Poder

013

La tensión en la sala era evidente, el sultan estaba perplejo, por la manera en como su hijo menor llamó a su hermana, pero lo dejó pasar, se acercó a las otras sultanas, primero beso la mano de la Madre Sultana llevándola a su frente

Madre sultana: Hijo mio, no sabes lo angustiada que estaba, pero me alegra que hallas vuelto sano y salvo -dijo con falsa tranquilidad-

Suleiman: ya he regresado madre, no debes angustiarte por mi

Hatice: sultan -se reverencia besando su mano- que Allah lo tenga bajo su gloria y le otorgue salud

Suleiman: hermana, estas radiante y hermosa, me alegra tu presencia

Hatice sonrio por los halagos de su hermano

Hurrem: su majestad -dije haciendo el mismo proceso que Hatice- no sabe cuanto anhelaba su llegada

Suleiman: mi hermosa Hurrem, me alegra saber que me extrañabas tanto como yo a ti -dijo besando su frente-

Tn no escuchaba nada de lo que los demás decían, su mirada estaba perdida en la nada, pero podía sentir los brasos de el pequeño rodeandola, que la abrazaba como si hubiese esperado este momento, no podía creer lo mucho que su pequeño Cihangir había crecido, salió de su ensoñación al sentir una mano es su hombro

Levanto la mirada al ver la preocupación en los ojos de su hermano

Suleiman: estas bien, te quedaste mirando la nada, ¿quieres que llame al Doctor? -dijo preocupado-

Tn: No es necesario Suleiman, solo fue la impresión -dijo con tranquilidad, rodeando con sus brasos el pequeño cuerpo del niño-

El sultan asintió conforme, acercándose a los principes, que se reverenciaron dándole sus respetos

Sulieman: Hijos míos, están más grandes desde que me fui, ustedes dos ya son todo unos hombres -dijo refiriéndose a Mustafa y Mehmed-

Suleiman miro a su única hija Mihirimah, se acerco ella feliz de verla, ella beso su mano llevándola a su frente, el la abraso siendo correspondido por ella

Hurren sonrió al verlos, sabía que Mihirimah tenía al Sultan el sus manos desde niña, eso le enorgullecía y satisfacía

Tn se levanto bajando a Cihangir de sus brasos, este hizo un puchero al ser alejado de sus brasos, ella beso su mejilla, borrandole el puchero de su rostro cambiándolo por una tierna sonrisa

Se acercó a los principes, ellos se reverenciaron ante ella mostrándole respeto casi más que al mismísimo sultan, ella se acercó mirando los rostros serios u formales que tenían

Tn: vamos no sean tan formales conmigo, vengan a darme una buena bienvenida -dijo sonriente abriendo sus brasos-

Mustafa, Mehmed y Bayaceto fueron los que ña abrazaron, en cambio Selim solo se quedo en su lugar sin molestarse en ir hacia Tn, ella abraso a cada uno besando sus mejillas, estaba tan feliz de verlos, los extraño demaciado, pero al ver que uno de sus príncipes solo se quedo parado es su lugar se entristeció un poco, pero no lo hizo notar

Tn: Vayan a mis aposentos, no demorare demaciado -dijo con dulzura-

Los principes se reverenciaron, retirándose del lugar, Mehmed tuvo que cargar a Cihangir, ya que este se rehusaba a dejar a la Sultana Tn, ella le prometió que estaria todo el tiempo con el pero debía salir e ir con sus hermanos, los principes se fueron, solo Mihirimah quedó junto a las otras sultana y su madre, tn cambio su sonrisa por una mirada de enfado

Tn: ¡guardias! -dos guardias entraron reverenciandose- traigan a Ibrahim Pasha -ordeno-

Los guardias obedecieron, solo bastaron unos minutos para que Ibrahim llegara, al ver a la sultana Tn junto al Sultan se reverencio, en su rostro se podía notar el nerviosismo

