You Are My Home

Capítulo 3

El prometido de Jiang Yanli llega a Yunmeng. Su llegada hace que Lan Xichen se dé cuenta de sus propias insuficiencias, mientras que Jiang Wanyin intenta luchar contra la tensión sexual entre ellos.

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Jiang Wanyin pone los ojos en blanco cuando Lan Xichen aparece en su puerta a la mañana siguiente. La tormenta nocturna ha dejado a su paso un cielo despejado bajo el cual todo se ve borroso por efecto de la humedad residual. Es un hermoso día que Lan Xichen podría ocupar practicando con la espada, pero está decidido a pasarlo junto a su alma gemela.

Al principio, Jiang Wanyin no parece muy entusiasmado con la idea. De pie frente a sus habitaciones, la vista de Lan Xichen solo logra darle dolor de cabeza. Es demasiado pronto para tratar con él. Lan Xichen lo sigue como una sombra mientras Jiang Wanyin se dirige al Salón del Trono del Loto, lo que indica que está decidido a permanecer a su lado incluso sin su consentimiento.

"Bien, puedes venir", dice Jiang Wanyin, mirándolo de reojo. Lan Xichen hace lo mismo de buena gana, una visión en blanco ahora que sus túnicas han llegado de Gusu. Si Jiang Wanyin no lo conociera, pensaría que tiene una presencia imponente y hasta majestuosa con un perfil agraciado formado por una nariz recta y una frente amplia, pero Jiang Wanyin lo ha visto al borde de ahogarse de pánico en sus ojos y luego postrado ante la cama de su padre, sus facciones llenas de vergüenza. Por eso Jiang Wanyin sabe que el hombre que tiene delante no es más que eso: una idea que le hace sonreír. "Quiero recordarte que tengo muchos deberes y tú tienes que ayudarme con ellos, por lo que cualquier mención de ser almas gemelas está prohibida mientras estemos trabajando; de lo contrario, te romperé las piernas. ¿Está lo suficientemente claro?"

"Sí", dice Lan Xichen, sin ver sonreír a Jiang Wanyin mientras intenta mantener a raya los recuerdos de la noche anterior (y también su comportamiento vergonzoso).

Por lo tanto, se deja llevar al Salón del Trono del Loto, donde Jiang Wanyin toma asiento en el trono, con vistas a la sala llena de tapices con flores de loto en flor. Lan Xichen, por otro lado, se sienta a su derecha frente a una mesa en el suelo, por lo que tiene que mirar hacia arriba para dirigirse a Jiang Wanyin. Debe admitir que el trono parece hecho para él, abriéndose como una flor dorada alrededor de su cuerpo en diseños intrincados que complementan las túnicas de Jiang Wanyin.

Los sirvientes colocan una mesa llena de pergaminos frente al Príncipe Heredero antes de entregarle a Lan Xichen su propio lote. Aunque el volumen de trabajo no lo sorprende ya que también tiene obligaciones como el futuro Rey de Gusu, Lan Xichen no puede evitar mirar hacia arriba confundido.

"¿Esperabas un trato especial? Lo siento, pero tienes que trabajar como todos los demás", dice Jiang Wanyin. Lan Xichen asiente, aunque el motivo de su sorpresa es la confianza que este gesto implica ya que Jiang Wanyin le está dando acceso a documentos privados del reino.

Por supuesto, estos no son documentos confidenciales. Solo misivas de otros reinos, informes de sus subordinados y otras correspondencias que necesitan respuestas corteses, pero nada que pueda poner en peligro los secretos de Yunmeng. Aun así, Lan Xichen aprecia la confianza y responde trabajando duro, deteniéndose para reflexionar sobre sus palabras antes de escribirlas como si estuviera en Gusu.

Gracias a esto, no nota el paso del tiempo hasta que un par de sirvientes ingresan al Salón con bandejas en las manos. De ellos colocan dos cántaros de agua y dos tazas frente a ellos antes de retirarse. Lan Xichen hace una pausa para beber, dejando que el agua sacie su sed luego de muchas horas de trabajo. Supone que debe ser mediodía, por el brillo de la luz que entra por las ventanas, pero cuando mira a Jiang Wanyin, Lan Xichen se da cuenta de que todavía está concentrado en su trabajo.