Bajo el foco del estadio

CAP.2 la visita sorpresa

No tenía muy clara mi decisión sobre el asunto, pero lo que sí tenía claro es que no quería estropear mi relación con Rodri, así que decidí consultarlo con él.

Le escribí un mensaje preguntándole si podía ir a verlo, pero ya habían pasado 2 horas y aún no me había respondido. Que raro, el domingo es su día libre, no tendría que estar haciendo nada... No me preocupé demasiado, igual se había dormido o no estaba demasiado pendiente del teléfono.Me esperé un par de horas más, pero aún nada. 

Me estaba empezando a preocupar, esto no era normal en él. No me respondía ni me cogía las llamadas, estaba de los nervios. 

Al final no me pude contener y fuí a visitarlo a su casa, ¿Y si le había pasado algo? No me podía quedar de brazos cruzados como si nada. Cogí el metro y me fuí para el centro de la ciudad.

Rodri tenía una casa grande y lujosa, ya sabéis como son los sueldos de los futbolistas y para lo mucho que dan.

Al llegar llamé al timbre muy nerviosa, pues no sabía aún qué le pasaba a mi novio. Pasó un minuto y aún no me abría nadie, volví a llamar aún más nerviosa que antes, yo ya me estaba imaginando lo peor. Hasta que de repente se abrió la puerta.

-Sol! No te esperaba aquí. - Me abrió Rodrigo en ropa interior.

-¡Llevo enviando mensajes desde las 10 de la mañana! Pensaba que te había pasado algo!

-Estoy bien, simplemente no había visto los mensajes. - Dijo con un tono preocupado.

-¿Estás bien? Te noto nervioso. - Dije dudosa

-Para nada, pasa pasa.

Me invitó a entrar y cuando entré ví la casa súper desordenada, no era algo própio de él ya que era un chico muy ordenado, y tenía asistentes que lo ayudaban. Pero por casualidad ese día no había nadie en casa.

-Que raro, en 2 años que llevamos de novios nunca había visto esta casa tan vacía y desordenada.

-Bueno... Es que estaba muy cansado.

-¿Seguro que no te pasa nada? Tienes la respiración super agitada.

-Claro que no mujer, ¿qué me va a pasar? -Dijo

-De acuerdo, vamos a tu habitación un rato?

-No no no a mi habitación no! Vayamos al sofá mejor.

Había algo extraño en él ese día. Aunque él me lo negara, yo sabía que algo no iba como tenía que ir, y mi intuición nunca falla, solo era cuestión de tiempo adivinar el motivo.

-Dónde está todo el personal de asistencia? Es la primera vez que veo que no están en casa.

-Les he dado el día libre para que tuvieramos mas intimidad.

-Pero... Si me habías dicho que no me esperabas.

-Bueno... En algún momento del día sabía que ibas a venir.

Nos sentamos en su sofá y puso una película en la televisión mientras me explicaba cómo le habían ido los entrenamientos esta semana, ya que el mundial arrancaba de aquí muy poco tiempo y la presión en los jugadores era máxima.

-El otro día entrenando hice una asistencia buenísima, espero mantener el nivel toda la temporada.- Dijo el poniendo su brazo por encima de mis hombros

Iba a contestarle, cuando de repente se escucha un ruido muy fuerte proveniente de su habitación.

-¿Has oído eso? - Dije intentando levantarme del sofá para ir a ver qué pasaba.

-Oír el que? - Dijo cogiéndome del brazo para que me volviera a sentar.

-Rodri, hay alguien en casa?

-Por supuesto que no, ¿quién tendría que haber? - Me dijo y después me besó

Aunque ese beso me había dejado un poco cofundida, ignoré lo que había pasado por completo, igual eran imaginaciones mías, tendría que dejar de sobrepensar y dejar de darle tantas vueltas a todo.

Dejé que me siguiera hablando y explicando sobre sus entrenamientos, está tan guapo cuando lo hace... Hasta que...

PUM!

El mismo ruido que antes volvió a sonar por toda la casa. Aquí hay algo que no me cuadra...

Sin decirle nada me levanté y me dirigí a su habitación para salir de dudas de una vez por todas.-

-Sol! ¡Vuelve! ¡Seguro que no es nada! Serán los vecinos! - Me dijo

No miré atrás, fuí decidida a su habitación, y abrí el armario...