Calamity

Manzanilla

"Buen tiro" elogio un tritón rosa, habían pasado ya las 5 semanas con su yeso, y se lo quitarían al día siguiente, pero esto no impidió que buscase como avanzar la parte física de su entrenamiento, por lo que si bien no podía correr o practicar con la espada si podía practicar con una ballesta que encontró en la armería mientras Yunnan le daba una lección de tipos de armas y el uso más potencial de estas

"Enserio ?" cuestiono emocionada la pequeña humana, esta era su 5° lección con el arma y al fin comenzó a dar tiros más centrados, al inicio fue bastante frustrante porque con su torpeza natural casi se clavó una flecha a ella misma.

"En serio, creo que es suficiente por hoy, mañana por fin poder patearle el trasero en tu entrenamiento, joven Marcy" dijo maliciosamente Yunnan.

Eso le dio un escalofrío a Marcy, si que era feroz su instructora, sus prácticas con la ballesta la dejaron sin brazos, no quería imaginarse cómo le iría con lo demás del entrenamiento.

"Y una cosa más joven Marcy, reciba esto de mi parte" era una pequeña daga, era bastante simple como las que vio el día que visitaron la armería, pero esta tenía unos pequeños detalles verdes tanto como en la funda como la empuñadura.

"Esto le será útil mañana", dijo entregando el objeto como si fuera lo más preciado, "pero creí que entrenaríamos con la espada?" dijo confundida Marcy, con una sonrisa maliciosa le respondió su maestra, " oh y lo haremos.... pero tengo un presentimiento sobre tu estilo de pelea"

Marcy muy confundida prefirió no cuestionar la más, la sonrisa maníaca que le estaba dando de verdad que la estaba asustando así que prefirió la vida antes de lo que sea que Yunnan tenía planeado para su entrenamiento.

"Bueno entonces continuaré con mis exámenes, hasta mañana Yunnan" dijo mientras corría a otra parte del castillo, con estas pruebas probaría que ya tenía la mitad del conocimiento necesario para ser un ranger, había sido un mes bastante cansado y aún no había salido del castillo, pero al fin mañana sin el yeso podría ir a la ciudad, Lady Olivia le prometió dar una vuelta por esta y por las playas de afuera de los muros.

"Veo que Yunnan te dejo libre de su tortura" bromeo una voz desde la puerta de la habitación donde solía estudiar "buenas tardes Lady Olivia" saludo Marcy feliz de encontrarse con el anfibio.

"Emocionada por mañana?" preguntó mientras le entregaba una prueba "si, ya quiero explorar todo e ir a esa tienda de bugachinos de la que me contó" dijo emocionada lista para dar su examen "bueno entonces dejo que te concentres en tu prueba se que te irá bien" dijo Olivia dejando la habitación.

Después de terminar se dirigió a donde sabía que se encontraría Olivia, ella solía pasar el inicio de la noche leyendo en su oficina, le prometió que como ya había completado gran parte del temario le prestaría unos de sus libros de ficción favoritos de Amphibia, esto la emocionó bastante porque eran libros de ficción de otro mundo.

"Aquí está mi prueba Lady Olivia, estoy un 90% segura que acerté a todas las preguntas de forma correcta" dijo emocionada, pero no había nadie en la oficina, esto era raro, donde podría haber ido? no le dio mucha importancia y dejó su prueba con una nota de -Marcy estuvo aquí-

Mientras se dirigía a su habitación pensó en pasar por las cocinas para robarse algún bocadillo, su plan era simple escabullirse ir a la despensa de la izquierda y sacar el tarro de galletas que sabía que el chef dejaba, claro que simple plan, que podría fallar, lo que no previno es que vería a Yunnan escabulléndose por el techo de las cocinas para luego salir con un bulto de estas, esto era extraño, porque su mentora de armas tendría que escabullirse dentro del palacio?

Esto cambió totalmente sus planes de la noche, seguiría a Yunnan para ver qué hacía, qué secretos guardaba, sería una cita por lo que robó la comida a escondidas?¿Quién era su cita?, era alguien que ella conocía?, no conocía a muchos anfibios más de los que trabajaban en el palacio, justo en ese momento su tren de pensamiento fue interrumpido cuando la general se detuvo en un balcón discreto que no podía ser observado con facilidad desde afuera del palacio.