CAPÍTULO 27

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Cuando llegó de nuevo estaba acelerado como la otra vez, sólo que no estaba herido. Me alerté al verlo entrar con salvajismo al cuarto casi echando la puerta abajo.

-Hay que irse ahora.

-¿Qué ocurre?

-Saben donde estamos, hay que irse, rápido.

Se acercó a mí y me agarró la mano con fuerza empujándome hacia la puerta mientras corría detrás de él largándonos del lugar. Eché la mirada atrás y pude percatarme de que había varios coches de policía aparcando en la casa y la misma mujer de pelo negro y piel blanca se encontraba a unos metros de nosotros, la perdí de vista en cuestión de segundos y me resbalé mientras corría.

-No te frenes ahora y mira al frente-. Gruñó.

Nos íbamos adentrando al bosque cada vez más, por el rumbo que iba intuía que iría a la ciudad para escabullirse mejor. Mientras corríamos sentí un gran empujón de su parte hacia atrás. Justo antes de que fuera a caer me aferré a su sudadera y cerré los ojos tratando de no caer. Abrí mis ojos, todo se encontraba en silencio, estábamos de pie, no habíamos caído. No entendí el porqué se había parado tan bruscamente y miré al frente. Unos ojos verdes oscuros que desprendían oscuridad y profundo odio se asomaron y se posaron en mí. Reconocí su mirada, era el mismo chico del aquél día que conocí a Jeff. Me quedé detrás de Jeff y miré al otro sujeto desafiante y a la defensiva. Ví como hizo una leve media sonrisa con sus labios en forma de burla.

-¿Ahora te dedicas a ser niñera de jovencitas?-. Dijo serio y con algo de burla.

Oí un gruñido proveniente de Jeff, dirigió su mirada a la mía, su fría mirada que hacía que los pelos se me pusieran como escarpias, ahora parecía más intimidante teniéndolo tan cerca, pero no me despegué de su sudadera.

-Sólo es una distracción..

-¿Una distracción...o algo más preciado?

-¿Qué dices?

-Te estás ablandando Jeff...no eres el mismo que mató a nuestros padres y mató a más de mil personas..¿Qué está pasando contigo?

-¡Cállate! Sigo siendo el mismo, el mismo que casi acaba contigo, querido hermano.- Dijo ensanchando su sonrisa al pronunciar la última frase.

-Por suerte para mí yo seré quien acabe contigo.

-No pudiste antes no podrás ahora.

-¿Seguro? De la forma tan drástica en la que has cambiado no lo creo.¿Desde cuándo las víctimas te duran tanto?

-Desde siempre-. Dijo serio apretando su cuchillo el cuál había sacado sin darme cuenta.

-Vamos Jeffrey porfavor...he investigado tanto de tu paradero..todas tus víctimas mueren al instante y las torturas un poco, en los secuestros que has echo tus víctimas no duran más de dos semanas...Y ella -. Dijo señalándome con un cuchillo alargado-. lleva contigo desde que te vi por última vez que serían poco más de dos meses.¿A qué estás esperando para matarla?

-La mataré cuando yo decida Liu..

-Entonces parece que vais a morir juntos en un sillón con galletas y la piel arrugada-. Dijo para dar una carcajada histérica cargada de locura-. Te has vuelto tan débil ahora...

Mientras miraba como aquel chico nos miraba con malicia y odio observaba como Jeff apretaba su cuchillo a tal punto que parecía que iba a explotar su mano junto al mango. En el momento en el que pensaba en ello vi como aquel chico "Liu" o algo así se asomaba para verme con su mirada malévola.

-Que ojos grises tan lindos...tienen un color muerto pero tienen más vida que las chispas...¿No te recuerda a mamá Jeff? Oh, tal vez por eso tienes piedad por ella...

En ese instante Jeff me agarró del cuello de la chaqueta y me tiró al suelo con fuerza golpeando mi espalda contra el suelo y quedando inmovilizada por el dolor. Miré hacia arriba confundida, del impacto se había levantado el polvo del suelo y no veía bien. Cuando se aclaró un poco pude verlo mirándome fijamente con una mirada profunda de odio, más que las que me había echo antes. Su hermano estaba atrás suyo parado observando la agobiante escena. Vi sus intenciones y empecé a negar con ansiedad con la cabeza y con una expresión de horror y estremeciéndome haciendo que los dos sonrieran con placer. Traté de arrastrarme por el suelo sin casi poder moverme. No podía creerme que hubiera acabado a manos de dos hermanos psicópatas que iban a acabar conmigo en ese instante y que yo no podía evitarlo.

