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Al día siguiente, los principes fueron a sus respectivas clases, la sultana Tn se cambió por algo elegante pero hermoso junto a su habitual anillo

Llamo a un guardia, que al entrar se reverencio esperando alguna orden, ella le dijo que le dijera a Hurrem que viniera a sus aposentos, el obedecio cumpliendo su orden no sin antes reverenciarse antes de salir

Espero pacientemente que Hurrem ingresara por esa puerta, no estaba nada contenta con que le dijera esas cosas a los niños, tn los amaba y jamas podría hacerles daño de alguna manera, cada uno de esos niños se había ganado un espacio en su corazón

Mientras que por otro lado Hirrem estaba frustrada ¿cómo lograría sacar a la Sultana Tn del palacio?, era obio que hiba a ser más difícil, había presenciado de ante mano el poder que ella tenía sobre el sultan y el no sederia tan fácil

Sus pensamientos fueron interrumpidos por el guardia que entró diciéndole que la Sultana Tn la esperaba en sus aposentos

Estaba ligeramente nerviosa ya que no la conocía, por lo tanto seria difícil saber lo que estaba planeando aquella mujer

Llego a los aposentos de la Sultana Tn, un guardia entro adentro al salir le dijo que podía pasar

Al entrar se quedó sorprendida al ver los aposentos de Tn eran hermosos sin duda y muy espacioso, pero no demostró mucho su sorpresa

Hurrem: Sultana -se reverencio- ¿se podría saber por qué me mando a llamar?

La sultana Tn estaba en el balcón dándole la espalda, se voltio lentamente con el rostro sin expresión mirandola friamente, calculando a la mujer enfrente de ella

Por unos segundos Hurrem se sintió intimidada, la belleza y poder que irradiaba Tn eran impresionantes

Tn: sabes Hurrem pensé que eras más inteligente -dijo seria-

Hurrem: ¿A que se refiere Sultana, no la estoy entendiendo?-dijo con falsa inocencia-

Tn se acercó lo suficiente para hacerle saber que no caería en ninguno de sus juegos, Hirrem se puso más seria y rígida

Tn: ¿quiero que me digas por que les prohibiste a los príncipes estar cerca de mi? -dijo directa-

Hurrem: no se de que habla Sultana pero yo jamás les prohibiría estar cerca de usted, seguro y lo malinterpreto

Tn: escucha atentamente lo que te diré Hurrem, no serás la primera tampoco la última persona que tratar de hundirme, por ti bien te aconsejaría que te alejara de mi camino -advierte-

Hurrem: Sultana usted no puede amenazarme, usted me debe respeto, yo también soy una sultana, no puede hablarme así -dijo enojandose-

Tn: veo que todavía no lo has captado Hurrem no es una amenaza, es una advertencia -dijo con una sonrisa burlona-

Hurrem: soy la esposa del sultan y la madre de sus 5 hijos, soy la Sultana Hurrem, soy la alegría del sultan -dijo perdiendo la paciencia-

Tn solto una risa, como podía haber alguien tan ignorante, el sultan no era nada en comparación a ella

Tn: tu crees que a mi me importa si eres la esposa del sultan o la madre de sus hijos, la que debe respetarme aquí eres, enserio piensas que me interesa tu titulo de Sultana, a comparación de mi yo soy más que una simple sultana como tu

Tn estaba mucho mas seria que antes, la mujer frente a ella era solo alguien que se llenaba de arrogancia por el poder que no tenía, y eso en cierto punto le causaba diversión

Tn: ¿Hasta que punto estas dispuesta a llegar por obtener lo que quieres?, seguramente llegaste aquí por que fuiste secuestrada de tu hogar natal ¿no es así? -dijo al ver la cara de Hurrem descomponerse- y pensaste que al tener a mi hermano a tus pies serias más que una sultana, pensaste que serías la única para el, así tu podrías tener lo que quisieras -dijo fria mientras veia a Hurrem con una sonrisa socarrona-

Hurrem hizo una rápida reverencia para salir rápidamente de esos aposentos, para así dirigirse a los suyos donde al entrar la madre sultana estaba hay

Hurrem: Madre -se reverencio levemente- es un placer tenerla aqui, ¿a que debo su presencia?