Suleiman: Hermana, ¿por que llamaste a Ibrahim? -confundido-

Madre Sultana: Hijo, nosotras nos retiramos -dijo queriendo salir del lugar-

Hurrem, Hatice y Mihirimah se reverenciaron, hiban a salir junto con la Madre Sultana, pero Tn no las dejo salir, no dejaría que se fueran sin antes recibir lo que se merecían

Tn: no es necesario que se vayan esto también les concierne a ustedes -dijo seriamente-

Suleiman: Tn tiene razón, quédense debe ser importante

Las sultanas no tuvieron más que obedecer, sabían que nada bueno saldría de aqui, en especial cuando el sultan siempre obedecía a lo que la sultana Tn le decia, y Mihirimah estaría por presenciarlo

Tn: ¿recuerdas cuando me mandaste una carta, pidiéndome que te fuera a ayudar a la campaña? -dijo a Suleiman-

Suleiman: claro, fui yo quien ordenó que te la enviaran, ¿por que lo dices?

Las Sultanas junto a Ibrahim se sorprendieron, ninguno de ellos sabía que ella había ido a la campaña con el Sultan, ninguna Sultana peleaba con armas, o armaduras, pero ella si

Tn: hice una reunión con los Pashas, informando que en mi ausencia dejaría a los principes a cargo del imperio, e ibrahim sería su consejero -dijo aún más molesta-

Suleiman: No veo el problema en eso, se que no hubieras tomado esa desicion si no estuvieras completamente segura -dijo seguro de sus palabras-

Tn: Lo que yo quiero sabes es porque la madre sultana se hizo cargo del imperio, cuando yo ordene todo lo contrario -dijo con rabia contenida-

Suleiman: ¿Eso es cierto? -cuestiono a los presentes-

Ibrahim: Sultana, debe estar equivoc...-no dijo más al recibir un fuerte golpe en su rostro-

Tn: ¡No te atrevas a mentirme! ¡todos los Pashas estuvieron hay! -grito más que furiosa-

Hatice: ¡Detente! -dijo acercandose a Tn dispuesta a agredirla, pero los dos guardias se interpusieron en su camino- ¡muevanse!

Suleiman: ¡Hatice! -grito con fuerza haciendo sobresaltar a las sultana, a excepción de Tn- ¡vete a tus aposentos! ¡ahora! -ordeno-

Hatice sorprendida y enojada se reverencio saliendo de la habitación apresuradamente

Suleiman: ¿Quien dirigió el imperio en nuestra ausencia? -cuestiono a Ibrahim-

Ibrahim: La madre sultana, su majestad -dijo cabizbajo-

Tn: La próxima vez, que algo como esto vuelva a ocurrir, no solo será tu cabeza la que rodará, cuando te ordene algo, quiero que lo cumplas, ¿entendido? -dijo seria-

Ibrahim asintió, entendiendo que fue un error haberla desobedeciendo, el nunca había visto a una sultana como ella, por lo que sin más se marchó dando una reverencia

Suleiman se acercó cauteloso a Tn, no quería terminar con un golpe como Ibrahim, la tomó del brazo suavemente, sentandola en el trono, le dirigió una mirada a las sultanas que estaban perplejas con lo que acababan de ver, les hizo una seña para que salieran y así lo hicieron

Tn junto a Suleiman se quedaron hablando, al fin hablaban con normalidad, y no como desconocidos, al cabo de unos minutos ambos se fueron por camino separados

Suleiman no podía dejar pasar lo que acabada de suceder por lo que se dirigió donde los Pashas y averiguar que hiso su madre en su ausencia y no solo ella sino Hurrem tambien

Tn se dirigía a sus aposentos, se había olvidado totalmente de que los principes estaban hay, apenas entro, fue como un deja vu, la misma escena la vez que llegó al palacio, sintió su corazón calentarse

Ella jamás tuvo hijos porque nunca quiso casarse, pero esos muchachos que tenia frente a ella, calentaban su corazón, le daban una razón para seguir adelante, sino, hace años hubiese dejado este mundo para ir a otro mejor