-Vamos, mátala y terminemos con lo nuestro. Aún queda una pelea pendiente.

Jeff comenzó a caminar hacia mí. Parecía hipnotizado, como si fuera un robot que recibe órdenes, era tan fácil de manipular a pesar de su gran temperamento. Seguía arrastrándome hasta que sentí como me cogían de los pies y tiraban de mí hacia atrás. Clavé las uñas en la tierra mientras trataba de sujetarme. Le dí patadas en las manos tratando de zafarme. A pesar de que quería morir, por simple instinto no podía permitirlo, no así, no ahora. Me levantó hacia el aire acercando su cara a la mía con cuchillo en mano mientras yo me retorcía en el aire y le gritaba de todos los insultos que se me ocurrían. A pesar de los golpes nada le afectaba, si le hubiera metido un puñetazo con una muñequera de púas ni se hubiera inmutado pero le molestaba que no parara de moverme.

-Ella no es más importante que tus otras víctimas, sólo una más, es hora de acabar con ella. Despídete de Madi..

Al pronunciar mi nombre Jeff abrió los ojos como dos platos, más que como ya los tenía y su expresión cambió como si hubiera vuelto de nuevo a su ser. En ese momento recibió un puñetazo en la nariz de mi parte haciendo que volviera a caerme de espalda contra el duro suelo del bosque. Quedé aturdida de nuevo y pude ver cómo se miraba la mano con sangre que le goteaba de la nariz golpeada. Me miró con odio y se abalanzó hacia mí abriendo mi chaqueta y rompiendo mi camisa interior dejando al descubierto la piel de mi escote. Lo miré con profundo horror mientras él preparaba su cuchillo sin quitar los ojos de mi piel ahora desnuda. Lo pasó por la zona y lo levantó dispuesto a clavarmelo. Al instante que comenzó a bajar sus brazos para clavarlo cayó hacia el lado. El otro chico le había propinado una golpiza con una roca haciendo que cayera. No podía deshacerme de mi asombro ante aquel momento y me quedé en la misma posición observando como Jeff había quedado inconsciente.

-Oh..hermanito....que fácil de manipular eres...

De mis ojos comenzaron a salir lágrimas, había estado más cerca de la muerte que las otras veces, sus ojos tenían un toque de tanto odio, tantas emociones negativas, me impactó su mirada, como alguien podía tener una mirada llena de tanta oscuridad. A diferencia de la de su hermano que en ese momento me observaba era más tranquila, oscura pero tranquila.

-Ven, levántate y no me hagas hacer mucho esfuerzo.

Me cogió de la mano y me levantó con fuerza. Me incorporé y con miedo miré a Jeff tendido en el suelo con algo de sangre brotando de su cabeza y su cabello tapando su rostro dejando al descubierto su ojo derecho.

-Vaya...puede llegar a ser tan repugnante...-Dijo mirando mi escote con marcas de aquella vez que abusó de mí.

-Estaba colocado, pude sentir su olor en la boca.

-Cómo no..siempre colocado, p*to drogadicto alcohólico..

-¿Él no suele hacer eso?

-Por lo que investigo de él sólo mata y tortura.

Nos quedamos unos momentos en silencio mientras mirabamos su cuerpo tendido y su cuchillo lejos de él.

-Bueno...si puedo molestarlo de alguna manera y debilitarlo tendré que hacer esto..-. Dijo acercándose a mí.

Veía sus malas intenciones en su expresión seria, parecía que no tenía sentimientos menos cuando hablaba con su hermano.

-Espera, ¿qué haces?-. Dije a la defensiva.

Me cogió de la cintura y me impulsó hacia arriba cogiéndome apoyada a su hombro mientras yo gritaba y me retorcía.

-Cállate-. Dijo dándome un golpe en la cabeza mientras se dirigía a saber dónde y dejaba tirado a Jeff.

(¿Ahora dónde me lleva este loco?)

Otro capítulo!! Y otro encuentro..

SIN PIEDAD [Incompleta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora