulo que creo que compensa el cap de ayer.

Espero que os guste os encante y os emocioneis viendo lo que he escrito.

Os amo, gracias por apoyarme jamas imaginaria llegar a conocer gente tan buena como vosotrxs.

Bye!

<3

Te seguiré || Peter Ballard ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora