| Venganza de Muerte | Pasión de Gavilanes

3. Jugadas maestras

Tras el día agotador que estaba teniendo Franco, eran las dos de la tarde y estaba saliendo del Centro de Modas, después de platicar con Jimena sobre el vestido de Sarita.

- Tú tranquilo Franco, mañana Sarita estará aquí- dijo Jimena.

- Eso espero Jimena, es tan difícil mantener un secreto así, pero ¿recuerdas nuestra boda? Fue un caos, porque no lográbamos ponernos de acuerdo. Y bueno ahora, 20 años después ya tengo dos hijos y un ejercito que me ayudan a elegir las cosas- dice Franco.

- Tranquilo hermano, Sarita amará la sorpresa - dijo Oscar.

- Bueno estoy muy cómodo pero tengo que ir a buscar a Gaby a la Universidad porque...- el celular de Franco sonó.

- Papá, soy yo, olvidé decirte que me viene a buscar el primo, Erick viene por mi- dice Gaby- Así que sigue haciendo lo qué haces, nos vemos en la casa.

Y Gaby colgó.

- Erick irá por Gaby entonces podemos seguir hablando-.

- No se diga más, sigamos viendo esto- dijo Jimena...

🖤🖤🖤

Andrés Reyes sabía que debía seguir con su vida, no sería la primera vez que le romperían su corazón. Y claramente Albin se había ido para no regresar, y obviamente no había tenido la fuerza para decirle que ya no quería tener más una relación con él, y claramente se enteró cuando Panchita le comentó que la casa de Duarte.

- Panchita, pero ¿cómo estás diciendo eso?- preguntó Andrés, mientras esperaba a que el agente de bienes raíces llegara a lo que solía ser el Bar Alcalá.

El músico tenía intención de comprar el terreno, Ponchita estaba esperando agente y a la persona interesada también en adquirir los terrenos.

- Pues es que la persona que compró la casa de Albin, es la otra persona interesada en los terrenos- dijo Panchita.

- ¿Cómo? Acaso es una broma, yo ya había hablado con ustedes Panchita.

- Perdón Andrés pero Rosario me dijo que escuchara todas las ofertas, lo siento-

- ¿Rosario? Panchita, ella te dio la propiedad del terreno, tú eres la dueña. Ella se fue de este pueblo como si nada le importara, ni siquiera le importó vender a su hija con Samuel- dijo Andrés.

Andrés Reyes podría ser un caballero, pero ahora Muriel era parte de su familia, la quería mucho y no iba a permitir que nadie le hiciera daño.

Pero la plática de Andrés y Panchita fue interrumpida por unos tacones, y ahí apareció una mujer rubia, con un sombrero, y una cazadora verde, jeans y un top rosa. Sus botas hacían un ruido de impacto.

- ¿Y bueno con quien se debe cerrar este trato?-  dijo la rubia.

- Aquí todavía no se cierra ningún trato- dijo Andrés alzando la voz.

- Mora niño, yo vengo a cerrar un trato- dijo la rubia, ahí Andrés noto que era extranjera su acento sonaba muy latino, pero también había algo de mexicano - A mi me dijeron que hoy...

- Que hoy conocería a la otra persona interesada en estos terrenos- intervino Panchita - señorita Linares, le presentó a Andrés Reyes Elizondo, el interesado en estos terrenos como usted, Andrés ella es...

La rubia interrumpió, alzó la mano y se presentó ante Andrés.

- Soy Amelia Linares, mucho gusto señor Reyes- dijo Amelia mientras observaba mejor al músico.

En eso sonó el celular de Panchita.

- Perdon-

- Ve y contesta- dijo Amelia - mientras yo platico con este chico y la amiga de Rosario desapareció.