Tokio Revengers One-Shots

One Shot 1

Ran Haitani

"Amo y Sumisa"

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Narra ____

"-¿Quieres postre? -me pregunta resoplando.
-Sí.
-El postre podrías ser tú-murmura suguerentemente.
-No estoy segura de que sea lo bastante dulce.
-____,eres exquisitamente dulce. Lo sé.
-Ran, utilizas el sexo como arma. No me parece justo -
susurro contemplando mis manos.

Luego lo miro a los ojos. Alza las cejas, sorprendido, y veo que
está pesando mis palabras. Se presiona la barbilla, pensativo.

-Tienes razón. Lo hago. Cada uno utiliza en la vida lo que sabe,____. Eso no quita que te desee muchísimo. Aquí. Ahora.
¿Cómo es posible que me seduzca solo con tú voz? - Estoy ya jadeando, con la sangre circulándome a toda prisa por las venas, y con los nervios estremeciéndome.

-Me gustaría probar una cosa -me dice.

Frunció el ceño. Acaba de darme un montón de ideas que tengo
que procesar, y ahora esto.

-Si fueras mi sumisa, no tendrías que pensarlo. Sería fácil-me dice con voz dulce y seductora-. Todas estas decisiones... todo el agotador proceso racional quedaría atrás. Cosas como «¿Es lo correcto?», «¿Puede suceder aquí?», «¿Puede suceder ahora?». No tendrías que preocuparte de esos detalles. Lo haría yo, como tu amo. Y ahora mismo sé que me deseas, _____.- ¿como llegamos a ésto?."

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Ya lo recuerdo, solo soy una chica que está terminando su carrera a literatura, novelista inglesa, romántica, es lo más precioso, por un favor a mí amiga fui a entrevistar a un famoso empresario que a sus 28 años ya había logrado conquistar mayor parte de Japón, por cierto soy Inglesa pero la cultura Japonesa es mí pasión y venir a estudiar aquí fue un sueño hecho realidad.

Cuando conocí a Ran Haitani no pude evitar derretirme de muchas maneras ante él, aún más ante su intensa y burlona mirada, su voz gruesa, alta estatura, cabello perfecto, todo de él me volvía loca, creí que esa entrevista sería la única oportunidad de verlo en persona de hablar con él, pero no, lo veía cada vez más seguido e incluso pude ver una seción de fotos de él, dónde según mí mejor amiga, no dejaba de verme no podía evitar morder mí labio de solo imagínarme todo lo que me podría hacer, entre más lo conocía por casualidades más me enamoraba, era un caballero.

Me llevaba de citas elegantes y todo lo que él decía debía hacerlo, y me gustaba obedecerlo, hasta que de un momento a otro en una borrachera dónde el me encontró y llevo a su departamento una declaración fue lo que detonó todos mis deseos por él.

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"Oigo unos golpes en la puerta. El corazón me da un brinco y no
me sale la voz, pero aun así Ran Haitani abre la puerta y entra.Vaya, ha estado haciendo ejercicio. Lleva unos pantalones de chándal grises que le caen ligeramente sobre las caderas y una camiseta gris de tirantes empapada en sudor, como su pelo. Ran Haitani ha sudado. La idea me resulta extraña. El ver las gotas, el brillo en su piel resaltando el enorme tatuaje que ocupa la mitad de su pecho me hacía desear dibujar con mis labios sobre la tinta, Respiro
profundamente y cierro los ojos. Me siento como una niña de dos
años. Si cierro los ojos, no estoy.