Madre Sultana: Sabes a lo que vengo Hurrem, necesitamos aliarnos para sacar a Tn del palacio, es peligroso que ella esté aquí -dijo con su tono de voz habitual-

Hurrem: bien seremos aliadas pero que haremos con el sultan, el no dejará que ella se valla o le pase algo

Madre sultana: Yo me encargaré de mi hijo, lo único que debes hacer ahora es mantener distancia con ella, no tenemos que levantar sospechas -dijo finalizando la conversación saliendo de los aposentos de Hurrem-

El sultan estaba tan concentrado creando un boceto de un hermoso collar, que se distrajo al ver a su hija Mihirimah entrar llorando quien fue directamente hacia el Suleiman no sabía que le pasaba así solo la abrazo tratando de calmar su llanto

Suleiman: por que lloras que sucedió -dijo preocupado-

Mihirimah: Mustafa el me grito además jalo de mi cabello diciendo que solo era la hija de una esclava -dijo llorando-

Suleiman se enojó, por lo que ordeno que trajeran al príncipe Mustafa quien al llegar no entendía por qué su padre estaba molesto con el

Suleiman: ¿!Porque le dijiste todas esas cosas a hermana Mustafa, además por que la agrediste!? -grito a penas Mustafa eataba dentro de sus aposentos-

Mustafa: Padre no se de que estas hablando yo no hice nada de eso

Dijo tratando de hacerlo entrar en razón pero no sirvió de nada ya que el sultan le pegó fuerte en la mejilla que se puso roja, además de dejarle una marca de su mano en su mejilla

Suleiman: ¡y tienes el valor de mentirme soy tu sultan,y te ordeno que le pidas disculpas a tu hermana en este instante! -ordeno furioso-

Mustafa no tuvo de otra a pesar de que el no había hecho lo que el sultan le decía, estaba temblando de lo asustado que estaba

Mihirima miraba todo con una pequeña sonrisa pero la cambio drásticamente por una de tristeza al ver a Mustafa acercarse y a su padre viéndolos

Mustafa: lamento haberte agredido, no debí decirte todas esas cosas espero que seas capaz de perdonarme por mi imprudencia -dijo sosteniendo su mejilla aun adolorido por el golpe-

Suleiman: vete, no quiero que salgas de tus aposentos hasta que yo te lo ordene -dijo sin verlo-

Mustafa se retiró con la cabeza agachada se dirigió a sus aposentos no quería que su padre se enojaba aún más con el, pero choco con un cuerpo por lo que casi cae al suelo de no ser por unos brasos conocidos para el rodearlo, observo a quien lo sostenía viendo a la Sultana Tn sosteniéndolo por lo que no dudo en apegarse fuertemente a ella

Tn lo sostenía, en su rostro se veía la preocupación, ella sostuvo su rostro tratando de que lo viera a la cara, pero el trataba de evitar que viera su rostro, no quería que ella se preocupara

Ella lo sostuvo en sus brasos, por lo que el aprovechó de esconder su rostro en su cuello

Tn lo llevo a los jardines donde seria más fácil que el le dijera que había pasado, se sentó en el pasto sentandolo en su regazo donde había un gran árbol, por lo que su sombra evitaba los rayos del sol

Te alarmarte cuandonoiste débiles sollozos, por lo que sin importar nada lograste sacar su cara de tu cuello, y lo primero que notaste fue que su pómulo derecho estaba muy rojo, hinchado y con la marca de una mano sobre este

Tn: cariño, ¿quien te hizo eso? -preguntas suavemente secando algunas lagrimas que salieron de sus ojos-

El solo nego con la cabeza, con cuidado te levantaste dirigiéndose a tus aposentos, donde ordenaste llamar a una doctora, quien no tardó en llegar y curar la inflamación del príncipe dándote una crema para la hinchazón, al acabar se retiró, en todo ese tiempo estuviste con Mustafa quien solo estaba abrasandote sin intención de soltarte, ya que todavía tenía miedo

Así estuvieron toda la mañana, dibujando, pintando y comiendo algunos bocadillos, hasta que unos gritos afuera de tus aposentos te hicieron salir, dejaste a Mustafa pintando, y lo que viste te sorprendió bastante

Mis querid@s lector@s ¿Les está gustando la historia?
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