¡Te acepto! Vhope [omegaverse]

T R E S

Después de convencer a Jin de que llevará a los niños al parque, me quedé viendo al chico que ahora sabía que se llamaba Hoseok.

Hoseok se quejó antes de despertar y mirar confundido toda la habitación para después mirarme a mí, instintivamente llevó sus manos a su cuerpo, que estaba en bata.

Inmediatamente, me miró asustado y mi cuarto se llenó de olor a vainilla poco agradable.

—No te hice nada... fue un amigo omega quien te cambio de ropa —le digo seriamente, realmente no quiero problemas.

—¿Qué eres?

—Un alfa, pensé que era obvio —digo sentándome en el sillón en frente de la cama para mirarlo a los ojos.

—Me refiero... ¿Por qué hiciste todo eso? —pregunta confundido, realmente no esperaba ayuda de nadie.

—Porque mi madre murió siendo acosada por unos estúpidos alfas que creían que el mundo les pertenecía —Hoseok me miró sorprendido, había dicho la verdad, mentir no iba conmigo —y me causa curiosidad todo lo que estás diciendo... lo primero que pregunta un padre que no sabe que paso es donde están sus hijos.

El abre los ojos brutalmente y mira la cama en busca de sus hijos, yo sonreí en mi mente.

—Tus hijos están bien —vuelvo a captar su atención de inmediato —se fueron con una persona de confianza al parque de diversiones.

—¿Al parque? —pregunta sorprendido y ahí sí, le doy una media sonrisa.

—Es increíble lo mucho que puedes saber de una persona en pocas horas, ¿no crees?

—¿A qué te refieres? —me dice aún más confundido y me alegro al ver que su olor vuelve al natural.

—Ella se llama YoungMi, pertenece al grupo de los omegas, tiene 8 años y es tu primera hija, él se llama SeongJin, tiene 7 años y es un alfa, ambos fueron muy amables en darme esa información básica, los dos son muy unidos, hacen la mayor parte de las cosas juntos porque logran complementarse, son inteligentes, observadores e instintivos. Les encanta el parque de diversiones pese a que nunca han ido a uno, la emoción y curiosidad que les causaba fue lo que me hizo saber esto, les gusta el helado y su favorito es el de vainilla y lo se porque se vieron felices cuando les di un pequeño vaso... —el me mira sorprendido, sus ojos abiertos, mirándome tratando de descifrar porque sabía tanto.

—¿Averiguaste todo eso?

—Hablemos del padre de esos niños.

—¿De mí?

—Te llamas Jung Hoseok, información dada por tus hijos, todo lo demás lo averigüe solo.

—¿Qué sabes?

—Eres un chico que sufrió bastante por culpa de las personas, es por eso que le tienes tanto miedo y desconfianza a la gente, tu aroma delata tus emociones, hueles a vainilla con un leve toque de chocolate blanco, y si te puedo ser honesto... —me levanto del sillón y caminó hacia la ventana, siento sus ojos sobre mí, giró la cabeza y conectamos miradas —me encanta tu aroma —noto un leve sonrojo de parte de él y yo le sonrió amablemente antes de seguir hablando —eres lo suficiente inteligente para no volver a caer en las redes de otro tan fácilmente, y digo "volver" porque claramente tienes esposo, el anillo en tu mano izquierda y tus niños dicen mucho... Aún tienes el poco olor de él, tu esposo tiene un olor a limón bastante agrio, el alfa te trataba bastante mal como para que tomaras la decisión de huir, eso lo se por la cantidad de moretones que tienes en tus brazos y piernas, tu cuello... está limpio, no hay marca, eso quiere decir que te fecundo, pero no te proclamo suyo y eso para mí... es falta de huevos —Hoseok baja la cabeza, lo miro y mi alfa se inquieta —y hay algo que aún no resuelvo, ¿Por qué huiste estando embarazado? —Hoseok me vuelve a mirar, abre la boca y el sonido nunca sale y sé que no me va a decir nada —tu ropa está en el baño, si quieres te puedes bañar, no hay problema —salgo de la habitación y tomo mi celular, le envió un mensaje a Jin y voy a la sala, ahí están Jackson y Jungkook sentados, hablando.

—¿Entonces? ¿Cómo estuvo? —pregunta Jackson, lanzándome una almohada que atrapó en el aire y se la vuelvo a lanzar.

—Hoseok tiene problemas, punto —digo y me siento en el sillón individual, cerrando los ojos y acariciándome la frente.

—¿Qué dijiste respecto a su ropa? —preguntó Jungkook mirándome pícaramente.

—La verdad, maldito pervertido. Que un omega lo cambió y te recuerdo que ese omega fue el tuyo —digo sonriéndole con victoria y él rueda los ojos.

Pasan los minutos y Jin llega con los niños, ambos traen un pequeño algodón de azúcar y una bella sonrisa en sus rostros.

—¿Se divirtieron? —les pregunto cuando llegan a mi lado, ambos asienten felices.

—Fue muy divertido, había muchos juegos y puestos de comida, gracias por pagarnos el viaje —habló Young Mi mostrándome una sonrisa que achicaba sus ojos de una manera adorable.

Estos niños podrían convertirse en mi debilidad con esas sonrisas, maldición.

—¿Papi ya está bien? —pregunta SeongJin dándole una mordida a su algodón de azúcar

—Está mejor, solo espérenlo, ellos ya se van —señalo a mis 3 amigos y ellos me miran indignados, después de reírnos un momento, empiezan a irse.

Ambos niños se sientan en el sillón y terminan de comer algodón de azúcar, voy a la cocina y me sirvo un vaso de agua, cuando vuelvo a la sala, los niños me ven curiosos.

—¿Pasa algo? —les digo mirándolos más confundido de lo que me gustaría admitir

—Usted es muy guapo —me dicen los dos al mismo tiempo, sonrío tratando de ocultar mi nerviosismo.

—Gracias, ustedes también son adorables.

Al momento baja Hoseok, el pelo medio húmedo y está cambiado, sus hijos se levantan y lo abrazan felizmente.

—Gracias por ayudarnos —me dice Hoseok tratando de hacer una sonrisa.

—Dile que está en peligro de perder al cachorro.

— ¿Y qué quieres que diga? ¿Qué necesita su alfa para poder vivir?

—No hay de que —le digo y recuerdo la bolsa que estaba en la cocina —oh, espera.

—Lo necesita, díselo.

—Creo que no entiendes.

— ¿Qué necesito entender? El omega va a perder al cachorro si su alfa no está con él.

—Esta es tuya —le extiendo la bolsa y él la toma —te puse algunas botellas de agua...

—Gracias.

—Él huyó, no necesitas ser un genio para saber que no quiere a su alfa.

—Taehyung, díselo, él necesita saber que está en riesgo.

—Es su decisión, no la mía.

—No estás entendiendo.

—Bueno, supongo que aquí nos despedimos —le digo acompañándolo a la puerta junto con los dos niños.

—De nuevo, gracias, fuiste muy amable.

—No te preocupes.

—¿Ahora soy yo el que no entiende?

—Taehyung, te lo estoy pidiendo, no quiero tomar el control, él está débil, y si por un momento yo hablo con él, no me hago responsable.

—¿De qué? ¿Qué harías?

—Buen viaje, Hoseok y niños, cuiden a su padre —les digo tratando de controlar a mi alfa, que está impaciente porque le diga el detalle de su cachorro, pero no voy a decirlo, no puedo.

—¡LO PROCLAMARE MÍO!

Y entonces me quedo estático.