Reencuentro accidental [✔]

CAPÍTULO NUEVE: SINCERIDAD EN TODO SU ESPLEDOR

Después de la conversación con Naruto me dirigí sin ningún tipo de duda hacia el apartamento de Hinata, debía ser sincero y decirle como me sentía. Pero cuando llegué a su puerta la vi abrazando a un chico de plateado cabellos para luego darle una caja.

Ella tenía toda su atención puesta en él mientras hablaban, ni siquiera se había percatado de mi presencia.

Sentí que no hacía falta que me presentara a aquel chico, por su físico podía adivinar que se trataba del ex de Hinata del que me habló cuando nos encontramos por primera vez.

Por un momento me vi tentado a escapar, no quería que me dijera que habían vuelto, pero no pensaba volver a huir, incluso si esta vez acababa con el corazón hecho pedazos quería que ella supiera como en verdad me sentía.

Me acerqué y ella me dio un ligero vistazo, pero no me dijo nada. Yo quería hablar, pero no sabía muy bien que decirle, aunque no fue necesaria mi participación, ya que parecía que el chico ya estaba por irse.

—Gracias por guardarlo —dijo y ella solo sonrió. —Cuídate Hina —le dijo para luego marcharse sin dirigirme la mirada, tal vez ni siquiera sabía quién era yo.

Cuando por fin la tuve de nuevo frente a mí, sentí como el peso que mi corazón había estado soportando se había aliviado de golpe.

—Sasuke-kun—dijo ella, se notaba seria, puede que incluso algo molesta.

—Lo siento—fue lo único que pudo decir. —Yo... en verdad solo estaba huyendo, he estado enamorado de ti desde siempre, pero cuando me fui a estudiar al extranjero y comenzaste a salir con Naruto yo... me cegué de celos, comencé a salir con Sakura por despecho más que por lo que había hecho por mí. Por eso que cuando volví no pude dirigirte la palabra, aunque hubieras roto con Naruto—confesé. —Incluso ahora he estado huyendo, temiendo que tus sentimientos por mí no fueran verdaderos, escudándome en que tenía novia. Pero ya no puedo, no puedo más—la miró y ella me la devolvió, sus ojos perlas brillaban, pero no sabía cuál era el sentimiento que estaba tras ellos. —Ese mes que me estuviste cuidando, incluso le dije a Naruto que no viniera a mi casa porque estaba con mi mamá, por eso no lo habías visto. Hinata, hasta ahora solo me has dado a entender que me deseas, pero... ¿hay algo más? Yo... yo...

Pero antes de que pudiera decir alguna cosa más me abofeteó, dejándome frío.

—¡Eres un idiota! —gritó enfadada. —¿Crees que solo tú has estado así durante todo este tiempo? —confesó haciendo que la mirara sorprendido.

—Soy un idiota—contesté sin poder contradecirla.

Tenía tantas ganas de abrazarla, tantas ganas de sentirla entre mis brazos, pero me frené, no quería incomodarla.

—Lo siento Sasuke, pero necesito un tiempo—dijo intentando sonar tranquila.

Pude sentir como algo dentro de mí se volvía a romper, pero sabía que la había lastimado demasiado, todo era mi culpa.

—Me lo imagino, la he cagado bastante, soy un idiota—dije arrepentido.

—Ambos lo somos—respondió avergonzada. —Siento mucho haberte golpeado—dijo visiblemente arrepentida, siempre era tan dulce y amable conmigo, incluso cuando no lo merecía.

—No importa, esto no es nada—dije con una pequeña sonrisa. —Sé que no puedo borrar mis errores del pasado, pero quiero que me des una oportunidad. No te pido que me correspondas ahora, sé que mis acciones te han lastimado. Solo quiero me dejes intentar demostrarte lo mucho que te amo—dije siendo totalmente sincero. —Te amo Hinata, siempre lo he hecho, perdón por tardar tanto—confesé.

La vi morderse ligeramente el labio, estaba dudosa, era normal que se sintiera insegura, no había hecho nada más que hacer que su confianza en mi disminuyera con cada una de mis acciones.

—Eres tan injusto—le escuché decir.

—Podríamos empezar de nuevo—dije esta vez adoptando una cara más seria. —No puedo pedirte que salgamos porque sé que con todo lo sucedido no confías en mi—dije y ella no me lo negó. —Por eso quiero una oportunidad.

—¿No me vas a preguntar por el chico de antes? —dijo ella de pronto.

—Era tu ex, ¿no? —respondí sorprendiéndola, no entendía por qué salía con eso ahora. —No olvido nada de lo que me cuentas, con tu descripción de él fue fácil reconocerlo—admití.

—Vino para que le devolviera sus cosas—dijo logrando perderme todavía más, no sabía porque estábamos hablando de él. —¿Cómo esta Sakura?

—¿Por qué me preguntas por ella? —dije sin entender nada.

—¿Aún sales con ella? —me dijo con una mirada triste y entonces lo entendí. Ella me estaba diciendo que no tenía nada con Toneri, y quería saber que tan enserio iba yo esta vez.

—Le conté la verdad—dije sorprendiéndola y logrando que sus mejillas se sonrojaran.

—¿Toda la verdad?

—Necesitaba ser sincero. Alguien me dijo que cuando supiera lo que quería estaría dispuesta a hablar conmigo—dije con una sincera algo burlona.

—Pues creo que fue alguien muy lista—dijo ella con una pequeña sonrisa que hizo sentirme mejor, esa era la Hinata que me gustaba, odiaba verla triste, más si era por mi culpa.

—¿Me darás una oportunidad? —dije mirándola directamente.

—Solo esta vez—dijo mientras otra sonrisa se dibujaba en su rostro y por fin me volvía a sentir completo.

oOoOo Meses atrás en casa de los padres de Hinata oOoOo

Mikoto y Hana, junto a Hanabi tomaban el té.

—¿Crees que nuestro plan funcionará? —preguntó Hana a la pelinegra logrando que esta sonriera con confianza.

—Bueno, nosotras solo le estamos dando una oportunidad, ahora es cosa de ellos ser sinceros con sus sentimientos—respondió Mikoto.

—Pero Sasuke-san tenía novia, ¿no? No sé si todo esto es buena idea—dijo Hanabi un poco preocupada.

—Desde que ambos eran pequeños han estado enamorados el uno del otro, pero ninguno se ha atrevido nunca a sincerarse. Ahora que Hina-chan por fin está libre les he querido dar la oportunidad. No es que no me guste Haruno-san, pero siempre he querido a Hina como mi nuera—se sinceró Mikoto haciendo sonreír a ambas Hyugas.

—Solo espero que se digan cómo se sienten, esos dos llevan enamorados uno del otro media vida—pidió Hanabi.

—Ahora eso solo depende de ellos, pero estoy segura que de alguna manera acabará bien, siempre han sido perfectos el uno para el otro—corroboró Hana mientras tomaba su té.

Hiashi afuera escuchaba la conversación de las tres mujeres. Solo rogaba porque su hija no saliera lastimada, a veces su mujer podía ser realmente impredecible, con razón le había pedido que le mintiera a Hinata sobre irse de viaje.

Notas de la autora: Holis, bien eso es todo, la verdad es que no sé si hice bien o si hice mal al dejarlo de esta manera. Espero al menos que les haya gustado y gracias a todo el mundo por el apoyo y comentarios a esta historia.

Ya nos leemos.