El llanto de un alma. (Spencer Reid y tú.)

Capítulo 9.

Mande un mensaje a Derek.

Derek tarda en venir, no quiero que interrumpas mi fiesta.
Te quiere, Alba.

Y enviar. Sonreí a Spencer, quien alzo una ceja extrañado. Al instante recibí el mensaje de vuelta.

Ten cuidado pelirroja, el guaperas es un semental.
No iré hasta las 4:00 (eran las 12:00) tienes tiempo para unos cuantos asaltos.
Suerte, Derek.

Apague mi móvil y lo deje bajo la cama. Seguía en tanga y sujetador, cosa que incomodaba a Spencer.

-Puedes ponértelo, esta limpio.- mire el pijama detenidamente. No era sexy... Y por muy bien que me quedase una camisa de hombre, esa no lo haría.

-Prefiero dormir así.-le di el pijama.

-¿No lo quieres?- casi me chilla, se veía enfadado. Negué con la cabeza.- Como se puede ser tan...

-¿Tan qué?-dije acercándome a su cara con voz sensual. Trago saliva.

-EH... Tan...-estaba mirándome los labios.- Terca. Me pides el pijama, me amenazas con acostarte conmigo y luego no lo quieres...

-Yo no te he amenazado con acostarme contigo... Pero si tu quieres que nos acostemos.-me acerque mas a sus labios. Se veían tan besables. Oímos como tocaron la puerta. ¡Joder!- Tranquilo guaperas, Derek no vendrá hasta las 4, aun me queda noche... - me puse su camisa y woau, si me veía sexy, demasiado. Abrí la puerta y la cara de JJ era un poema. Spencer en la cama medio sudado y yo con una camisa solo.

Venia a decirnos que mañana tendríamos que quedarnos en el hotel por no se que historias de los policías.

-¿Por dónde íbamos?-dije cerrando la puerta.-A si.- me quite la camisa.- Estábamos en tu cama.

Me abalance sobre el, quien quedó de bajo de mi.

-Alba por favor, yo no... No puedo.

-¿Por qué?- le bese en el cuello.

-Tu tío...

-¿Estas siendo sincero?- asintió con la cabeza, lo estaba siendo, sus pupilas no se dilataron y su respiración apenas se notaba.- Entonces no te preocupes. No se tiene porque enterar.- le empecé a dar pequeños besitos por todo el cuello. Ladeó el cuello hacia la izquierda dejándome todo ese lado para besar.

Así que el Dr. Tiene su lado oscuro. Quería parar y decirle que era solo una broma y que no le haría eso si no fuese sin su consentimiento, pero no podía. El olor de su desodorante me tenia completamente atrapada.

-Alba...-susurro.- No puedo...

-No lo entiendo... ¿No te gusto?- ese rechazo me había dolido, pero por qué si no me gusta... ¿O si...?

-Porque no puedo... No podría mirar a tu tío...

-Dios Spencer, me agotas. Mi tío no importa, esto es la vida privada y a el no le concierne y su actitud ante ti no va a cambiar. Seguirá pensando que eres uno de sus mejores y mas prestigiosos agente con los que ha trabajado. A el no le importa con quien me acueste.- termine de gritarle.

Sus ojos estaban impactados. Susurro un leve "pero" y no aguante mis impulsos.

-Que te den Reid.- dije lo mas asqueada posible. Me baje de su cama y me fui a la mía, que desgraciadamente estaba a su lado. Mierda.

Oí como entro en el baño y se hechaba agua en la cara. Estaba murmurando algo, pero no supe adivinar que.