ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ犯罪的 ──── ❛ tal vez... tal
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤvez, solo quiero ser tuya...
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ¿es demasiado pedir?
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a bonten boys fanfic
fem!oc x bonten
personajes perten...
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LOS OJOS DE LA rubia leyeron rápidamente cada uno de los nombres en las lápidas, pasó de largo cuando encontró la que tenía el apellido de su “familia” y terminó sentándose frente a la lápida de otra familia. Dejó medio ramen allí, hizo una pequeña oración y se levantó para seguir caminando, excepto que una voz la llamó.
—Qué sorpresa que estés aquí también —dijo una voz masculina que ella reconoció de inmediato, cuando volteó a verlo, él también iba a dejarle algo a esa familia.
—Él me pidió que viniera, Manjiro —respondió ella, llamándolo por su nombre real, él dejó lo que llevaba e hizo una pequeña oración para seguir hablando con ella.
—Pero sabías todo lo que iba a pasar, podías haberlo evitado —comentó Manjiro, acercándose un poco más a ella y ajustando su chaqueta a cuadros debido al frío—. ¿Temías por tu vida?
—Sabías que se culpó a sí mismo por Kazutora, para que no le pasara nada, ¿verdad? —preguntó, mirando directamente a los ojos de ónix del contrario—. En sí, yo no tengo la culpa, nadie tiene la culpa aquí… excepto tú, por cumplir años.
—Hiromi, ¿qué tiene eso que ver? —Manjiro dijo confundido, ella se rio y volteó mientras extendía su mano para despedirse—. Espera…
—Ten cuidado con quién te unes a tu pandilla, cuida a Emma y dile a ese tipo, Hanagaki que tenga más cuidado —comentó para terminar de irse, mientras Manjiro permanecía de pie, confundido por las palabras de la chica.
Afuera la esperaba un chico moreno en una moto, él le dio una mirada de aburrimiento y ella le sonrió, luego subió a la moto detrás de él.
—¿Ya terminaste? —preguntó, dándole una pequeña mirada, solo asintió mientras se aferraba a él.
—Me encontré con un chico muy… peculiar —comentó, deshaciendo la felicidad que embargaba su rostro—. Creo que lo conocerás más tarde, creo que se llevarían muy bien.
—¿Es parte de tu pasado? Ya sabes —preguntó vacilante, obteniendo un suspiro de respuesta, sabiendo lo que significaba—. Mi princesa, me haré cargo de cualquiera que te haya hecho daño.
—Eso no es necesario, él no hizo nada grave…
—Pero aun así lo hizo —interrumpió, girando un poco la cabeza, haciendo contacto visual con Hiromi y un escalofrío recorrió el cuerpo de la chica al ver sus ojos violetas más oscuros de lo habitual.
—Izana, por favor, no le hagas nada, él no tiene la culpa de lo que pasó —respondió después de unos minutos de silencio, mientras ambos se dirigían a donde Kakucho los había llamado.
—Dijiste lo mismo sobre los hermanos, y sí, ellos tenían la culpa —la rubia comenzó a desesperarse mientras pasaban los segundos y ninguna respuesta venía a su mente, y nuevamente, mintió.
