Yo sí te veo

Dándome cuenta

Despertó cansado y adolorido, una máscara sencilla de oxígeno le administraba lo suficiente para sentir una sensación molesta en la nariz, sus movimientos alertaron al comandante de la 5-0 mientras se acercaba evitando que se retirase la mascarilla.

-Danno-

-hola Steve-

-oh por dios Daniel, me causaste un susto de muerte!-

La voz del marine se notaba angustiada y molesta o al menos eso pudo deducir.

-que estabas pensando?-

Aunque se lo preguntará no sabría que responder, había actuado por impulso solo había pensado en el bienestar de su hija y del mayor.

-no grites animal! Estamos en un hospital!-

-pero...-

-no lo sé de acuerdo? No sé porque lo hice en ese momento mi cuerpo actuó por impulso para ponerte a salvo a ti y a Grace...donde está Grace?-

-tranquilo ha estado con Kono la chica de mi equipo, ella la ha llevado a la escuela-

-gracias, cuánto tiempo he dormido?-

-dos días-

Un silencio incómodo se instaló entre ambos Steve terminaba de procesar lo que había dicho el mayor, iba a decir algo pero el médico entro mientras empezaba a revisar al rubio quien se quejo levemente cuando tocaron los puntos de sutura.

-tuviste mucha suerte la bala solo rozo tu costado aún así tienes que tener reposo al menos una semana debes pararte y caminar con ayuda de alguien-

La mirada del doctor se vio dirigida al comandante que se mantenía en silencio y quien asintió a sus palabras; cuando habían llevado al rubio el mayor no quiso despegarse de su lado incluso firmo como responsable del rubio.

-yo me retiro le pediré a una enfermera que venga a quitarte el suero y la mascarilla-

-gracias doctor-

Steve suspiro mientras usaba su teléfono para textear con Kono para que trajera a la menor que se encontraba muy preocupada.

-supongo que podría contratar una joven para que me ayude-

-de que hablas?-

-escuchaste al doctor-

-yo te cuidaré-

Un leve sonrojo inundó sus mejillas ante el tono serio del mayor quien seguía enviando mensajes por teléfono.

-haces mucho que no tomo vacaciones, el equipo puede manejarse sin mi un tiempo; tú me salvaste es lo mínimo que puedo hacer-

-ya veo-

Un leve tono de decepción resonó en su voz mientras se acercaba al más bajo.

-te molesta?-

-no, podrías moverte?-

-porque?-

-yo...-

Sus rostros estaban muy cerca ya que el rubio podía sentir el aliento del comandante fusionado con un aroma a café seguramente se quedó toda la noche, tenía un deseo irresistible por besarlo pero la parte de su cordura y orgullo que seguía intacto se lo impedía, Steve también se sentía atraído como un imán hacia el menor verlo en ese estado vulnerable mientras empezaba a desangrarse en sus brazos le hizo tener miedo su carácter no era amable y era sarcástico; siempre lo insultaba pero por más masoquista que eso pareciera le gustaba eso de Daniel.

-yo-

-papá!-

La voz de Grace lo obligó a empujarlo sin fuerza mientras se recomponía colocando una leve sonrisa cuando escucho a la menor entrar.

-mi Gracie-