El Velador De Cenizas

III

Comence a entrenar a Alice como mi padre hizo conmigo y cuidando que no se sobre exigiera demasiado, íbamos poco a poco, yo trataba que Emma (una señora problemática de primera) no interfiriera y se llevara a Alice. Pero había algo raro, yo puedo controlar el fuego y todos sus derivados, Emma puede controlar la magia negra y Alice aún no desarrolla su magia, no tengo idea de cuál podría ser su habilidad...tengo que ayudarla de alguna manera, enseñarle la técnica de sangre todavía era muy arriesgado, tal vez si visito la biblioteca de mi padre encuentre alguna respuesta.

Y eso hice, la casa era bastante grande, bien arreglada (aunque con un estilo anticuado para mi gusto), lleno de cuadros, candelabros y toda clase de cosas antiguas, camine por un rato viendo cada rincón de mi propia casa como si fuera la primera vez que la haya visto hasta que por fin llegue a la biblioteca (era uno de los pocos que podía entrar). Empuje la puerta, pero como era de esperarse estaba cerrado y claro no había una llave para abrir la puerta, el picaporte tenía el agujero que indicaba que una llave iba ahí pero en realidad no había ninguna llave para abrir la puerta, solo era una trampa, podrías tratar con todas las llaves del mundo y aun así no se abriría la puerta.

Ya sabiendo esto puse mi mano sobre el picaporte, cerre los ojos y recite en voz baja el hechizo que mi padre me había enseñado para abrir esta cerradura y cualquier otra, cuando acabe abrí mis ojos y volví a empujar la puerta...había funcionado a la perfección. Entre a la enorme biblioteca, cerre la puerta detrás mío y empecé a recorrer los inmensos pasillos llenos de estanterías con miles de libros antiguos acompañado con ese característico olor a café y a libro viejo...mierda, no tengo la menor idea de donde empezar a buscar, este lugar es tan asombroso y grande...y claro esta vez no me puedo quedar a tontear todo el día...no tengo tiempo que perder.

Me dirigí rápidamente a la sección más grande y vieja de todo el lugar...claramente esa era la sección "familiar" había un millón de libros que integrantes de la familia había escrito o habían ayudado a desarrollar nuestra magia, en este lugar pase mucho tiempo cuando era pequeño, mi padre intento enseñarme una infinidad de hechizos familiares, aunque con el que me quede y adueñe fue la técnica de sangre. Al solo ver las enormes estanterías llenas de libros polvorientos, gruesos y con el suficiente peso para descalabrar a alguien supe que sería un día largo...es mejor que empiece de una vez.

Estuve por horas hojeando cualquier libro que me llamara la atención y si bien no encontré nada que me ayudara con el problema de Alice encontré algo interesante y que me podría ser de mucha utilidad..."Lazo de Sangre"...

Toda mi familia tiene la habilidad de controlar a voluntad su sangre ya sea para defensa o para atacar (por lo menos por parte de mi padre), obviamente se controlar esta habilidad, pero es muy riesgosa, si no tienes un buen control de esta habilidad puedes morir desangrado y dependiendo de la situación en la que la habilidad se desarrolle puede que te llegue a lastimar o no. Incluso yo cuando era pequeño estuve a nada de morir desangrado por culpa de esta habilidad...y por andar de altanero creyendome muy fuerte, por esto mismo no le he querido enseñar esto a Alice, es muy inexperta y pequeña, si lo intenta lo más seguro es que muera.

Como sea, nunca había escuchado del lazo de sangre...la hoja estaba algo sucia y maltratada por lo antigua que era, así que me di a la tarea de descifrar esos geroflicos ya que de verdad me mantenía intrigado ese hechizo.

"El Lazo de Sangre es un hechizo simple, solo se puede hacer entre familia o persona a las que se le tiene un cariño muy especial. Este hechizo sirve para saber si la persona con la que estableciste el lazo está en riesgo o herida, sentirás el dolor que sienta esa persona y viceversa. Pero solo el dolor físico, las emociones quedan totalmente descartadas"

Oh, es un hechizo para gente masiquitsa...y no es por exponerme o que me agrade la sensación de dolor...bueno tal vez si pero este no es el caso, lo que importa es que esto me servirá, claramente Emma no puede enterarse de esto, tengo que memorizarlo y esconderlo.

Se que Emma puede traer a la vida a Alice las veces que se le plazca, se que lo más fácil sería ponerme de su lado y ayudarla con cualquier cosa que me diga como un muñequito obediente, estoy consciente que eso sería lo más fácil y menos arriesgado...esa opción la tomarían muchos y puede que incluso en el pasado haya considerado seriamente esta opción, pero ya estoy harto de ver a mi hermanita sufrir y ver a la otra aprovechándose de eso, como el hermano mayor tengo que romper de alguna manera este horrible ciclo, no importa que tenga que hacer, a quien tenga que matar, salvaré a mi hermana.

Me pase casi todo el día en la biblioteca intentando memorizar el conjuro y cuando empezó a anochecer supe que ya era hora de retirarme de la biblioteca, a pesar de no habermelo aprendido.

-Papá, perdóname por lo que voy a hacer...- Dije en voz baja mientras sostenia la hoja con firmeza la hoja y poco a poco la arrancaba. Cuando la arranque y verifique que no la había roto la guarde en un bolsillo de mi pantalón y salí de la biblioteca como si nada, la cabeza me dolía y ya no sentía el cerebro y mi capacidad de pensar de manera coherente se fue al caño, dios estaba agotado y solo leí UN hechizo que no pude memorizar!! Se ve que me hace falta volver a la escuela...

Camine de manera perezosa hasta mi cuarto, cuando estaba a punto de entrar y perderme en mi cama escuché un grito familiar que encendió todas las alarmas dentro de mi cabeza

-¡Alice!- Salí rápidamente de mi habitación, aunque por las prisas y por lo tonto que me sentía me acabe cayendo al suelo. Me levante con un leve dolor en las piernas, suerte que las habitaciones de mis hermanas estaban a un lado de la mía.

Alice salió corriendo de la habitación de Emma (y como es mi hermana y compartimos la misma neurona se acabo cayendo) Me acerque corriendo a ella y con el corazón a todo lo que da me agache para examinarla, mi vista dio al suelo y...el suelo tenía unas manchas de sangre, eso me altero más, parezco madre sobreprotectora pero después de lo que pasó tengo una justificación para actuar así.

-Diablos, ¿Qué fue lo qué pasó? ¿Quién te hizo esto?-

Ella estaba llorando y con la respiración agitada, utilice la técnica de sangre para que evitar que más sangre se escapara de su débil cuerpo (aún no sabía dónde estaba la herida)

-Tranquila, respira y dime que paso- Ella solo apunto a la habitación de Emma. -¿Ella te hizo esto?-  Pregunte lo más tranquilo que podía cuando en realidad quería ir con Emma y molerla a golpes.

....